Lampard apu?ala al Arsenal

A sus treinta a?os, Frank Lampard sigue siendo uno de los principales pilares del Chelsea. Desfilan los entrenadores por el banquillo de Stamford Bridge, pero siempre queda un hueco para ¨¦l en el centro del campo. Ayer, en Wembley y frente al Arsenal, se vio por qu¨¦. Con un par de pu?aladas, Lampard aniquil¨® al conjunto de Ars¨¨ne Wenger y llev¨® al Chelsea a la final de la Copa, que hoy (Manchester United-Everton, 17.00 horas) conocer¨¢ a su segundo contendiente.

El Arsenal trat¨® de colgarse de Cesc F¨¢bregas, pero el catal¨¢n estuvo muy tapado y poco participativo: lo ech¨® en falta su equipo, falto de criterio en la distribuci¨®n, sobre todo tras el descanso. El juego del Chelsea no fue fluido, pero los hombres de Guus Hiddink se manejan de perlas en un escenario tan pedregoso. Pocos conjuntos poseen el m¨²sculo que le otorgan al Chelsea Essien, Ballack y Lampard. Si a su potencia se a?ade la que caracteriza a Drogba en la punta de ataque, la mezcla es capaz de desarmar a cualquiera. Con ese gui¨®n, pocos argumentos necesitan los blues para hacerse con el partido. Ni siquiera el gol de Walcott, que adelant¨® al Arsenal tras una buena acci¨®n colectiva, provoc¨® un cambio de argumento.

Los gunners son m¨¢s sutiles y deliciosos. Cuando atacan en est¨¢tico manda Adebayor, un tallo de 1,90 metros, cemento armado, que se clava al c¨¦sped como si fuera un poste y espera el auxilio de sus compa?eros. O Walcott, una flecha que percute por la derecha. Cuando combinan, las piezas del Arsenal intercambian sus posiciones para ofrecer alternativas de escape, en corto y r¨¢pido o en largo, con un cambio de orientaci¨®n.

Sin embargo, el Chelsea es superior cuando manda la fuerza. Ocurri¨® tras el empate de Malouda, que recibi¨® el primer env¨ªo en largo de Lampard y resolvi¨® de maravilla. El bal¨®n sali¨® teledirigido desde el c¨ªrculo central, vol¨® unos 40 metros hasta el flanco izquierdo del ¨¢rea, el franc¨¦s lo baj¨®, recort¨® hacia adentro a Eboue y se sac¨® un balazo que lami¨® por dentro el poste derecho de Fabianski. A partir de ese momento, el n¨²cleo duro de Hiddink se hizo con el mando.

Ballack ha perdido la presencia en ataque que ten¨ªa en su etapa en Alemania, pero siempre est¨¢ disponible. Tras recuperarse de su lesi¨®n tres meses antes de tiempo, Essien vuelve a demostrar por qu¨¦ se le considera el heredero de Makelele. Y por si eso poco, el bal¨®n que queda suelto lo reba?a Lampard, que es capaz de mandarle otro caramelo a Drogba, para que el marfile?o se rife a Silvestre a la carrera y certifique el paso de su equipo a la final de la Copa inglesa. El Bar?a est¨¢ avisado, pues.