Literatura en Nueva York
Un grupo de estudiantes de Yale convierte en un ¨¦xito 'chic' una revista de contenido radical
La idea surgi¨® en Yale. En un porche, mientras beb¨ªan cerveza y se quejaban de las limitaciones del enfoque acad¨¦mico, Marco Roth y Mark Greif fantasearon con la idea de fundar una publicaci¨®n. Corr¨ªa 2004 cuando finalmente lograron ponerla en marcha junto a Keith Gessen, Benjamin Kunkel, Chad Harbach y Allison Lorentzen. Naci¨® as¨ª en Nueva York n+1 una joven revista bianual decidida a llevar la contraria. En su primer n¨²mero se compadecieron de James Wood, uno de los cr¨ªticos m¨¢s influyentes de Estados Unidos, criticaron la revista literaria fundada por Dave Eggers McSweeney's y la credulidad bienpensante de su publicaci¨®n hermana The Believer y cargaron contra el entonces presidente George W. Bush.
La publicaci¨®n est¨¢ constituida como organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro
"Ve¨ªamos que la academia usaba m¨¦todos de an¨¢lisis marxistas pero carentes de contenido, era un ejercicio meramente te¨®rico desprovisto de valor. Quer¨ªamos reivindicar la literatura como superestructura y no entenderla como un simple reflejo", explica Roth sentado en un caf¨¦ en Dumbo, la zona junto al puente de Brooklyn donde su ubican las oficinas de la revista.
"Quer¨ªamos hacer algo que estuviese escrito con claridad pero no fuese tonto. Vimos que el Partisan Review hab¨ªa cerrado. Nos dec¨ªan que aquello hab¨ªa terminado". ?Hay algo de nost¨¢lgico en su enfoque? "Nostalgia progresista radical", se defiende Roth. "Se trata de volver atr¨¢s y ver si las formas que han sido abandonadas siguen siendo ¨²tiles de alguna manera".
Constituidos como una organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro optaron por una f¨®rmula que ha marcado tendencia. Este es el modelo de negocio que hoy sostiene desde la revista Harper's hasta Mother Jones. Cubren gastos y no pagan a sus colaboradores. Sin miedo a caer en el a veces espeso an¨¢lisis intelectual este grupo de j¨®venes pronto consigui¨® hacerse un hueco en el panorama literario neoyorquino y convertir su revista en una publicaci¨®n de referencia entre los j¨®venes de la costa Este. Desde su nacimiento n+1 se ha expandido. Organizan conferencias -por ejemplo sobre el fracaso de los filmes que han tratado la guerra de Irak- que luego convierten en "panfletos"; ayudan en la publicaci¨®n de una nueva revista de arte contempor¨¢neo, Paper Monument, que puso en marcha uno de sus colaboradores Dushko Petrovich; y durante unos meses acogieron en su p¨¢gina web la versi¨®n digital de la revista peruana Etiqueta negra, que tuvo problemas con su servidor. "Creo que fue la primera vez que hab¨ªa una revista cultural y pol¨ªtica biling¨¹e en espa?ol y en ingl¨¦s en la web. Queremos seguir con esto", dice Roth.
Las fiestas de lanzamiento de sus n¨²meros pronto ganaron fama. "Esa es una de las maneras de hacerte un nombre en esta ciudad. Luego hay gente que no lee con atenci¨®n lo que publicamos y que parecen estar m¨¢s interesados en la vida personal de los editores", apunta Roth. Su colega en n+1, el novelista Kunkel, se muestra de acuerdo. "En la actualidad hay una tendencia en la vida cultural de Estados Unidos que tiende a convertir todo en famoseo, y as¨ª la gente que destaca en cualquier campo se convierte en objeto de una curiosidad lasciva. Parte del p¨²blico acaba pensando que un grupo peque?o de editores lleva una vida m¨¢s animada de lo que realmente es la nuestra. Salimos de copas y cuando estamos solteros ligamos. Es un poco triste que la prensa de cotilleo intente encontrar en esto alg¨²n tipo de tensi¨®n dram¨¢tica".
El t¨ªtulo de la primera novela de uno de los fundadores de n+1, Keith Gessen Todos los j¨®venes tristes y literarios (Alfagura) quiz¨¢ pueda servir para desmentir el bulo o engrandecer las miserias de los veintea?eros intelectuales en la gran manzana. Sam, Keith y Mark, los tres personajes de este libro intentan encontrar su lugar en el mundo y a¨²nan sus inquietudes pol¨ªticas con su debilidad por las faldas. Por correo electr¨®nico desde Rusia, Gessen aclara: "Ser un hombre literario en una naci¨®n dedicada a los negocios es a priori una empresa que riza lo c¨®mico y lo rid¨ªculo; algo quijotesco".
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