Signos visibles ayudan a detectar la fibromialgia
La fibromialgia afecta aproximadamente al 3% de la poblaci¨®n, la mayor¨ªa mujeres. Entre otros s¨ªntomas, causa dolor muscular, fatiga, depresi¨®n e insomnio. Diagnosticarla puede llevar entre dos y tres a?os, incluso m¨¢s, porque hasta ahora la ¨²nica manera consiste en ir descartando todas las enfermedades reumatol¨®gicas y neurol¨®gicas que tienen los mismos s¨ªntomas. A eso hay que a?adir el escepticismo y las dudas que plantea una enfermedad que no presenta alteraciones f¨ªsicas visibles. Sin embargo, por primera vez, investigadores del hospital del Mar-IMIM de Barcelona han comprobado que las personas que padecen la enfermedad s¨ª que tienen lesiones musculares, aunque s¨®lo observables a nivel molecular.
"Hay se?ales sutiles de lesi¨®n, de peque?as roturas en algunas estructuras. Sufren un continuo proceso de destrucci¨®n a nivel celular", afirma Quim Gea, investigador del IMIM. En personas sanas, este proceso de lesi¨®n-reparaci¨®n ocurre cuando se practica alg¨²n deporte. En condiciones normales, tras la lesi¨®n, en la reparaci¨®n muscular intervienen dos mol¨¦culas: las citoquinas IL-1 y la TNF-alfa. Ambas se encargan de regular el proceso inflamatorio y la respuesta reparadora, que en personas sanas acaba por fortalecer el m¨²sculo.
Mala reparaci¨®n
Sin embargo, "quienes padecen fibromialgia se lesionan mucho y se reparan mal", explica Gea. En el m¨²sculo de los enfermos, los niveles de estas dos citoquinas se encuentran alterados, sobre todo coincidiendo con la aparici¨®n de los s¨ªntomas, a?ade el m¨¦dico. Cuando aparece el dolor, la lesi¨®n en una persona con fibromialgia podr¨ªa ser el equivalente al de alguien que hubiese hecho un marat¨®n, explica.
?Por qu¨¦ ocurre? No se sabe, pero los investigadores creen que podr¨ªa haber una susceptibilidad gen¨¦tica y alg¨²n detonante, como por ejemplo "alg¨²n tipo de infecci¨®n que acabase por desregular este mecanismo", dice Gea. A¨²n ser¨¢ necesario investigar m¨¢s, pero estos dos marcadores biol¨®gicos podr¨ªan dar lugar a nuevos m¨¦todos de diagn¨®stico m¨¢s r¨¢pidos y eficaces. Actualmente la enfermedad no tiene cura; s¨®lo tratamientos paliativos para el dolor. Estas dos mol¨¦culas tambi¨¦n podr¨ªan facilitar el desarrollo de nuevos f¨¢rmacos que intervengan en este proceso molecular.
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