Cultura quiere sacar a la luz todo el patrimonio arqueol¨®gico oculto

Por Andaluc¨ªa pasaron los fenicios, los romanos, los visigodos, los bizantinos, los ¨¢rabes, los reconquistadores cristianos, los invasores del ej¨¦rcito napole¨®nico... El resultado de una historia tan agitada es un fabuloso patrimonio arqueol¨®gico. La Junta ha anunciado la conclusi¨®n, ma?ana 8 de enero, del plazo de un a?o para que "los poseedores de objetos y restos materiales integrantes del Patrimonio Arqueol¨®gico comuniquen a la Consejer¨ªa de Cultura sobre los mismos". Por ejemplo, un hombre que posea unas ¨¢nforas romanas o unas monedas visigodas "tiene que comunicar su existencia a la Consejer¨ªa de Cultura y hacer una relaci¨®n detallada que incluya su identificaci¨®n, descripci¨®n, localizaci¨®n y t¨ªtulo de adquisici¨®n v¨¢lido en derecho", comenta Juan Manuel Becerra, jefe de servicio de Protecci¨®n de Patrimonio Hist¨®rico. La medida responde a lo establecido por la Ley del Patrimonio Hist¨®rico de Andaluc¨ªa de 2007.

"La Administraci¨®n quiere saber qu¨¦ patrimonio arqueol¨®gico hay y d¨®nde est¨¢. No condenamos a nadie. La Consejer¨ªa de Cultura no va a coger nada. S¨®lo pide que se informe de lo que se tiene. No dice que se entregue", recalca Becerra. La directora general de Bienes Culturales, Guadalupe Ruiz, se?ala que la gente est¨¢ respondiendo positivamente al llamamiento. Becerra recalca que "ha habido gente que entreg¨® cosas en los ayuntamientos" de su pueblo. "Tras la Operaci¨®n Tertis hubo personas que se asustaron y hubo una tendencia a donar monedas y objetos peque?os a los ayuntamientos", agrega Becerra.

La Operaci¨®n Tertis, impulsada por la Guardia Civil, asest¨® en 2007 un duro golpe al expolio arqueol¨®gico en Andaluc¨ªa y Extremadura. La operaci¨®n concluy¨® con la detenci¨®n de 52 personas y la intervenci¨®n de 300.000 piezas de origen fenicio, ib¨¦rico, romano, visigodo y ¨¢rabe. Un total de 31 yacimientos de Sevilla (14), Badajoz (11), C¨¢diz (3), M¨¢laga (1), Huelva (1) y Ja¨¦n (1) fueron objeto del saqueo de los detenidos, entre los que figuraban 30 expoliadores, 13 intermediarios en la venta de piezas y nueve coleccionistas.

Becerra hace hincapi¨¦ en que el problema del expolio es que cuando se expolia una moneda se est¨¢ destruyendo todo el contexto hist¨®rico en el que se sit¨²a la pieza. E insiste en que el concepto de patrimonio arqueol¨®gico abarca desde una moneda fenicia hasta "elementos de la Guerra Civil. Por ejemplo, se est¨¢n protegiendo casamatas [emplazamientos fortificados de piezas de artiller¨ªa] de la Guerra Civil en Almer¨ªa. Estas casamatas se usaban para la defensa de la costa".