El Atl¨¦tico deja al Bar?a sin defensa
Los rojiblancos, agarrados a la pegada de Ag¨¹ero y Forl¨¢n, derrotan a los azulgrana despu¨¦s de un ¨¦pico remonte en un partido volc¨¢nico (4-3) - El Real Madrid se sit¨²a a s¨®lo cuatro puntos del equipo de Guardiola
Tiembla el Barcelona como un flan. El Madrid le ha ido descontando puntos desde que cedi¨® la barrera psicol¨®gica de los 12 y, a falta de 13 jornadas, se ha situado a cuatro de los azulgrana en tres partidos. Al empate con el Betis le han seguido las derrotas contra el Espanyol y ayer ante el Atl¨¦tico despu¨¦s de un partido volc¨¢nico, temperamental como ya es costumbre, resuelto a ¨²ltima hora por Ag¨¹ero. Al final, el Kun pes¨® m¨¢s que Messi en su partido n¨²mero 100 de Liga, para suerte de los rojiblancos, que remontaron el encuentro con un ¨¦pico arre¨®n propiciado por la fragilidad barcelonista, expresada en los 17 remates cedidos.
Los azulgrana encajaron por vez primera cuatro goles en la Liga, circunstancia que delata su vulnerabilidad defensiva y tambi¨¦n su falta de jerarqu¨ªa en el juego y autoridad sobre el partido. De nada les sirvi¨® tomar una ventaja de dos goles (0-2) ni sobreponerse con un tercer tanto (2-3) al empate parcial del Atl¨¦tico (2-2) porque acab¨® sumando su tercera derrota (4-3) en el torneo y el cuarto encuentro consecutivo sin ganar.
A falta de f¨²tbol, sobre todo por la ausencia de medios, al Atl¨¦tico le vino fenomenal el caos de la contienda porque es tan d¨¦bil en su ¨¢rea como fuerte en la contraria por su f¨²tbol directo y por la presencia de pegadores como Forl¨¢n y Ag¨¹ero. Aunque marcaron Henry y Messi, el Bar?a pag¨® el deficiente partido de sus figuras, con M¨¢rquez y Eto'o a la cabeza, y tambi¨¦n la falta de mec¨¢nica colectiva.
No presionaron ni bien ni mal los azulgrana, aflojados en la divisoria, y les fall¨® tambi¨¦n la punter¨ªa cuando pudieron cerrar un partido muy abierto. Jug¨® el Atl¨¦tico como un caballo desbocado y nadie pudo echarle el lazo en el cl¨¢sico ir y venir en que se convierten los duelos entre ambos equipos. A tono con la locura futbol¨ªstica de la noche, el ¨¢rbitro estuvo intervencionista y pit¨® un penalti de Henry a Sinama tan discutible como el gol que anul¨® nada m¨¢s comenzar a Heitinga o la falta que no sancion¨® a Ag¨¹ero en el ¨¢rea.
La taquicardia azulgrana contrasta con el sosiego blanco. Al Madrid le alcanz¨® con tres jugadores para resolver el partido de Montju?c y sumar su d¨¦cima victoria consecutiva en la Liga. En pleno debate sobre Robben y la aportaci¨®n de los extranjeros, Lass se ocup¨® de que no ocurriera nada en cancha propia mientras la sociedad Guti-Ra¨²l, dos capitanes de toda la vida en el bando madridista, se apuntaron un gol cada uno, cosa que no ocurr¨ªa desde hace un a?o contra el Valladolid. Muy fiable defensivamente, al equipo de Juande le alcanza con no cometer errores para ganar los encuentros con los medios y los delanteros.
An¨ªmicamente, el Madrid se siente como en los tiempos de Capello y aspira a un nuevo remonte por la misma regla de tres que el barcelonismo recuerda las malas sensaciones de las dos ¨²ltimas temporadas, cuando su equipo cedi¨® la cuchara en una situaci¨®n de privilegio. Al Bar?a le falta profundidad en el baquillo y liderazgo en el campo al tiempo que necesita recuperar la mejor versi¨®n de Messi, Alves y Xavi. A la espera de recibir al Athletic, el Barcelona se juega el mi¨¦rcoles en Mallorca el pase a la final de la Copa. Excelente en la puesta a punto, a Guardiola le toca ahora corregir para encontrar el punto medio y no ser atropellado. A d¨ªa de hoy, el Barcelona ha perdido su gracia y se ha convertido en un equipo extremista, en lo bueno y en lo malo, sin t¨¦rmino medio.
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