La polic¨ªa desmantela una red de prostituci¨®n en pisos de A Coru?a

Todo el mundo en el barrio de la calle San Sebasti¨¢n de A Coru?a, en el cruce de Ronda de Nelle y la avenida de Finisterre, sab¨ªa que el edificio de cinco plantas del n¨²mero 18 era, desde hace unos siete a?os, una "casa de putas". "Iba much¨ªsima gente a todas horas del d¨ªa y de la noche", comentaban ayer vecinos al enterarse de la operaci¨®n policial que permiti¨® desmantelar una red que m¨¢s all¨¢ de la prostituci¨®n trataban a las mujeres como aut¨¦nticas "esclavas sexuales", seg¨²n el t¨¦rmino utilizado por el Cuerpo Polic¨ªa Nacional.

Unas ocho extranjeras, la mayor¨ªa brasile?as sin permiso de residencia en Espa?a, eran obligadas a vivir en condiciones infrahumanas en "habitaciones-patera" de apenas siete metros cuadrados, sin libertad de movimientos y obligadas a prestar servicios sexuales hasta 20 horas seguidas.

La investigaci¨®n parti¨® de anuncios de la secci¨®n de relax de la prensa

Un matrimonio residente en Abegondo y due?o de una peluquer¨ªa en el mismo barrio de la Sagrada Familia fue detenido como responsable de este grupo organizado que explotaba sexualmente a mujeres en varios pisos "de contactos o de tapadillo".

Otras cuatro personas, tres mujeres y un hombre, tambi¨¦n ingresaron en prisi¨®n, tras declarar ante el juez, acusadas de ser las "mamis" o encargados de gestionar esos pisos y controlar las prostitutas, a las que se les impon¨ªa f¨¦rreas normas como la de no poder salir a la calle m¨¢s de una hora diaria. Incumplirlo supon¨ªa una multa de 20 euros.

Las v¨ªctimas dorm¨ªan amontonadas en literas met¨¢licas diminutas en las que ni siquiera ten¨ªan espacio suficiente para permanecer sentadas. No pod¨ªan ducharse entre cliente y cliente, que recib¨ªan en otras habitaciones de los pisos. Las s¨¢banas s¨®lo se cambiaban una vez al d¨ªa.Las prostitutas eran obligadas a mantener relaciones sexuales sin preservativo y tolerar que los clientes consumieran drogas. Hab¨ªa un horario r¨ªgido para utilizar la cocina del piso. Si les tocaba trabajar en ese momento, se quedaban sin comer.

Fueron anuncios de prensa los que pusieron en alerta a la polic¨ªa y su unidad contra redes de inmigraci¨®n ilegal y falsedad documental (Ucrif). Este servicio de prostituci¨®n se anunciaba, con fotos de chicas semi desnudas, bajo los nombres de "etiqueta negra" y "gatitas". Tras meses de investigaci¨®n, los agentes desencadenaron los pasados martes y mi¨¦rcoles la Operaci¨®n Cascabel que permiti¨® liberar a las prostitutas y detener a seis personas.

El matrimonio formado por M.A.R.P., de 41 a?os, y su esposa, M.M.C.R., de 39 a?os, ten¨ªa una peluquer¨ªa que, seg¨²n la polic¨ªa, le permit¨ªa "blanquear el dinero negro procedente de la explotaci¨®n sexual de las mujeres" que obligaban a prostituir en varios pisos de los barrios coru?eses de la Sagrada Familia y Os Mallos. En el n¨²mero 18 de la calle San Sebasti¨¢n, tres de las cinco plantas albergaban esta red organizada de prostituci¨®n. Por las ventanas, desde la calle, se ve¨ªan las literas de "las chicas". Seg¨²n los residentes de la zona, los pisos del edificio fueron adquiridos en 2001 y 2002 por un matrimonio "que nunca ocult¨® su intenci¨®n de convertirlos en un burdel".

"Ve¨ªamos a las chicas todos los d¨ªas salir al supermercado o a la librer¨ªa, siempre iban en grupos de cinco o seis y siempre acompa?adas de la madame", explic¨® un vecina del edificio de enfrente. Conoce bien a una de las chicas, una brasile?a que "dec¨ªa estar encantada porque esa vida era para ella la ¨²nica forma que ten¨ªa de sacar de la pobreza a su familia", a la que env¨ªa regularmente dinero. Pero nunca coment¨® las condiciones infrahumanas en las que ella y sus compa?eras eran obligadas a vivir.

Las normas de la casa eran regidas por cuatro vecinos de A Coru?a, tambi¨¦n detenidos. Los encargados o las mamis eran una portuguesa, M.J.M.P, una uruguaya, M.G.P.A., ambas de 58 a?os, as¨ª como un mujer de 45 a?os natural de A Golada (Pontevedra), R.G.C., y un hombre espa?ol de 32 a?os, F.J.B.F..

Los seis detenidos en esta operaci¨®n, que est¨¢n a disposici¨®n del juzgado n¨²mero tres de A Coru?a ante el cual empezaron ayer a prestar declaraci¨®n, han sido acusados de un delito de prostituci¨®n y asociaci¨®n il¨ªcita. Pero s¨®lo es un de la larga lista de cargos que se les puede imputar, desde traficar con personas para explotarlas laboral o sexualmente, lucrarse con la prostituci¨®n ajena, atentar contra los derechos de los trabajadores y favorecer la inmigraci¨®n ilegal.

Durante el registro de los pisos que regentaba esta red en A Coru?a as¨ª como del domicilio en Abegondo del matrimonio que dirig¨ªa este grupo organizado, la polic¨ªa intervino numerosa documentaci¨®n relacionada con actividades il¨ªcitas, un ordenador, folletos con los servicios de prostituci¨®n, as¨ª como dos dat¨¢fonos que permiten cobrar con tarjetas bancarias.