Am¨¦rica Latina teme una vuelta atr¨¢s

"?sta es una crisis sin precedentes y en esta parte del mundo hemos visto muchas. Hasta ahora se quemaban los vagones de cola, pero esta vez es la locomotora la que est¨¢ en llamas", comenta un veterano funcionario del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), principal fuente de financiaci¨®n regional de Am¨¦rica Latina y el Caribe, que celebra estos d¨ªas su asamblea anual en Medell¨ªn (Colombia). Y es cierto. El incendio que la crisis econ¨®mica global est¨¢ causando en EE UU y Europa amenaza con hacer descarrilar a los pa¨ªses latinoamericanos tras seis a?os de bonanza y estabilidad pol¨ªtica. Un promedio de crecimiento regional del 5% anual permiti¨® en este tiempo sacar de la pobreza a m¨¢s de 40 millones de personas, ensanchar la clase media y ampliar la cobertura social. Incluso McDonald's vendi¨® en 2008 en esta parte del mundo m¨¢s hamburguesas que en ning¨²n otro lugar, con un incremento del 26% sobre 2007.

El continente elige entre el reformismo democr¨¢tico y la autocracia populista

Pero ahora, los mismos factores que propiciaron este crecimiento -fuerte inversi¨®n extranjera, cr¨¦ditos favorables, altos precios de las materias primas y abundantes remesas de los emigrantes- se est¨¢n desvaneciendo. El Banco Mundial rebaj¨® la previsi¨®n de crecimiento para el continente del 3,9% al 0,3%, el precio del petr¨®leo o del cobre, vitales para pa¨ªses como Ecuador o Chile, cayeron m¨¢s de la mitad y los env¨ªos de dinero de los inmigrantes han registrado ca¨ªdas de hasta un 13% en algunos pa¨ªses en lo que llevamos de a?o, seg¨²n datos del BID. Incluso pa¨ªses como Colombia, que aguanta bien el tir¨®n con un crecimiento del PIB del 2,5% en 2008, se queda muy lejos del 7% del a?o anterior.

La crisis tendr¨¢ un impacto diferente en cada pa¨ªs. Entre los analistas reunidos en Medell¨ªn hay consenso en que pa¨ªses que han hecho los deberes durante los a?os de vacas gordas creando fondos de reservas, como el caso de Chile u otros como Per¨², que mantendr¨¢ altas tasas de crecimiento, Brasil o Colombia se salvar¨¢n de la quema, pero otros sufrir¨¢n. Un alto cargo del BID, que exige el anonimato, se?ala a Ecuador "por su falta de reservas y dependencia del petr¨®leo", Venezuela y Argentina como los m¨¢s vulnerables.

En el caso de Argentina, el ex ministro de Hacienda y ex candidato presidencial Roberto Lavagna es pesimista. "Argentina va a contracorriente de lo que se va a discutir en el G-20. El presidente [N¨¦stor] Kirchner se gast¨® en 2006 m¨¢s de la mitad del super¨¢vit fiscal del a?o anterior y el Gobierno actual defiende una pol¨ªtica econ¨®mica proteccionista, proponiendo una subida de los aranceles hasta el m¨¢ximo permitido por la OMC. Adem¨¢s, entiende la necesidad de una mayor regulaci¨®n de los mercados financieros como puro estatismo".

El frenazo econ¨®mico llega en v¨ªsperas de un nuevo ciclo electoral en la regi¨®n. Entre 2009 y 2011 se celebrar¨¢n m¨¢s de 17 elecciones, 13 de ellas presidenciales. Y nadie duda de que la crisis ser¨¢ una nueva prueba de fuego para el continente, que deber¨¢ elegir entre el reformismo democr¨¢tico o el populismo autocr¨¢tico. Mois¨¦s Na¨ªm, director de la revista Foreign Policy y columnista de EL PA?S, presente en Medell¨ªn, recomienda evitar en estos momentos "una de las trampas t¨ªpicas de Am¨¦rica Latina" y que obedece a lo que bautiza como "el d¨¦ficit de paciencia" de la regi¨®n. "La tentaci¨®n de los atajos, de quemar etapas, de ir m¨¢s r¨¢pido de lo que se puede para salir de la pobreza, lleva a experimentos y en definitiva a callejones sin salida que han retrasado muchas veces el progreso". Lavagna tambi¨¦n defiende la necesidad del mantenimiento de pol¨ªticas econ¨®micas coherentes y advierte contra "la utilizaci¨®n de la crisis como coartada de una mala gesti¨®n pol¨ªtica".

Otro factor de riesgo se?alado por Na¨ªm para los pr¨®ximos meses, en funci¨®n de la duraci¨®n de la crisis, es "la frustraci¨®n de las expectativas de las nuevas clases medias" latinoamericanas. "Si esas clases medias sienten que retroceden, esos millones de sue?os rotos pueden ser una fuente de desestabilizaci¨®n pol¨ªtica".

En este panorama cobra inter¨¦s conocer el alcance del compromiso de EE UU con la regi¨®n, m¨¢s all¨¢ de los bolos del ex presidente Bill Clinton, presente el s¨¢bado por la noche en la asamblea del BID, cargado de simpat¨ªa y buenos deseos. Fuentes del BID sostienen con realismo que la Administraci¨®n de Obama "tiene inter¨¦s y preocupaci¨®n por M¨¦xico, no por Am¨¦rica Latina". Otros expertos extienden ese inter¨¦s a los pa¨ªses con los que Washington tiene acuerdos de libre comercio como Chile y Colombia y tambi¨¦n a Brasil, "reconoci¨¦ndole un espacio regional importante".

Pese a todos los pron¨®sticos negativos y a las incertidumbres pol¨ªticas por venir, los analistas reunidos en Medell¨ªn -una ciudad s¨ªmbolo de la resurrecci¨®n tras la tragedia del narcoterrorismo- coinciden en que Am¨¦rica Latina no sufrir¨¢ un cataclismo econ¨®mico y que esta vez est¨¢ mejor preparada que nunca para superar el reto. Como escrib¨ªa recientemente en la revista Pol¨ªtica Exterior Jos¨¦ Juan Ruiz, economista de la Divisi¨®n de Am¨¦rica del Banco Santander, "dicen que para una pareja y para una econom¨ªa las cuatro palabras m¨¢s costosas del idioma son 'esta vez ser¨¢ diferente". Veremos.