Curso escolar

He le¨ªdo atentamente su reportaje sobre el adelanto del curso escolar. Y, como siempre, m¨¢s de lo mismo: uso tendencioso de las fechas (se silencia que cada a?o empezamos antes y acabamos despu¨¦s), se confunde horario con los alumnos y horario del profesor (¨¦ste empieza el 1 de septiembre) y se habla de la escuela o el instituto no como centros de ense?anza, sino como guarder¨ªas. No s¨¦ cu¨¢l es el porcentaje de personas que trabajan ma?ana y tarde (que s¨ª tienen desajuste horario con sus hijos), pero s¨ª s¨¦ que para muchas personas que s¨®lo trabajan de ma?ana el hecho de que los ni?os est¨¦n en casa por la tarde les supone no un drama, sino un problema de no saber qu¨¦ hacer con ellos.

Y lo mejor, la sesuda opini¨®n de los catedr¨¢ticos, que llegan a una impresionante conclusi¨®n: los pa¨ªses del norte empiezan en agosto, pero resulta que Grecia, Italia, Portugal y Espa?a en septiembre. ?Ser¨¢ porque en los despachos de los sesudos catedr¨¢ticos no se nota que es agosto o julio con el aire acondicionado? ?Ser¨¢ que no hay institutos ni colegios que dispongan de aire acondicionado, en regiones en las que se llega a los 40 grados en junio, y no digamos en septiembre? ?Ser¨¢ que en Finlandia agosto es un mes templado?

Puede que el calendario est¨¦ mal repartido, pero no es cuesti¨®n de horas. Y en cuanto a dar clase en verano, cambio aula de Extremadura o Andaluc¨ªa por despacho climatizado perteneciente a quien opina sin bajar nunca a pie de obra.