Montilla advierte al Gobierno que el acuerdo de financiaci¨®n est¨¢ "lejos"

Catalu?a, la primera comunidad aut¨®noma en pasar por La Moncloa para acelerar las negociaciones sobre el modelo de financiaci¨®n auton¨®mica, es tambi¨¦n la que menos conforme est¨¢ con lo planteado hasta la fecha por el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Es la m¨¢s exigente o la que, al menos, propone un cambio m¨¢s radical del actual sistema. Por eso, y a pesar de las optimistas declaraciones de varios dirigentes del PSOE, el consejero catal¨¢n de Econom¨ªa, Antoni Castells, advirti¨® el mi¨¦rcoles de que se est¨¢ "lejos" de alcanzar un acuerdo y que en los t¨¦rminos actuales "no habr¨¢ acuerdo". El presidente de la Generalitat, Jos¨¦ Montilla, se pronunci¨® el mismo d¨ªa en t¨¦rminos muy parecidos: "No est¨¢ cerrado, no est¨¢ todo hecho".

Catalu?a interpreta que se busca "un gran cambio para que todo siga igual"

Tanto Montilla como Castells salieron moderadamente satisfechos del almuerzo del s¨¢bado con Zapatero. "Se han producido avances y eso es bueno. Pero todav¨ªa hay serias discrepancias. A¨²n queda mucha tela que cortar", dijeron fuentes de la Generalitat. Un buen indicador es lo bien que ha ca¨ªdo la propuesta en Galicia, Extremadura y Asturias. No por el hecho en s¨ª, sino porque los intereses que defienden ambas orillas son contrapuestos en sus t¨¦rminos iniciales: si es bueno para unos, no lo es para otros, y viceversa. Contentar a todos es un sudoku imposible de resolver.

Lo que la Generalitat ve con buenos ojos es que el Gobierno acepte, por primera vez, hablar de nivelaci¨®n parcial, es decir, de acotar la solidaridad. Supone un cambio formidable y se garantiza a todas las autonom¨ªas los mismos recursos por habitante para sanidad, educaci¨®n y servicios sociales b¨¢sicos del Estado del bienestar. Es la propuesta catalana recogida en el Estatut. Catalu?a estima que se deber¨ªa redistribuir, como m¨¢ximo, el 75% del dinero que adjudica el modelo y el Gobierno, m¨¢s del 80%. ?se no es un escollo insalvable, aseguran fuentes del Gobierno catal¨¢n.

Lo que hace la negociaci¨®n m¨¢s peliaguda es, en primer lugar, que Catalu?a, con un argumento que comparten Madrid, Valencia y Baleares, quiere que en la poblaci¨®n se tenga en cuenta el peso de la inmigraci¨®n; Andaluc¨ªa, la poblaci¨®n en edad escolar y las comunidades del noroeste, que en el ajuste se tenga m¨¢s en cuenta el envejecimiento o la dispersi¨®n territorial.

El segundo gran escollo es c¨®mo repartir el dinero restante (ese 25% o menos). Seg¨²n fuentes gubernamentales y de los gobiernos regionales, la intenci¨®n del Gobierno es compensar a las comunidades menos din¨¢micas. El resultado final llevar¨ªa a una convergencia en recursos por habitante, pero no hasta el punto de que las m¨¢s pobladas y din¨¢micas se pusieran por delante. Y eso es lo que no agrada a Catalu?a, que lo interpreta como "un gran cambio para que todo siga igual".

Una de las "distorsiones" del modelo actual, reconocida por el propio vicepresidente Pedro Solbes es que las comunidades menos din¨¢micas capten m¨¢s recursos por habitantes que las autonom¨ªas que generan m¨¢s impuestos por su mayor actividad econ¨®mica. Extremadura recibe unos 2.500 euros por habitante y Catalu?a, unos 1.900; con el nuevo modelo, la segunda obtiene un aumento mayor, pero la primera sigue teniendo m¨¢s recursos, explican fuentes de los ejecutivos andaluz y catal¨¢n. "Los planteamientos todav¨ªa no son nada coincidentes", insisti¨® Castells el mi¨¦rcoles.

En el peor de los casos para Catalu?a, Montilla s¨®lo podr¨ªa aceptar pactar, seg¨²n fuentes cercanas al Gobierno catal¨¢n, si el Ejecutivo pone mucho dinero extra encima de la mesa: cuanto m¨¢s recursos, m¨¢s financiaci¨®n por habitante.

Para Castells, la cifra que reclama CiU, 5.630 millones de euros de ganancia para Catalu?a, es una quimera y no tiene credibilidad. Es, de hecho, el sexto c¨¢lculo que la federaci¨®n nacionalista pone encima de la mesa. Para el consejero, el gran objetivo de CiU es "atacar y poner las cosas dif¨ªciles a la Generalitat".

El PSC se ha volcado estos d¨ªas en dar a entender que, si bien el acuerdo definitivo est¨¢ lejos, ¨¦ste puede ser una realidad en enero. Tambi¨¦n ha modulado sus amenazas de romper su actual relaci¨®n con el PSOE. El viceprimer secretario del PSC, Miquel Iceta, destac¨® la implicaci¨®n de Zapatero en las negociaciones y los avances que ha conllevado y evit¨® repetir en este foro cualquier amenaza.