Luis Andr¨¦s Edo, hist¨®rico anarquista
Dedic¨® su vida a la difusi¨®n de las ideas libertarias y milit¨® en la CNT
Con la muerte de Lu¨ªs Andr¨¦s Edo, fallecido ayer tras una insuficiencia cardiorrespiratoria, desaparece una de las figuras hist¨®ricas de la CNT. Hab¨ªa nacido el 7 de noviembre de 1925, en Caspe. Muy pronto se traslad¨® a Barcelona, donde conoci¨® la experiencia educativa de la Escola Nova Unificada (CENU) y vivi¨® el estallido revolucionario contra la sublevaci¨®n militar del 18 de julio y la crueldad de los bombardeos durante la Guerra Civil.
Como a menudo comentaba, de los duros a?os de la postguerra arranca su inquebrantable adscripci¨®n al movimiento libertario, primero, a trav¨¦s de las lecturas y, posteriormente, a trav¨¦s de los debates y la acci¨®n sindical clandestina, que lo llevaron a participar en las primeras huelgas de Barcelona contra la dictadura y a declararse pr¨®fugo del servicio militar, lo que supuso su primera detenci¨®n en el castillo de Figueras en 1947.
Consigui¨® escaparse a Francia, pero fue de nuevo detenido tras su entrada clandestina en Espa?a en 1948. Desert¨® por segunda vez y march¨® al exilio, donde se convirti¨® en una figura carism¨¢tica para todas las corrientes libertarias. Despu¨¦s del congreso de reunificaci¨®n de la CNT de 1961 se integr¨® en Defensa Interior, el organismo creado para combatir el franquismo.
En 1966, es detenido en Madrid y hasta 1972 pas¨® por las c¨¢rceles de Carabanchel, Soria y Segovia, donde escribi¨® La Corriente, libro revisado y editado en 2002. Entre 1972 y 1974 estuvo en Par¨ªs, pero al volver a Espa?a fue nuevamente detenido el 1 de mayo de 1974, permaneciendo en prisi¨®n hasta la amnist¨ªa de 1976.
Tras la reconstituci¨®n de la CNT de Catalu?a, el 29 de febrero de 1976, form¨® parte del Comit¨¦ Regional, del que fue Secretario General y director de Solidaridad Obrera. Pero, todav¨ªa en 1980, volver¨¢ de nuevo a la c¨¢rcel por unos meses. De esos a?os guardan sus compa?eros los mejores recuerdos, cuando puso toda su capacidad organizativa al servicio de los m¨¢s d¨¦biles y marginados, los presos sociales.
En la Modelo, Edo se convirti¨® en una referencia para los presos antifranquistas y le complac¨ªa recordar c¨®mo a trav¨¦s de un sofisticado, a la vez que simple, sistema de comunicaci¨®n interno se iban transmitiendo por toda la c¨¢rcel las noticias m¨¢s importantes, como la muerte del dictador. Ese mismo sistema serv¨ªa para organizar las acciones de protesta y de solidaridad con los presos que se encontraban en las condiciones m¨¢s duras de incomunicaci¨®n o de castigo.
Desde mediados de los ochenta, Edo dedic¨® todas sus fuerzas a difundir, mediante escritos, conferencias y debates, la necesidad de superar la rigidez de las estructuras organizativas e impulsar la corriente que deber¨ªa aglutinar el movimiento libertario en todos sus sentidos, matices y complejidad. Su ¨²ltima aportaci¨®n era la apuesta por la formaci¨®n de municipios libres. En su ¨²ltima obra, La CNT en la encrucijada. Aventuras de un heterodoxo (2006) recoge buena parte de su recorrido vital y de sus reflexiones.
En los ¨²ltimos a?os, gustaba de reunirse con los amigos que hab¨ªa ido forjando a lo largo de una vida dedicada a difundir las ideas libertarias y de asistir a actos donde se debat¨ªa la historia del anarquismo.
Sin duda, con la muerte de Edo desaparece una parte de nuestra historia -l¨¢stima que no llegara a publicar el libro que actualmente se llevaba entre manos- y, sobre todo, desaparece un infatigable luchador por las libertades y la dignidad de las personas que, como reconocen todos los que lo conocieron con independencia de adscripciones ideol¨®gicas, era capaz de dialogar y de abrirse a las ideas de los dem¨¢s con una desbordante dosis de humanidad. Como dec¨ªa ayer el recordatorio del Ateneu Enciclop¨¨dic Popular: "Que la tierra te sea leve, Lu¨ªs Andr¨¦s".
Antoni Segura es catedr¨¢tico de Historia Contempor¨¢nea de la Universidad de Barcelona.
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