El CGPJ apura el plazo para elegir presidente de la Audiencia Nacional

Ante la falta de acuerdo, los vocales del Consejo General del Poder Judicial interrumpieron anoche el debate sobre los nombres de los magistrados que deben cubrir 18 altos cargos judiciales. Las vacantes m¨¢s importantes son las que hay en el Tribunal Supremo (Sala de lo Penal, 2; Social, 1; Contencioso, 3, y Militar, 1), as¨ª como la presidencia de la Audiencia Nacional y del Tribunal Superior de Justicia del Pa¨ªs Vasco. Los vocales retomar¨¢n las conversaciones esta misma ma?ana, antes del pleno que debe ratificar los nombramientos.

Las negociaciones entre los dos grupos mayoritarios del Poder Judicial, progresistas y conservadores, eran tensas a ¨²ltima hora de ayer. El magistrado del Supremo ?ngel Juanes se perfilaba como nuevo presidente de la Audiencia Nacional. No obstante, en su caso y como cuesti¨®n previa, los vocales debatir¨¢n hoy si, al ser Juanes un magistrado del Supremo, puede descender un escal¨®n para hacerse cargo de la presidencia de la Audiencia Nacional.

Sobre la mesa, el Consejo tiene dos informes: uno que permite a Juanes presentarse y otro, elaborado por un letrado del CGPJ a propuesta del vocal progresista Jos¨¦ Manuel G¨®mez Ben¨ªtez, que entiende que Juanes no puede ocupar esa plaza al ser de inferior categor¨ªa a la suya.

Plazas codiciadas

Las plazas m¨¢s codiciadas por ambos grupos del Consejo son las dos vacantes de la Sala de lo Penal. Los progresistas (nueve vocales) tienen candidatos para las dos: una para el presidente de la Secci¨®n 15 de la Audiencia de Madrid y miembro de Jueces para la Democracia, Alberto Jorge Barreiro, y otra para el catedr¨¢tico Gonzalo Quintero. Pero los vocales conservadores, que suman nueve votos, negociaban ayer una de esas dos plazas para el fiscal Antonio del Moral.

El sector progresista esgrime su mayor¨ªa (la que obtienen si suman a los dos vocales nacionalistas) y quiere contrarrestar los muchos nombramientos de jueces del Supremo que, seg¨²n ellos, hizo el anterior Consejo, con mayor¨ªa conservadora fruto de los Gobiernos de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar.

Durante los cinco a?os de vigencia de este Consejo, progresistas y conservadores son conscientes de que apenas quedar¨¢n vacantes en el Supremo (se ha reducido la edad media de los magistrados); de ah¨ª el af¨¢n de unos y otros por cubrir con personas afines las pocas plazas que salgan.