Los empresarios reclaman a Sebasti¨¢n flexibilidad para mantener el empleo

Los empresarios tiene claras sus peticiones cuando empieza a arreciar la crisis. El ministro de Industria, Miguel Sebasti¨¢n y el lehendakari Ibarretxe volvieron a escuchar ayer las solicitudes de los patronos: mayor flexibilidad laboral, contenci¨®n sindical y apertura de nuevas v¨ªas de financiaci¨®n. La patronal alavesa SEA, el C¨ªrculo de Empresarios Vascos y la propia CEOE reiteraron el mensaje. Tras estas peticiones aseguraron que est¨¢ su voluntad de mantener el empleo. Sebasti¨¢n recorri¨® ayer Euskadi para compartir los temores de la industria vasca y recordar de forma reiterada las propuestas que ha puesto en marcha el Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Ibarretxe opt¨® por asegurar, el mismo d¨ªa en que se conoc¨ªa que el paro registrado en Euskadi en noviembre subi¨® m¨¢s que la media nacional, que el Pa¨ªs Vasco no alcanzar¨¢ tasas similares a las del conjunto de Espa?a. Y m¨¢s all¨¢, el lehendakari sostuvo que la actual no es tanto una crisis econ¨®mica o financiera cuanto "cultural, de soberbia".

Ibarretxe cree que la crisis es cultural, no econ¨®mica ni financiera

Sebasti¨¢n acudi¨® por la ma?ana a la sede de la corporaci¨®n Mondrag¨®n en compa?¨ªa del secretario general del PSE y aspirante a Ajuria Enea en marzo, Patxi L¨®pez. En su visita de una hora se entrevist¨® con el presidente del mayor grupo industrial vasco, Jos¨¦ Mar¨ªa Aldecoa, y con responsables de sus sectores m¨¢s afectados por la crisis. Comi¨® en Getxo con el C¨ªrculo de Empresarios, club que re¨²ne a los m¨¢ximos directivos de las principales sociedades vascas. Y cerr¨® su estacia en Euskadi en la sede de la Caja Vital en Vitoria en el acto de celebraci¨®n del 30? aniversario de SEA. En todas las citas recibi¨® el mismo mensaje de preocupaci¨®n y de petici¨®n de intervenci¨®n de las administraciones p¨²blicas.

Gerardo D¨ªaz Ferr¨¢n, presidente de la CEOE, presente en este ¨²ltimo c¨®nclave, asegur¨® con claridad que la "moderaci¨®n" de los sindicatos es el camino para evitar alcanzar en 2009 los cuatro millones de parados. El mismo mensaje que traslad¨® el presidente de los empresarios alaveses, Juan Jos¨¦ Azurmendi, quien apunt¨® a las centrales: "Este no es el momento de reivindicar, sino de apoyar, de compartir objetivos y filosof¨ªas, porque de ello depende nuestro futuro".

Adem¨¢s de a los trabajadores y sus representantes, los empresarios se dirigieron directamente a la instituciones p¨²blicas para que se pongan al lado de las empresas.

La respuesta de Sebasti¨¢n se limit¨® a enumerar todas las medidas antic¨ªclicas que ya ha puesto en marcha el Gobierno central. Ibarretxe, quien intervino ante el empresariado alav¨¦s cuando el ministro ya hab¨ªa abandonado la sala, tambi¨¦n detall¨® las medidas puestas en marcha por el tripartito, pero antes lanz¨® un discurso que tild¨® de "provocativo". Bajo la tesis de que no hay ni profetas ni recetas y con "humildad intelectual", sostuvo: "No tenemos una crisis econ¨®mica ni financiera. Es cultural, de soberbia". Abund¨® que es una "hinchaz¨®n" causada por entidades financieras y agencias de valoraci¨®n de riesgos. Alert¨® sobre los "efectos perversos" de la "sobreactuaci¨®n" ante los medios de comunicaci¨®n y apel¨® a la responsabilidad de los propios medios, a los que no se dej¨® entrar en la sala y tuvieron que seguir la intervenci¨®n por un sistema de televisi¨®n.

El lehendakari tambi¨¦n calific¨® la crisis de "posici¨®n". Quien aguante en 2009 aprovechar¨¢ la recuperaci¨®n de la econom¨ªa, ya que la demanda volver¨¢ antes o despu¨¦s. Ibarretxe volvi¨® a criticar las reuniones de grupos como el G-20 y pidi¨® un concierto de las naciones en torno a la ONU. Se mostr¨® tambi¨¦n muy cr¨ªtico con el Banco Central Europeo, del que dijo no cuenta con un contrapoder pol¨ªtico que equilibre sus decisiones.