La muerte de Cata destapa el poder de las mafias en Madrid
La Guardia Civil vincula el 'caso Guateque' con las bandas de porteros
Extorsiones. Palizas por deudas de droga. Venganzas. Tr¨¢fico de coca¨ªna y compra de licencias de locales con la implicaci¨®n de funcionarios del Ayuntamiento de Madrid. Los protagonistas del submundo de la noche madrile?a se conocen, se protegen y se hacen favores. Pero a veces, tambi¨¦n se pelean. Y cuando lo hacen, la cosa acaba a tiros.
La muerte de Catalin Stefan Craziun, Cata, lugarteniente de la banda de Ivo, El B¨²lgaro, y asesinado a tiros en la puerta de la discoteca Heaven el pasado lunes, presuntamente por un integrante de la banda rival de los Miami, ha destapado las luchas entre las mafias por hacerse con el control de la seguridad en los bares. Detr¨¢s hay mucho m¨¢s. El relato de todas estas conexiones salpica la Operaci¨®n Guateque, la investigaci¨®n de la Guardia Civil sobre el caso de corrupci¨®n municipal en el Ayuntamiento de Madrid. Se trata de una pieza separada en el sumario del caso que instruye desde noviembre de 2007 el juez Torres en el juzgado n¨²mero 32 de Plaza de Castilla. Tras horas de escuchas telef¨®nicas, extractos de cuentas y sociedades mercantiles, no consiguieron imputar responsabilidad penal a los implicados. El Ministerio Fiscal tuvo que sobreseer el caso. Pero el informe es un inquietante retrato de la noche madrile?a.
Todo empieza con un tel¨¦fono m¨®vil. El que iba a permitir a Joaqu¨ªn Fern¨¢ndez de Castro, ex jefe de Evaluaci¨®n Ambiental en el Ayuntamiento de Madrid e imputado por el caso Guateque, comunicarse desde la c¨¢rcel con quien quisiera. Sin pasar por la disciplina del centro penitenciario. Se lo consigui¨® a principios de 2008 su hijo, Acisclo Fern¨¢ndez Rodr¨ªguez que, adem¨¢s, es el propietario de la discoteca Dink (el local con m¨¢s denuncias de los investigados en el caso Guateque). La Guardia Civil hab¨ªa pinchado su tel¨¦fono. El intermediario ser¨ªa un tal Lauro, un colombiano nacionalizado espa?ol a quien la Guardia Civil define como la persona "que m¨¢s coca¨ªna mueve en Madrid" y que dirige, desde un conocido gimnasio de la ciudad, una banda de "matones de feria dispuestos a todo".
La historia del m¨®vil llev¨® a los agentes a descubrir un entramado de relaciones que "pone de manifiesto la existencia de una tupida banda de presuntos delincuentes implicados en la comisi¨®n de delitos de tr¨¢fico de drogas, extorsiones, secuestros y un largo etc¨¦tera", seg¨²n el informe.
El presunto cabecilla de la organizaci¨®n, seg¨²n los agentes, es el colombiano Lauro, amigo adem¨¢s, de Ivo, El B¨²lgaro, uno de los jefes de las mafias que controlan la seguridad de las discotecas e imputado por secuestro. En las conversaciones intervenidas aparece el nombre de Ivo. Seg¨²n los informes policiales, El B¨²lgaro es el cabecilla de una banda de "matones" a los que contrata a trav¨¦s de su empresa de seguridad, Apolo Check. En el grupo se encontraba tambi¨¦n Catalin Stefan Craziun, asesinado el pasado lunes en una c¨¦ntrica discoteca de Madrid.
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