Un nuevo tel¨®n de acero
Una pareja de dos hombres o dos mujeres que se quiera puede casarse en Espa?a, Holanda o B¨¦lgica. Y, si no, en la mayor¨ªa de los pa¨ªses de Europa Occidental encontrar¨¢n formas (uniones civiles, parejas de hecho) para dar forma legal a su relaci¨®n. ?Pero qu¨¦ pasar¨ªa si viajaran unos cientos de kil¨®metros al este? Como si la Uni¨®n Europea no se hubiera extendido hasta las fronteras de Rusia, se encontrar¨ªan con que ser¨ªan, como mucho, "dos amigos". Y mejor si no se les nota mucho.
Esta disparidad legal y social preocupa a la Uni¨®n Europea. Un estudio de la Agencia por los Derechos Fundamentales de la UE ha puesto de manifiesto que lo m¨¢s seguro para esa hipot¨¦tica pareja si viajara a Rumania, Letonia o Bulgaria -entre otros- ser¨ªa actuar como dos compa?eros de trabajo. Si no, se arriesgan a ser agredidos y rechazados. Y denunciarlo no les servir¨ªa de nada. Muchas veces son los Gobiernos los que fomentan -al margen de las decisiones del Parlamento Europeo- el rechazo a gays y lesbianas. Y no digamos a los transexuales, personas que, por lo general, son mucho m¨¢s visibles y vulnerables.
El resultado, viendo los mapas del informe Homofobia y discriminaci¨®n basada en la orientaci¨®n sexual y la identidad de g¨¦nero en los pa¨ªses miembros de la UE recordar¨¢ a quien haya estudiado geograf¨ªa antes de 1990 a la divisi¨®n de Europa en dos bloques. Un intangible nuevo tel¨®n de acero separa los usos y leyes de la mayor¨ªa de los pa¨ªses occidentales de los nuevos socios de la Uni¨®n ampliada.
Pero s¨®lo a la mayor¨ªa. Hay excepciones: Austria, Italia y Portugal est¨¢n m¨¢s cerca de Polonia, Hungr¨ªa y Rumania que de Suecia y Dinamarca, los m¨¢s tolerantes. Son un ejemplo de uno de los aspectos que destaca el informe, que pide a la(s) iglesia(s) que dejen de fomentar la discriminaci¨®n.
Nuestro pa¨ªs est¨¢ claramente alineado con los m¨¢s respetuosos. Como ejemplo, el informe se conoci¨® el mismo d¨ªa que el Ayuntamiento de Rivas (Madrid) decid¨ªa dedicar una de sus calles al Orgullo Gay. Una celebraci¨®n multitudinaria a la que en el oeste acuden ministros, alcaldes y otros cargos p¨²blicos, y que en el este es boicoteada por las propias autoridades.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.