Estudiantes abate a un enorme Ricky
El equipo madrile?o da la sorpresa ante un DKV Joventut fiado s¨®lo a su sensacional joven figura
La sorpresa de la Copa la llevaba el MMT Estudiantes bajo el brazo. Arrambl¨® con el DKV Joventut y, adem¨¢s, lo consigui¨® cuando un coloso, Ricky Rubio, parec¨ªa en v¨ªas de solucionar de un plumazo el estropicio al que se ve¨ªa abocado su equipo. La r¨¦plica se la dio un escolta esloveno, Samo Udrih, no muy conocido, no muy descollante en las estad¨ªsticas, pero demoledor en la cita copera en la que Estudiantes se hab¨ªa colado en su calidad de anfitri¨®n. La sorpresa de los cuartos de final, corri¨® de su cuenta. Pero eso fue despu¨¦s de levantar un partido rar¨ªsimo. Rampl¨®n al principio, desenfrenado en la segunda parte, convulso y emocionante hasta el infinito al final.
Era un duelo como muchos, m¨¢s bien tenso y poco vistoso, hasta que Ricky Rubio dijo hasta aqu¨ª hemos llegado. Con su equipo la mayor parte del tiempo haciendo la goma y jugando a la ruleta de los triples, cuando Estudiantes de la mano de un esplendoroso Udrih abr¨ªa su artiller¨ªa y empezaba a ver posibilidades de llevarse el gato al agua, apareci¨® el fen¨®meno de 18 a?os. Todo cambi¨®. Faltaban 10 minutos pero ?qu¨¦ 10 minutos! Valieron mil veces m¨¢s que todos los anteriores.
La r¨¦plica la dio Udrih, demoledor y esplendoroso cuando abri¨® su artiller¨ªa
Ricky, que no hab¨ªa empezado bien, que hab¨ªa sumado r¨¢pido tres faltas, volvi¨® a la cancha. Los suyos iban a remolque (53-51). En esas, en un abrir y cerrar de ojos, sum¨® cuatro asistencias, cuatro recuperaciones de bal¨®n y dos puntos. El DKV le hinc¨® el diente al asunto. Se fue en el marcador (61-67). Faltaban poco m¨¢s de tres minutos y Estudiantes empezaba a estar contra las cuerdas. Le salv¨® la garra de Brewer, la consistencia de su equipo y, por encima de todo, Udrih, que mantuvo un pulso con Ricky de alta escuela, admirable, como hac¨ªa mucho que no se ve¨ªa. Estudiantes recuper¨® el terreno de golpe, con un parcial de 6-0, y a partir de ese momento result¨® todo vertiginoso. Ricky incidi¨® en la misma jugada: o bien finalizaba ¨¦l o bien le met¨ªa el bal¨®n a Hern¨¢ndez-Sonseca. Estudiantes replicaba con un triple de Brewer y constantes lanzamientos de Udrih. Los fallos en los tiros libres de Hern¨¢ndez-Sonseca resultaron trascendentales. El Joventut, que empez¨® jugando por fuera, acumulando hasta 30 intentos triples, con un impresionante acierto inicial que despu¨¦s se desvaneci¨® por completo, lo pag¨® caro.
Apenas hay jugadores del Joventut que carezcan de munici¨®n y licencia para lanzar desde m¨¢s all¨¢ de la l¨ªnea de 6,25 metros. Concluy¨® la primera parte con m¨¢s lanzamientos triples (17) que de dos (14). Anot¨® seis triples, aportados por cinco jugadores diferentes y un total de ocho que lo intentaron. La ensalada de n¨²meros es reveladora. Pero no pod¨ªa pasarse todo el partido de la misma manera, m¨¢xime cuando Estudiantes, superior en el rebote y en el interior de ambas zonas, logr¨® revertir su desastroso inicio en el tiro exterior.
Fue entonces cuando se alz¨® la figura de Ricky. Pero se qued¨® demasiado solo. El Joventut se qued¨® corto en alternativas y Estudiantes, despu¨¦s de capear el temporal, logr¨® que prevaleciera su mejor juego de conjunto. Ricky acab¨® con 16 puntos, siete asistencias, tres rebotes y seis recuperaciones; Udrih, con 23 puntos, seis rebotes y dos asistencias. El esloveno se sali¨® con la suya y Estudiantes, despu¨¦s de mucho tiempo, se dio una alegr¨ªa de las que hacen ¨¦poca.
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