"?Cu¨¢nto has estado en esa empresa?"
Cuando L¨ªmber llega a la oficina de empleo, en Toledo, le atiende Jos¨¦ Carlos Segundo, de 36 a?os, uno de los cinco orientadores laborales del centro de los Servicios P¨²blicos de Empleo de Castilla-La Mancha desde enero. Juntos repasan el curr¨ªculo de L¨ªmber, un alba?il ecuatoriano en paro de 45 a?os.
-?Cu¨¢nto tiempo trabajaste en esa empresa? ?Qu¨¦ categor¨ªa ten¨ªas? -pregunta Jos¨¦ Carlos.
-Oficial de primera.
-Pues hay que ponerlo.
Es lo primero de lo que habla el orientador con sus "usuarios", nombre con el que denomina a los parados que atiende. Luego les habla de la mala situaci¨®n del mercado laboral y les aconseja c¨®mo afrontar la situaci¨®n: si les conviene cambiar de oficio -como trata de hacer ver a muchos alba?iles-, especializarse m¨¢s, hacerse aut¨®nomo...
Jos¨¦ Carlos forma parte de los 1.415 orientadores laborales que las comunidades aut¨®nomas contrataron en 2008, con financiaci¨®n del Ministerio de Trabajo. No lo tienen f¨¢cil. El paro crece mes a mes y ya no golpea s¨®lo a los alba?iles, el primer colectivo para el que se pens¨® el programa. Jos¨¦ Carlos lo ha notado. Entre sus usuarios ya hay comerciales, administrativos... y aut¨®nomos. Son tantos que si no realizaran reuniones de grupo con aquellos, los orientadores no dar¨ªan a basto.
El trabajo con un parado, seg¨²n Jos¨¦ Carlos, "tiene mucho de labor psicol¨®gica". ?l trata de ayudar de convertir ese tiempo "en una inversi¨®n para que el parado regrese vuelva a trabajar en mejores condiciones".
Tras repasar el curr¨ªculo, Jos¨¦ Carlos le da a L¨ªmber un listado con las empresas de la construcci¨®n beneficiadas por el fondo de inversi¨®n local para obras, a fin de que pueda pedir empleo all¨ª. La lista forma parte del trabajo de prospecci¨®n de empresas con ofertas que tienen que hacer los orientadores.
L¨ªmber se va. En la misma silla se sienta Youssef, un pintor marroqu¨ª en paro.
-?Cu¨¢nto tiempo trabajaste en esa empresa?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.