Rescates a la vieja usanza
La salvaci¨®n de las cajas de ahorros pasa por la inyecci¨®n de dinero p¨²blico
Caja Castilla-La Mancha es s¨®lo una peque?a caja de ahorros. Pero su rescate por parte del Banco de Espa?a ha hecho que se disparen las alarmas, y con raz¨®n. Las cajas, controladas por los pol¨ªticos regionales, tienen un problema mayor de morosidad en Espa?a que los bancos que cotizan en Bolsa, como el Santander y el BBVA.
Algunas cajas fueron m¨¢s agresivas durante los buenos tiempos: los pr¨¦stamos a los promotores inmobiliarios aumentaron m¨¢s del 50% en 2006, y suponen la quinta parte del total de sus libros de pr¨¦stamos. Esto explica por qu¨¦ el ¨ªndice de morosidad de las cajas asciende al 4,5% y el de los bancos comerciales se encuentra en el 3,2%. Parece que el Banco de Espa?a, que impidi¨® a los bancos espa?oles comprar activos t¨®xicos de Estados Unidos, quiz¨¢s no fue suficientemente prudente en casa. Cierto que a los bancos se les orden¨® establecer un grueso colch¨®n de reservas gen¨¦ricas durante los a?os de bonanza. Pero en el caso de algunas cajas, las p¨¦rdidas se han comido estas reservas. En el ¨²ltimo a?o, el ¨ªndice de reservas del sector sobre creditos dudosos, o coeficiente de cobertura, ha ca¨ªdo del 200% a s¨®lo el 56%.
Ahora que los precios inmobiliarios caen y las viviendas de nueva construcci¨®n permanecen sin vender, las p¨¦rdidas de las cajas se acumulan. Credit Suisse calcula que las cajas necesitar¨¢n recibir 60.000 millones de euros s¨®lo para mantener la relaci¨®n entre recursos propios y pr¨¦stamos morosos en el 160%.
Tal vez eso sea tirar por lo alto. Supongamos que el 10% del libro de pr¨¦stamos -y una cuarta parte de los 172.000 millones de euros prestados a promotores inmobiliarios- acaban siendo incobrables. Y supongamos que s¨®lo se recupera el 40% del valor de los pr¨¦stamos. Las p¨¦rdidas totales ser¨ªan de unos 34.000 millones de euros, lo cual eliminar¨ªa casi la mitad de los fondos propios que actualmente posee el sector.
Las cajas de ahorros podr¨ªan cubrir parte del agujero con los beneficios de explotaci¨®n y las reservas existentes. Pero ahora mismo sus reservas s¨®lo ascienden a 21.200 millones de euros. Para hacer que el colch¨®n aumente hasta el 75% de los pr¨¦stamos morosos, hay que encontrar otros 17.000 millones de euros.
Parte del capital que falta (p¨¦rdidas y reservas) lo generar¨¢n los beneficios de explotaci¨®n, que alcanzan los 15.200 millones de euros anuales. Sumando todo, parece que todav¨ªa existe un agujero de capital de casi 40.000 millones de euros. Las p¨¦rdidas no se extienden por igual, y es improbable que las cajas m¨¢s ricas quieran compartir mucho con sus hermanas m¨¢s pobres a trav¨¦s de fusiones. Pero el jefe de la mayor caja de ahorros espa?ola, La Caixa, declaraba recientemente que las fusiones ten¨ªan m¨¢s sentido cuando los m¨¢rgenes financieros eran mayores. Por lo tanto, en la pr¨¢ctica es probable que las deficiencias sean mayores.
Algunas cajas pueden vender participaciones industriales. Pero no pueden levantar capital de accionistas privados, como hizo recientemente el Santander, porque no cotizan en bolsa. Parece que el Estado tendr¨¢ que pagar la mayor parte de la cuenta. -
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