El "listillo" y las erratas dividen a los progresistas

En este Consejo General del Poder Judicial han cambiado algunas cosas respecto al anterior. Antes, cada grupo sol¨ªa votar en pi?a. Ahora, en el sector progresista hay agujeros.

Ha habido muy pocas votaciones de las consideradas pol¨¦micas. La del caso Mari Luz, que a grandes rasgos parti¨® el Consejo entre vocales jueces y no jueces y aire¨® fuertes fricciones entre miembros del grupo progresista. Como cuando el vocal Jos¨¦ Manuel G¨®mez Ben¨ªtez llam¨® en un reciente pleno "listillo" a su colega de filas Miguel Carmona por espetarle ¨¦ste la autor¨ªa de algunas faltas de ortograf¨ªa en un informe. En concreto, por el mal uso de la tilde en la palabra "solo". La fricci¨®n entre ambos continu¨® luego en el correo corporativo.

Tambi¨¦n se ha evidenciado falta de sinton¨ªa entre Ben¨ªtez, catedr¨¢tico, y la magistrada del Supremo y compa?era de grupo Margarita Robles.

En las filas conservadoras parecen andar m¨¢s compactos, pero a¨²n as¨ª saben que enfrenten tienen, casi siempre, a la mayor¨ªa que forman los nueve vocales progresistas m¨¢s los nacionalistas Margarita Uria, del PNV, y Ram¨®n Camp, de CiU.

Esa mayor¨ªa (11 votos) sirve para aprobar casi todo en el Consejo del Poder Judicial, salvo los altos cargos de la Justicia, que requieren al menos 13 votos (tres quintos).

Los nacionalistas, aunque no siempre, suelen alinearse con los progresistas en las votaciones. Es previsible que ahora, en concreto la vocal del PNV, Margarita Uria, demande el apoyo progresista, que lo tendr¨¢, para cubrir la presidencia del Tribunal Superior de Justicia del Pa¨ªs Vasco. Ella quiere para este puesto al magistrado de la Audiencia de ?lava Jaime Tapia.