Contra el dopaje: punto y seguido
El deporte espa?ol ha encarado a lo largo del ¨²ltimo lustro una radical renovaci¨®n de los objetivos e instrumentos en la lucha contra el dopaje. Hemos intentado entre todos convertir en urgente lo que sab¨ªamos era importante. Quince a?os despu¨¦s de la Ley del Deporte de 1990, desde 2004 hasta hoy mismo, el sistema deportivo espa?ol ha querido poner el reloj a la hora que marcaba la vanguardia mundial y se ha sometido, sin temor y con tenacidad, a un riguroso examen social y pol¨ªtico. Creo sinceramente que lo hemos superado con nota alta. Y as¨ª lo piensan, tambi¨¦n, los espa?oles que, en el oto?o del 2008, seg¨²n un estudio de Metroscopia, calificaban con 6,3 la actuaci¨®n de las autoridades deportivas espa?olas en esta materia. Un a?o antes, en oto?o de 2007, la nota era de 5,9. La mejora en la percepci¨®n nos anima a creer que vamos por el buen camino.
El ¨²ltimo decreto busca el equilibrio entre la intimidad del deportista y la lucha antidopaje
Es un momento en que no se puede ganar la carrera, pero s¨ª perderla
El 17 de abril culminaba un proceso legislativo que, desde un enfoque amplio e integral, ha ido contando en cada momento con el m¨¢ximo consenso de todos los colectivos implicados, y que concede a la protecci¨®n de la salud y a la lucha contra cuantos pretenden atajos en el deporte un tratamiento completo y unitario. Parece conveniente dirigir la mirada hacia atr¨¢s situ¨¢ndola en los inicios del proceso, hace ahora cinco a?os. En 2005 se aprueba como primera medida el Plan de Acci¨®n Integral contra el Dopaje en el Deporte origen, un a?o m¨¢s tarde y sin votos en contra, de la Ley Org¨¢nica 7/2006 de Protecci¨®n de la Salud y Lucha contra el Dopaje. Una vez en vigor, se inici¨® su desarrollo normativo plasmado en cuatro Reales Decretos que han permitido la puesta en marcha de acciones organizativas como la creaci¨®n de la Comisi¨®n de Control y Seguimiento de la Salud y el Dopaje y de la Agencia Estatal Antidopaje, as¨ª como en el ¨¢mbito de la disciplina deportiva, regul¨¢ndose el procedimiento para la imposici¨®n y revisi¨®n de sanciones disciplinarias en materia de dopaje. El cuarto y ¨²ltimo Real Decreto del 17 de abril supone el paso definitivo para que diversas materias previstas en la Ley puedan ser implementadas de forma eficaz. El Decreto incluye un conjunto de medidas positivas para la protecci¨®n de la salud y promueve otras informativas, investigadoras y ejecutivas para preservar la integridad f¨ªsica de los deportistas y luchar contra el dopaje.
Culmina as¨ª una etapa que requiere cierta reflexi¨®n a fin de evitar cualquier error de interpretaci¨®n y despejar cualquier duda. En primer lugar, conviene destacar un dato: todos los textos que conforman el marco legislativo mencionado han contado con el m¨¢ximo consenso, tras un largo debate, en el que han participado activamente los colectivos implicados. Especial atenci¨®n, por su novedad, suscita el ¨²ltimo Real Decreto. Una norma, como todas las ya aprobadas, plenamente armonizada con las directrices de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) y con la que el Gobierno intenta, una vez m¨¢s, encontrar el equilibrio entre el m¨¢ximo respeto a la intimidad y los derechos de los deportistas y la eficacia de las acciones contra el dopaje. El deporte espa?ol y la AMA, tal y como afirma su presidente John Fahey, se expresan y comparten el mismo lenguaje.
