El frac verde de Beethoven y la innovaci¨®n europea
La noche del estreno de su Novena Sinfon¨ªa, Beethoven vest¨ªa un frac verde. Sent¨ªa inquietud por el singular color de su vestimenta. Sin embargo, no le importaban ni su sordera para dirigir a la orquesta, ni el reto de equiparar coro e instrumentos en una sinfon¨ªa, algo ins¨®lito y arriesgado, especialmente en Viena, donde los gustos eran conservadores. Al concluir las ¨²ltimas notas del Himno a la Alegr¨ªa el p¨²blico ovacion¨® al maestro, quien continuaba de espaldas, marcando compases con los brazos, desconociendo que la orquesta hab¨ªa concluido. La audiencia entonces supo reconocer el potencial disruptivo de La Novena, algo que no sucede siempre con las nuevas propuestas. Adem¨¢s, el cuarto movimiento se ha convertido en una de las melod¨ªas m¨¢s populares de todos los tiempos y en el himno europeo. Es ¨¦sta una buena referencia hist¨®rica para comentar el A?o Europeo de la Innovaci¨®n y la Creatividad, que se celebra en el presente 2009. Esa falta de reconocimiento del potencial de los cambios acaba de manifestarse con la reforma universitaria que implica la implantaci¨®n del proceso de Bolonia. Un proceso que persigue en Espa?a no s¨®lo la homologaci¨®n de t¨ªtulos sino tambi¨¦n el cambio de modelo econ¨®mico para impulsar m¨¢s la innovaci¨®n y la transferencia de conocimiento de las universidades a las empresas.
Espa?a tiene programas. Es necesario que los protagonistas del proceso ejerzan su liderazgo
Europa ha sido cuna de la innovaci¨®n en el ¨¢mbito del conocimiento, de las ciencias y de las artes. Las universidades nacieron en Europa y su modelo contempor¨¢neo, basado en la especializaci¨®n del conocimiento por escuelas y departamentos, fue inspirado por Von Humboldt e implementado por primera vez en la instituci¨®n ep¨®nima de Berl¨ªn en 1810. Sin embargo, con frecuencia se alude a la "Vieja Europa" no solamente para destacar su ingente acervo cultural, sino tambi¨¦n para criticar la aparente esclerosis innovadora de nuestro continente, manifestada en la p¨¦rdida de competitividad y la falta de transferencia efectiva entre investigaci¨®n y desarrollo.
Esa percepci¨®n de letargo innovador europeo es, sin embargo, infundada. En algunos sectores econ¨®micos como el energ¨¦tico, el automovil¨ªstico, el farmac¨¦utico, el alimentario, o incluso el financiero -como demuestra la crisis actual- las empresas europeas son m¨¢s innovadoras que sus rivales de otros continentes. La ¨²ltima edici¨®n del European Innovation Scoreboard conclu¨ªa que Suecia, Suiza y Finlandia encabezaban la clasificaci¨®n de pa¨ªses m¨¢s innovadores del mundo, por delante de Estados Unidos, Israel o Jap¨®n. En el mismo grupo de cabeza se encontraban tambi¨¦n Alemania, Dinamarca y Reino Unido. El estudio basaba su clasificaci¨®n en un sofisticado sistema de indicadores, que inclu¨ªan factores estructurales, inversi¨®n en I+D, gesti¨®n de la propiedad intelectual y el fen¨®meno emprendedor. En general, detr¨¢s de todas las experiencias exitosas se identificaban la adopci¨®n de una estrategia a largo plazo y el liderazgo de las instituciones y protagonistas involucrados en impulsar la innovaci¨®n.
Ese mismo estudio situaba a Espa?a en la tercera categor¨ªa, la de pa¨ªses "moderadamente innovadores", junto a Chipre, Eslovenia, Estonia e Italia. Con todo, en los ¨²ltimos a?os algunas multinacionales espa?olas como Iberdrola, Abengoa, Inditex, BBVA o Banco Santander, por mencionar s¨®lo algunas, se han convertido en empresas admiradas globalmente. Espa?a ya tiene una serie de programas que forman la estrategia de innovaci¨®n del Gobierno, entre las que se incluyen Universidad 2015, la iniciativa encaminada a la modernizaci¨®n de nuestras universidades, adaptaci¨®n del Acuerdo de Bolonia, que mejorar¨¢ nuestra convergencia con Europa en el ¨¢mbito de la innovaci¨®n. Ahora es tambi¨¦n necesario que los protagonistas del proceso -representantes de instituciones, empresas y universidades- ejerzan su liderazgo, tomen la batuta y vistan sus correspondientes "fracs verdes".
Santiago ??iguez de Onzo?o es rector de IE Universidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.