La ruptura nacionalista lleva al empate
El abandono de la coalici¨®n le puede costar dos esca?os al PNV y tres a EA, seg¨²n el sondeo del Gobierno vasco que refleja la igualdad de Ibarretxe y L¨®pez
El viejo Uzturre (Jes¨²s Insausti, dirigente del PNV ya fallecido) fue profeta en su tierra vasca. Un a?o despu¨¦s de la fratricida escisi¨®n del PNV, que alumbr¨® el nacimiento de Eusko Alkartasuna (EA) por obra y gracia del ex lehendakari Carlos Garaikoetxea, sentenci¨®: "Nuestra ruptura s¨®lo ha sido beneficiosa para los que en Euskadi son portadores de la bandera del nacionalismo espa?ol". Transcurridos 22 a?os desde aquel septiembre de 1986, cuando dentro de la familia nacionalista padres e hijos, hermanos y cu?ados, t¨ªos y sobrinos dejaron de hablarse para seguir caminos separados, la historia se repite: PNV y EA se ven las caras en las urnas y suspiran, divididos, porque PSE y PP les pueden desalojar del Gobierno.
Los datos de la encuesta de ayer del propio Gobierno vasco confirman estos temores. El tripartito se antoja imposible, aunque Ibarretxe volver¨¢ a ganar. El m¨¢ximo de dos esca?os de diferencia entre PNV y PSE-EE alimenta la inquietud nacionalista, aunque los socialistas advierten de que este dato pueda ser "una estratagema" para azuzar las conciencias de miles de indecisos, sobre todo en los pueblos, para que vayan a votar a defenderse de "los espa?oles que vienen".
Por antonomasia pol¨ªtica, toda ruptura penaliza a sus culpables. Bajo esta amenaza inexorable, PNV y EA afrontan el reto del pr¨®ximo 1-M sobre dimensiones bien contrapuestas. Los peneuvistas, eso s¨ª, salen como agraviados en este caso bajo el argumento de que "nosotros nunca quisimos romper". En el fondo, les preocupa la soledad porque sienten el v¨¦rtigo que supone "el ansia de cambio" detectado en todas las encuestas, aunque, claro, contrarrestan este dato inquietante con la confianza de que "Ibarretxe es el mejor valorado para seguir gobernando".
En cuanto a EA, su sector oficial -dentro de un partido con unos 6.000 afiliados- ha elegido madurar desprovisto del manto protector del PNV despu¨¦s de compartir Gobierno en los ¨²ltimos diez a?os. Su divorcio obedece "al hartazgo" que le ha merecido al sector identitario del partido -¨ªntimamente ligado al esp¨ªritu Garaikoetxea- la pol¨ªtica de "brazos ca¨ªdos" del PNV en la defensa del derecho a decidir inspirada por Ibarretxe, a quien, finalmente, no salvan de la quema. Bajo el liderazgo de Unai Ziarreta, EA asume que se juega su futuro el 1-M apostando por un polo soberanista que, sin embargo, no ha provocado las adhesiones esperadas en el mundo abertzale. Por eso, los m¨¢s entusiastas apuestan por reunir 4 o 5 parlamentarios. Enfrente se encuentra el sector mayoritario de EA de Guip¨²zcoa, extremadamente cr¨ªtico con abandonar al PNV, hasta el punto de que algunos simpatizantes podr¨ªan "objetar" y dar "un voto cr¨ªtico" a Egibar, aunque en conciencia, dicen, "siempre hemos estado del lado de Imaz".
En el PNV hay "mucho cabreo" por esta abrupta ruptura de EA, aunque, l¨®gicamente, para su prop¨®sito de asegurarse el gobierno les preocupa mucho menos que la ausencia de la izquierda abertzale en el Parlamento. Bien es cierto que desde el PNV se relativiza el impacto electoral, ya que la ¨²ltima referencia del m¨²sculo de EA refleja poco m¨¢s de 50.000 votos (en las generales de 2008).
Pero ni Urkullu ni Ibarretxe se ocupan de EA en la campa?a. Al rev¨¦s, s¨ª. Ziarreta trata de situar al PNV en el sector autonomista, "incapaz de plantar cara de una vez al Estado y entregado al PSOE en Madrid", como gustan repetir. Los aludidos se muerden la lengua. Saben que si responden dar¨ªan munici¨®n dial¨¦ctica a PSE y PP porque, entonces, Ibarretxe emerger¨ªa como el lehendakari de los cuatro ¨²ltimos a?os, abanderado del "t¨² a t¨² con el Estado". Y, claro, ahora, s¨®lo toca hablar de crisis.
?ltima encuesta
- El actual tripartito vasco se quedar¨ªa el 1-M a cuatro esca?os de la mayor¨ªa absoluta: PNV (27), EA (4) y EB (3), seg¨²n los datos de la encuesta del Gobierno vasco.
- El PSE, con 26 esca?os (+1), dispondr¨ªa de una opci¨®n de gobierno si obtiene el respaldo del PP, al que se le asignan 13 esca?os. El portavoz del Partido Nacionalista Vasco en el Congreso, Josu Erkoreka, ve esa opci¨®n de gobierno "no s¨®lo posible, sino probable", seg¨²n reconoci¨® ayer en en un encuentro digital con los lectores de elpais.com.
- Aralar sube de 1 a 2 y el partido de Rosa D¨ªez se queda fuera de la c¨¢mara.
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