La renovaci¨®n de la sexualidad
El papa Ratzinger no esper¨® el jueves ni a bajarse del avi¨®n en Camer¨²n para recordar a sus anfitriones que el sida no se frena a fuerza de distribuir preservativos, sino a base de "sufrir con los sufrientes", que es muy distinto. Comportamiento moral, aconseja el pont¨ªfice a Camer¨²n b¨¢sicamente, renovaci¨®n espiritual y humana de la sexualidad. No condones.
Sufrir con los sufrientes. "Las l¨¢grimas del hu¨¦rfano corren dentro del vientre", dice un proverbio mafa. Los mafa son la etnia m¨¢s aislada de Camer¨²n. Seg¨²n la te¨®loga cristiana camerunesa Moussa Bongoyok, los mafa dependen de tres meses de lluvias para cultivar el mijo de todo el a?o y sufren hambrunas a menudo. ?sa era la fuente tradicional de los hu¨¦rfanos que aparecen en el proverbio. Pero, como destaca la te¨®loga, el problema son hoy "los hu¨¦rfanos del sida".
En 2015, los f¨¢rmacos antivirales seguir¨¢n sin alcanzar al 60% de los ni?os afectados, ni a la mitad de los adultos
Camer¨²n es uno de los 38 pa¨ªses africanos m¨¢s castigados por el sida, con el 5,4% de la poblaci¨®n adulta infectada por el VIH. Eso son cerca de un mill¨®n de personas. Las perspectivas de los epidemi¨®logos no son muy luminosas en este pa¨ªs. En 2015, los f¨¢rmacos antivirales seguir¨¢n sin alcanzar al 60% de los ni?os afectados ni a la mitad de los adultos. En 2025, el virus infectar¨¢ a un menor porcentaje de gente, pero el crecimiento demogr¨¢fico har¨¢ que el total siga siendo un mill¨®n de personas, justo como ahora.
Sufrir con los sufrientes. Las l¨¢grimas de los mafa est¨¢n hechas del mismo tejido que las nuestras, seg¨²n acaba de revelar un experimento del music¨®logo y neurocient¨ªfico Stefan Koelsch, del Instituto Max Planck de Ciencias Cognitivas en Leipzig. Koelsch ha enrolado a 21 voluntarios mafa y les ha puesto piezas musicales que los oyentes occidentales asocian a la felicidad, la tristeza o el miedo.
Koelsch ha elegido a estos cameruneses norte?os porque viven en las monta?as Mandara, una zona muy aislada por sus enfermedades end¨¦micas. Los mafa de las aldeas m¨¢s remotas carecen de electricidad y nunca han estado expuestos a la m¨²sica occidental. Pese a ello, los 21 voluntarios mafa han asociado las distintas piezas musicales a las mismas emociones que los occidentales, aunque en distinto grado seg¨²n el individuo.
Los dos rasgos que m¨¢s pesan para juzgar una melod¨ªa como feliz, triste o aterradora son tambi¨¦n los mismos en los oyentes mafa y en los occidentales. El primero es el tempo, lo que puede parecer bastante obvio: ambos grupos de oyentes tienden a clasificar las piezas r¨¢pidas como "felices", y las lentas, como "aterradoras"; la tristeza puede sobrevenir a cualquier ritmo, aqu¨ª y en Camer¨²n.
Pero el segundo rasgo esencial es el modo (mayor o menor), y ¨¦ste no parece tan obvio. Al igual que los occidentales, los mafa asocian el modo mayor con "feliz"; el modo menor, con "aterrador", y el indefinido entre mayor y menor, como "triste". Tres buenos ejemplos son La Marsellesa, la Quinta de Beethoven y un blues.
El otro uso de los condones tambi¨¦n es importante para el pa¨ªs. Camer¨²n exhibe una de las 10 mayores rentas per c¨¢pita del ?frica subsahariana, pero la mitad de las 'c¨¢pitas' subsiste bajo el umbral de la pobreza. Su elevado ¨ªndice de escolarizaci¨®n entre los chicos no se extiende a las chicas. Y una fertilidad de 4,7 hijos por mujer ayuda a explicar ambas asimetr¨ªas.
Camer¨²n ten¨ªa 5 millones de habitantes en 1960. Su poblaci¨®n se duplic¨® hasta los 10 millones en 25 a?os, y se ha vuelto a duplicar hasta los 20 millones en otros 25: un t¨ªpico crecimiento exponencial. La proyecci¨®n de la ONU, reci¨¦n revisada por sus expertos demogr¨¢ficos, es que esa curva se modere en el futuro, de modo que la poblaci¨®n camerunesa no vuelva a duplicarse en los pr¨®ximos 25 a?os. Pero eso no ser¨¢ posible sin una fuerte expansi¨®n de los programas de contracepci¨®n. Si esos programas se limitan a seguir como est¨¢n, y salvo que la renovaci¨®n espiritual y humana de la sexualidad haga ceder el ¨ªndice de fertilidad, Camer¨²n tendr¨¢ 40 millones de habitantes en 2035. Y el mundo alcanzar¨¢ los 11.000 millones en 2050.
Elegir Camer¨²n para el primer viaje africano del Papa es oportuno, porque el 40% de su poblaci¨®n es cristiana. La renovaci¨®n espiritual y humana de la sexualidad, tan necesaria, siempre se pod¨ªa haber discutido en otro momento y continente.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.