Los obispos llevan al Gobierno a los tribunales por la asignatura de religi¨®n

Han sido meses de negociaci¨®n y de presi¨®n a diferentes niveles. Pero, al final, los obispos no han conseguido un acuerdo con el Gobierno vasco sobre el tratamiento de la religi¨®n en el Bachillerato y, en una decisi¨®n sin precedentes en Espa?a, han recurrido el decreto ante los tribunales de lo contencioso administrativo. Ahora ser¨¢n los jueces los que resolver¨¢n si la religi¨®n debe contar con una asignatura alternativa para que la cursen los alumnos que no quieren estudiar la materia religiosa, tal y como defienden los obispos para que su materia no pierda rango acad¨¦mico. Al no disponer de alternativa, los alumnos que no siguen Religi¨®n pueden salir antes de clase, lo que podr¨ªa invitar a muchos a no cursar la ense?anza religiosa.

"El Ejecutivo no valora lo que aporta la Religi¨®n en la escuela"

Los alumnos que no dan ense?anza religiosa tienen menos clases

Los obispos de Bilbao, San Sebasti¨¢n y Vitoria, Ricardo Bl¨¢zquez, Juan Mar¨ªa Uriarte y Miguel Asurmendi, respectivamente, justifican su decisi¨®n de acudir a los tribunales porque el decreto del Gobierno "ni se atiene a la legalidad ni valora suficientemente el bien social que aporta la ense?anza de la religi¨®n en la escuela". En un comunicado, al que se suma el obispo auxiliar de Bilbao, Mario Iceta, los prelados se?alan que ese decreto contraviene "el texto y el esp¨ªritu de un Pacto Internacional al que el Gobierno vasco debe atenerse: los Acuerdos entre la Santa Sede y el Estado", en los que se estipula que "el hecho de recibir o no la ense?anza religiosa no suponga discriminaci¨®n alguna en la actividad escolar". Y seg¨²n los obispos, resulta "claro" que la carga acad¨¦mica mayor para los que eligen la clase de Religi¨®n frente a los que no la eligen "constituye, en el ambiente y mentalidad escolares, una discriminaci¨®n real".

El decreto de Bachillerato, que ha entrado en vigor en el actual curso 2009-2010 (aunque fue aprobado por el Gobierno el pasado mes de febrero), permite que la Religi¨®n quede en los institutos como una asignatura extraescolar. Es decir, no se establece ning¨²n tipo de materia alternativa para los alumnos que decidan no elegir aqu¨¦lla. Eso significa que los alumnos que quieran dar religi¨®n (de oferta obligatoria por parte de todos los centros, pero optativa para los alumnos) tienen una hora m¨¢s de clase a la semana en cada uno de los dos cursos de Bachillerato. El ejemplo pr¨¢ctico es que los institutos han colocado la clase de religi¨®n al principio o al final de la jornada, con lo que los estudiantes que no dan la materia salen una hora antes del centro o entran una m¨¢s tarde.

"La ausencia de actividades alternativas", critican los obispos, "supone una penalizaci¨®n de la Religi¨®n y un motivo disuasorio en contra de su elecci¨®n". "Cualquier clase desprovista de alternativa vinculante", a?aden, pierde rango acad¨¦mico y talla num¨¦rica. M¨¢s a¨²n si, como ha sucedido con mucha frecuencia, los centros han desplazado estas clases a horas marginales dentro del horario escolar". Desde que conocieron las intenciones del departamento (en mayo del a?o pasado), los obispados han mantenido contactos con el Ejecutivo para reclamar un cambio en la normativa y un mayor apoyo a la Religi¨®n en la escuela p¨²blica. Durante el verano recrudecieron la presi¨®n y ya advirtieron de que estaban dispuestos a llegar hasta los tribunales, lo que han materializado ahora. El obispo de San Sebasti¨¢n lleg¨® a entrevistarse con el lehendakari y el de Vitoria acus¨® al Gobierno de poner en peligro la ense?anza de la Religi¨®n durante su homil¨ªa en honor de la Virgen Blanca, en el d¨ªa grande de las fiestas vitorianas (5 de agosto).

El argumento de Educaci¨®n para no ceder a las presiones es que el decreto responde a una sentida y un¨¢nime reclamaci¨®n de directores, padres y profesores de la escuela p¨²blica, que est¨¢n empe?ados en que la confesi¨®n cat¨®lica no se imparta en estos centros. Pero como eso no es posible, porque la ley obliga a ofertar la materia, demandan que se ofrezca como materia extraescolar.