"La crisis paraliza nuestros proyectos"

Ha pasado la mitad de su vida enfrascado en el estudio de la obra de Monteverdi. Le apasiona la arquitectura, sobre todo, el arte g¨®tico. Posee un fino sentido del humor, y a pocas horas del estreno en el Teatro Real de la ¨®pera El regreso de Ulises a su patria se muestra bastante relajado. William Christie (Buffalo, Nueva York, 1944) es un apasionado de la m¨²sica: lo descubres vi¨¦ndole dirigir, se sustenta en su discurso. "La m¨²sica es mi vida, lo llevo en la sangre".

Fund¨® el grupo barroco Les Arts Florissants, dirige, toca el clave y el ¨®rgano e imparte clases. "Creo que ha merecido la pena dedicar tanto tiempo a Monteverdi. Eleg¨ª bastante bien. Su m¨²sica no tiene edad. Es capaz de comunicar, conmover y emocionar". De las tres ¨®peras ¨ªntegras que se conservan del compositor italiano, Christie se queda con El regreso de Ulises a su patria. "Estamos ante un texto muy importante. El libreto es espectacular. En la historia no es f¨¢cil encontrar este juego de equilibrio entre la m¨²sica y la palabra". En 2010 dirigir¨¢ La coronaci¨®n de Popea en el Teatro Real, una ¨®pera que se mantendr¨¢ con el nuevo director art¨ªstico del coliseo madrile?o, G¨¦rard Mortier.

"Pens¨¦ dedicarme a la arquitectura. Ahora me gustar¨ªa ser jardinero"

Christie habla de c¨®mo la recesi¨®n econ¨®mica est¨¢ afectando a las producciones art¨ªsticas, bastante m¨¢s en Estados Unidos que en Europa. "A Les Arts Florissants nos hab¨ªa encargado uno de los festivales europeos m¨¢s importantes para la temporada 2010 la puesta en marcha de una ¨®pera francesa. Hab¨ªamos dedicado centenares de horas de trabajo y bloqueado la agenda para ese verano. Ahora nos han comunicado que no es posible seguir adelante por falta de presupuesto. Se cancela el proyecto de la ¨®pera y nos quedamos con otro m¨¢s reducido con la esperanza de salvar algo, pero no es del mismo nivel, ni mucho menos. La crisis paraliza nuestros proyectos".

Christie habla de la necesidad de sentir el calor de la m¨²sica en momentos de recesi¨®n. "Es muy f¨¢cil caer en el t¨®pico de decir que en tiempos duros la m¨²sica nos consuela, pero es que es una de las artes que tienen mayor capacidad de conmover y llega m¨¢s r¨¢pido al receptor. Cuando eres capaz de hacer aflorar los sentimientos de quien est¨¢ frente a ti puedes emocionarte. Hay momentos horribles y entonces lo que te gustar¨ªa es huir".

Con un exquisito sentido del humor cuenta el d¨ªa que se encontraba dirigiendo una ¨®pera en Bolonia y ve¨ªa c¨®mo los m¨²sicos de Les Arts Florissants pon¨ªan cara de espanto a medida que avanzaba la obra. "Hab¨ªa visitado San Petronio, mi iglesia g¨®tica favorita, y la comida fue estupenda. Me encontraba feliz dirigiendo y me qued¨¦ casi sin p¨²blico en la sala. A nadie pareci¨® gustarle lo que estaba dirigiendo". Pero ¨¦se, puntualiza, es "s¨®lo un punto negro en mi trayectoria. El p¨²blico no era receptivo. He sido muy afortunado y mi vida profesional ha sido m¨¢s que satisfactoria". Inmerso en un proyecto de trabajar con j¨®venes que poseen grandes voces dice que es una de las cosas que m¨¢s le puede alegrar en este momento.

?A qu¨¦ se hubiese dedicado de no ser m¨²sico? "Durante un tiempo pens¨¦ que a la arquitectura. Ahora me gustar¨ªa ser jardinero. Me gusta el contacto con la tierra".