En aras del rigor resultan necesarias algunas peque?as aclaraciones. As¨ª, el establecimiento de una franja horaria de descanso nocturno, incluida en esta norma, s¨®lo es aplicable en los controles fuera de competici¨®n, pues durante las competiciones no hay limitaci¨®n alguna y los controles pueden ser realizados a cualquier hora. La diferencia de dos horas en el periodo de descanso con respecto al horario contemplado en la legislaci¨®n francesa es debida tan solo a una adaptaci¨®n al contexto espa?ol de h¨¢bitos de vida y est¨¢ de acuerdo con el esp¨ªritu de la AMA en su recomendaci¨®n vigente desde el 1 de enero de 2009. En el tema de la franja horaria nocturna es preciso dejar bien sentado que, en su consulta previa, no ha recibido ninguna objeci¨®n ni desde el ¨¢mbito federativo, ni del sector sanitario, ni del ¨¢mbito jur¨ªdico o de asociaciones de deportistas, ni de los expertos que lideran los laboratorios de Madrid y Barcelona. En cualquier caso, es oportuno saber que sucesivas resoluciones ir¨¢n concretando con mayor detalle aspectos pr¨¢cticos del decreto.
En este periodo no s¨®lo se ha actuado en el plano legislativo. Gracias a la labor conjunta de diversos ministerios y la participaci¨®n de administraciones auton¨®micas se ha reforzado el mecanismo de informaci¨®n, control, inspecci¨®n e investigaci¨®n. En este sentido cabe destacar la importancia y el ¨¦xito de actuaciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, 17 desde 2004, con 320 personas detenidas, la incautaci¨®n de millones de dosis de sustancias dopantes dirigidas a gimnasios y ventas por Internet en distintos pa¨ªses europeos y americanos, y la clausura de numerosos laboratorios clandestinos. Cabe destacar de esta larga n¨®mina las conocidas como Operaci¨®n Mamut y Operaci¨®n Puerto, esta ¨²ltima pendiente a¨²n de resoluci¨®n definitiva en sede judicial.
Este impulso sobresaliente a las medidas contra el dopaje ha situado a nuestro pa¨ªs dentro del contexto deportivo internacional en la primera l¨ªnea de las democracias avanzadas. El activo papel desempe?ado por Espa?a ha sido reconocido por Europa. As¨ª, en diciembre de 2008, fui elegido por los 49 gobiernos europeos como su ¨²nico representante en el Comit¨¦ Ejecutivo de la AMA. Dar¨¦ un dato que me parece significativo: nuestro constante trabajo est¨¢ en v¨ªas de resolver la hasta ahora permanente discrepancia entre los pa¨ªses europeos y la AMA en materia de privacidad y protecci¨®n de datos de car¨¢cter personal. Por otro lado, ocupar en la actualidad la Vicepresidencia de la Conferencia de las Partes y la Presidencia del Comit¨¦ de Aprobaci¨®n del Fondo para la eliminaci¨®n del dopaje en el deporte, ambas de la UNESCO, as¨ª como la celebraci¨®n en Madrid del 15 al 17 de noviembre de 2007 de la III Conferencia Mundial sobre el dopaje que aprob¨® el nuevo C¨®digo Mundial Antidopaje, son muestras inequ¨ªvocas del reconocimiento de la labor de Espa?a.
Los deportistas espa?oles est¨¢n protagonizando d¨ªa a d¨ªa proezas que sit¨²an a nuestro pa¨ªs como una indiscutible referencia en el terreno del deporte. Pero la proeza, con la que la sociedad espa?ola se identifica y vibra, debe convivir con la limpieza que es, adem¨¢s, su l¨ªmite. Desde esa convicci¨®n hemos trabajado sin descanso ni desmayo durante el ¨²ltimo lustro.
El Real Decreto de 17 de abril que pone t¨¦rmino al desarrollo de la Ley de Protecci¨®n de la Salud y Lucha contra el Dopaje en el deporte, no es ning¨²n punto y final. Es un punto y seguido. Culmina, tan s¨®lo, una f¨¦rtil etapa. La lucha contra el dopaje contin¨²a. No vamos a bajar la guardia y seguiremos vigilantes para garantizar en todos los planos el juego limpio. Lo vamos a hacer con rigor y equilibrio, abiertos a la innovaci¨®n pero sin renunciar nunca al principio de tolerancia cero contra el dopaje, atentos a todos los cambios y mejoras posibles, con sentido de la anticipaci¨®n, intentando, en suma, mantenernos en la vanguardia.
Jaime Lissavetzky es secretario de Estado para el Deporte y presidente del Consejo Superior de Deportes.
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