Gaddafi, 'rey de reyes africanos'
El l¨ªder libio recupera su sue?o de unir a ?frica bajo su batuta
A su larga lista de t¨ªtulos -Gu¨ªa de la gran revoluci¨®n, Gu¨ªa supremo, etc¨¦tera-, el l¨ªder libio Muammar el Gaddafi, de 66 a?os, acaba de a?adir uno m¨¢s: Rey de los reyes tradicionales africanos. De esta manera, le describe su s¨¦quito desde que, a principios de semana, fue elegido en la cumbre de Addis Abeba presidente de la Uni¨®n Africana, organizaci¨®n que agrupa 53 pa¨ªses del continente.
La designaci¨®n fue casi por casualidad. El puesto correspond¨ªa por rotaci¨®n a un pa¨ªs del norte de ?frica. Marruecos no es miembro de la UA, Mauritania ha sido sancionada con la suspensi¨®n de su participaci¨®n y los dem¨¢s jefes de Estado de la regi¨®n no acudieron a la cita.
El cargo cay¨® pues en manos de Gaddafi. Y lo que iba a ser una cumbre de 48 horas dur¨® cuatro d¨ªas. El l¨ªder libio quiere que durante el a?o que dure su presidencia la UA cumpla su sue?o de crear los Estados Unidos de ?frica. No todos los pa¨ªses miembros est¨¢n entusiasmados. Por eso se alargaron los debates.
El sue?o del coronel suscita escepticismo porque Libia trata mal a la inmigraci¨®n
Gaddafi apareci¨® en la capital et¨ªope ataviado con una toga brocada color oro y con un birrete a juego. Su indumentaria era la habitual, pero no as¨ª su s¨¦quito, al que incorpor¨® a una decena de jefes tribales que la delegaci¨®n libia describ¨ªa como "reyes tradicionales africanos".
No en balde, Gaddafi est¨¢ convencido de que lo que de verdad importa en ?frica son las tribus. "Carecemos de estructuras pol¨ªticas [en ?frica]; nuestras estructuras son sociales", lanz¨® a los mandatarios. "Nuestros partidos pol¨ªticos son partidos tribales y por eso ha habido derramamiento de sangre". De ah¨ª que en Libia est¨¦n prohibidos.
Pese a que en septiembre har¨¢ 40 a?os que Gaddafi ejerce el poder en Libia -protagoniz¨® un golpe de Estado militar-, el l¨ªder sigue marcado por sus or¨ªgenes beduinos. Naci¨® en un pueblo de la regi¨®n de Sirta, en el seno de la tribu qadhadfa.
Junto con su visi¨®n tribal, otra de las tendencias de fondo de la trayectoria pol¨ªtica del c¨¦lebre coronel libio es su empe?o en desempe?ar un papel en ?frica. Acaso esta pasi¨®n africana se haya visto acentuada por el rechazo que suscita entre muchos l¨ªderes ¨¢rabes, que ven en ¨¦l a un personaje estramb¨®tico.
En los a?os ochenta, Gaddafi financi¨® a los movimientos rebeldes de varios pa¨ªses africanos, empezando por sus vecinos de Chad y N¨ªger. Esas aventuras desestabilizadoras fueron un motivo, no el m¨¢s importante, de su exclusi¨®n de la comunidad internacional. La principal raz¨®n de su marginaci¨®n fue la implicaci¨®n de sus servicios secretos en los atentados contra aviones de la estadounidense Pan Am, en 1988, y de la francesa UTA, al a?o siguiente. En total causaron 440 muertos.
Veinte a?os despu¨¦s, Gaddafi reanuda con su sue?o africano, pero esta vez por la v¨ªa pac¨ªfica. No en balde se ha convertido en un miembro relativamente sensato de la comunidad internacional al que Condoleezza Rice, ex secretaria de Estado norteamericana, visit¨® en septiembre. Hace tan s¨®lo un mes fue el rey de Espa?a, don Juan Carlos, el que se desplaz¨® a Tr¨ªpoli.
"Necesitamos que las gentes de ?frica canalicen sus energ¨ªas para empujarnos hasta alcanzar la fase final: los Estados Unidos de ?frica, que ser¨¢n como son hoy en d¨ªa los Estados Unidos de Am¨¦rica", asegur¨® Gaddafi en su discurso ante la cumbre.
Para ello, prosigui¨®, es necesario "un gobierno de la uni¨®n". "Tendr¨¢ que haber secretarios [ministros], coordinadores de pol¨ªticas como Defensa, Asuntos Exteriores", que hoy en d¨ªa "son divergentes". Gaddafi mencion¨® incluso la creaci¨®n de un ¨²nico ej¨¦rcito africano, de una moneda ¨²nica y de un mismo pasaporte.
En 12 meses hab¨ªa que sentar los cimientos de una uni¨®n que Europa, un continente mucho m¨¢s homog¨¦neo, no ha logrado en m¨¢s de medio siglo. El sue?o libio se top¨® con las reticencias de varios pesos pesados africanos, empezando por Sur¨¢frica.
Al final, fue Jean Ping, el presidente del ¨®rgano ejecutivo de la UA, el encargado de explicar a la prensa el laborioso compromiso alcanzado. "El prop¨®sito inicial fue de crear un gobierno de la uni¨®n, pero los Estados miembros se?alaron durante el debate que eso ten¨ªa unas implicaciones claras y que no se hab¨ªa llegado a esa fase", aclar¨®. "Ser¨¢ mejor pasar de una comisi¨®n a una autoridad".
La comisi¨®n que preside Ping pasar¨¢ a llamarse autoridad, tendr¨¢ algunas competencias m¨¢s y un mayor presupuesto. El cambio de nombre tardar¨¢ a?os porque requiere ser ratificado por los dos tercios de los pa¨ªses miembros. Aun as¨ª, Gaddafi se mostr¨® satisfecho: "Esto debe de ser aplaudido y ahora hay que aplicar la decisi¨®n".
Pese a haber sido rebajado, su proyecto sigue suscitando escepticismo en ?frica. Primero, el maltrato que depara a los subsaharianos en Libia -denunciado por ONG de derechos humanos- no hace de Gaddafi el m¨¢s indicado para dar lecciones de panafricanismo.
"Pido que alguien, deprisa, despierte a Gaddafi de su sue?o y le haga volver a la realidad", escrib¨ªa Sylva Nze Ifedigbo en el Nigerian Muse de Lagos. "?frica tiene demasiados problemas para perder el tiempo discutiendo del panafricanismo". "Lo que necesitan nuestros pueblos es pan en la mesa".

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.