Aprovechando que el Pisuerga...
Los t¨®picos son, entre otras cosas, visiones deformadas de la realidad que la simplifican y la reducen a trazos gruesos donde los matices no existen. En todas las ¨¦pocas y en todos los pa¨ªses se repiten estas maneras de interpretar y la literatura costumbrista ofrece ejemplos muy llamativos.
El lenguaje, la forma de hablar de las comunidades, es uno de los terrenos m¨¢s abonados para los t¨®picos; como ejemplo muy llamativo para los andaluces se puede citar las cr¨ªticas a la Gram¨¢tica de Nebrija, la primera del castellano, de 1492, por parte de los eruditos de Castilla, que se basaban en que al ser el autor andaluz no pod¨ªa hacer una obra de m¨¦rito. La ignorancia de estos eruditos no impidi¨® que con la obra de un andaluz se ense?ara castellano en ambos mundos.
Decir que el PP no respeta a los andaluces es una afirmaci¨®n que nadie cree
La bibliograf¨ªa sobre el tema es muy extensa y la encontramos para todas las formas de usar el sistema com¨²n del castellano o espa?ol. Se trata, por otra parte, de un asunto muy sentido por la sociedad. El andaluz, que no es monol¨ªtico, baste se?alar la cl¨¢sica distinci¨®n entre las formas orientales y occidentales, es un sistema eficaz y perfectamente adecuado para la comunicaci¨®n; en este sentido, cualquier declaraci¨®n que no acepte este b¨¢sico principio, est¨¢ equivocada y muestra ignorancia ling¨¹¨ªstica y falta de sensibilidad sobre el colectivo de los usuarios del sistema.
Con todo, dejando claro mi rechazo, lo m¨¢s censurable es la interpretaci¨®n del PSOE, que cae en un t¨®pico grave, en un error lamentable. Unas declaraciones desafortunadas no pueden ser pretexto, porque hacerlo es demagogia, para presumir del sistema educativo y para insistir en la Andaluc¨ªa virtual, en esa Andaluc¨ªa que s¨®lo existe en la propaganda y en el discurso oficiales.
El PSOE cree que el lenguaje crea la realidad, su realidad, que no tiene nada que ver con que los andaluces seamos de los ¨²ltimos en los niveles de calidad educativa y de los primeros en fracaso escolar; que el paro sea un c¨¢ncer del que el Gobierno andaluz intenta exculparse, que no seamos, ni mucho menos, punta de lanza de la investigaci¨®n y de las nuevas tecnolog¨ªas.
La gesti¨®n de un pol¨ªtico, de una ministra en este caso, debe ser censurada con argumentos por los ciudadanos y por la oposici¨®n. Es leg¨ªtimo criticar la poca claridad expresiva, no el uso del sistema.
Decir que el PP no respeta a los andaluces es una afirmaci¨®n que nadie cree, es seguir con los t¨®picos del agravio y el desprecio por caminos f¨¢ciles para ocultar las verg¨¹enzas de un Gobierno que no gobierna.
El refranero es muy rico y aquello de que !aprovechando que el Pisuerga...!, el PSOE se lanza airado y se atribuye la representaci¨®n de los andaluces. Ya no vale, es demasiado burdo. Los andaluces saben que estamos los ¨²ltimos en casi todos los ¨ªndices de desarrollo y esta realidad lamentable no es consecuencia de unas declaraciones desafortunadas.
El PSOE no tiene el patrimonio de Andaluc¨ªa y el PP sabe defender a todos los andaluces en todos los terrenos y, por supuesto, tambi¨¦n en nuestra forma de hablar. Que nadie se llame a enga?o y cada cosa en su lugar. Las campa?as de confusi¨®n y de enga?o s¨ª que son censurables por encima de la an¨¦cdota.
Antonio Garrido es portavoz de Cultura del PP andaluz
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.