Bl¨¢zquez desea superar pronto la "desfiguraci¨®n" de las bodas gays
El obispo lamenta el "duro golpe" del 'divorcio expr¨¦s'
Casi a la misma hora en que el cardenal Antonio Mar¨ªa Rouco se dirig¨ªa a los asistentes a la multitudinaria celebraci¨®n eucar¨ªstica que hab¨ªa convocado en Madrid, su antecesor al frente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Bl¨¢zquez, celebraba la fiesta de la Sagrada Familia en la bilba¨ªna catedral de Santiago. En su homil¨ªa, el obispo de Bilbao aprovech¨® para criticar, sin citarlo, al Gobierno socialista por algunas de sus reformas legales. La Iglesia, resalt¨®, participa en las dificultades de las familias, "unas padecidas desde su interior y otras infligidas desde el ambiente cultural y desde algunas leyes". Matrimonio homosexual y divorcio centraron sus diatribas.
Bl¨¢zquez fue expl¨ªcito sobre todo respecto al primero. "Deseamos vivamente", enfatiz¨®, que "podamos volver pronto en nuestro pa¨ªs a superar la desfiguraci¨®n sustancial que significa llamar matrimonio a la uni¨®n de dos personas del mismo sexo". Antes, hab¨ªa definido "lo que es y debe ser el matrimonio", como fundamento de la familia "normal": "La uni¨®n estable por amor de un var¨®n y de una mujer para su mutua complementariedad y para la transmisi¨®n de la vida y la educaci¨®n de los hijos".
Sobre el divorcio, el obispo de Bilbao consider¨® "muy preocupante" el crecimiento de su n¨²mero despu¨¦s de la aprobaci¨®n de la ley "del llamado divorcio expr¨¦s", la normativa que facilita y abarata la disoluci¨®n del v¨ªnculo matrimonial y que entr¨® en vigor en julio de 2005. "Dicha ley ha significado un duro golpe a la estabilidad del matrimonio", a?adi¨® el prelado.
Bl¨¢zquez dej¨® espacio tambi¨¦n en su discurso para aludir a la violencia conyugal, de la que dijo que "aunque por desgracia se repitan las noticias, no dejan de producir consternaci¨®n los asesinatos de esposas por sus esposos, que con frecuencia a continuaci¨®n se suicidan". Y a?adi¨®: "Bienvenidas las leyes y disposiciones razonables, pero en todas estas cuestiones existe un problema moral que s¨®lo con motivaciones altas puede ser resuelto en la misma ra¨ªz".
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