Sexo y poes¨ªa

La misma semana en la que un empresario codicioso preparaba una fiesta de la minifalda, despu¨¦s de haber realizado una subasta de chicas adolescentes, dos j¨®venes granadinos pasaban noches en vela ultimando detalles de un magno festival de poes¨ªa.

El viejo dicho se cumpl¨ªa una vez m¨¢s: todo es posible en Granada.

La primera noticia abri¨® los programas informativos; forz¨® a las autoridades locales, auton¨®micas y nacionales a pronunciarse; moviliz¨® a la fiscal¨ªa de menores, a los servicios de protecci¨®n del menor, a padres y expertos. No era para menos.

"?Si est¨¢s soltera, sub¨¢state! ?Si est¨¢s soltero, puja!". El reclamo publicitario de una discoteca granadina alarm¨® a todo el mundo. La idea es tan vieja como el universo: explotar la sexualidad y el machismo para hacer negocio.

La discoteca en cuesti¨®n hab¨ªa celebrado ya fiestas similares. Por ejemplo, una subasta de chicos. Y preparaba otra que premiar¨ªa a la minifalda m¨¢s provocadora. Los adolescentes granadinos acud¨ªan a la llamada de las hormonas, tan excitadas en primavera.

El esc¨¢ndalo fue de tales proporciones que el empresario discotequero cancel¨® el concurso de minifaldas. Los tres estudiantes universitarios autores de tan lamentable idea se defend¨ªan diciendo que se trataba de "fiestas tem¨¢ticas".

Mientras, dos j¨®venes de la otra Granada ultimaban una aut¨¦ntica fiesta tem¨¢tica: el Sexto Festival Internacional de Poes¨ªa (FIP). Cerraban el vuelo de un premio Nobel, de una cantante criada en Harlem o de una escritora nicarag¨¹ense. Wole Soyinka, Suzanne Vega y Gioconda Belli eran las estrellas de un elenco plagado de primeras figuras de la poes¨ªa, entre ellas Tom¨¢s Segovia, el ¨²ltimo ganador del premio de poes¨ªa Federico Garc¨ªa Lorca.

Esos dos j¨®venes, Fernando Valverde y Daniel Rodr¨ªguez Moya, hab¨ªan demostrado que el reclamo de la poes¨ªa puede ser tan poderoso como el del sexo. El pasado a?o, en la quinta edici¨®n del festival que ellos alumbraron hace seis a?os, m¨¢s de 7.000 personas acudieron a alguna de las actividades del FIP: lecturas de poemas, recitales, conferencias, mesas redondas. Este a?o repiten ¨¦xito.

Granada est¨¢ inundada de versos. Lorca deb¨ªa sonre¨ªr el pasado martes desde alg¨²n rinc¨®n de la Huerta de San Vicente viendo a docenas de j¨®venes escuchar embobados los poemas de Soyinka. Contemplando su ciudad tomada por poetas. Fernando y Daniel han logrado algo que parec¨ªa imposible: desmontar la idea de que la poes¨ªa es para gente rara.

Durante toda esta semana, cuando a¨²n se escucha el eco del esc¨¢ndalo de la subasta de adolescentes, centenares de j¨®venes escuchar¨¢n atentamente a poetas de todo tipo y condici¨®n: Pere Gimferrer, Aurora Luque, Andr¨¦s Neuman, Dar¨ªo Jaramillo, Juan Cobos Wilkins... Para qu¨¦ seguir. Han llegado de Colombia, de Nicaragua, de Puerto Rico, de Cuba, de Guatemala, de la lejana Corea. De las cuatro esquinas de Espa?a.

Lo sorprendente de este festival po¨¦tico es que ha sido posible gracias al tes¨®n de Fernando y Daniel, tambi¨¦n poetas (ya han publicado en la prestigiosa editorial Visor), con la ayuda de un reducido pero entusiasta equipo. A?o tras a?o, han ido sumando instituciones p¨²blicas, entidades y empresas en esta verdadera fiesta tem¨¢tica que inunda de versos a Granada en primavera.

Autobuses p¨²blicos con libros de poemas, buzones llenos de postales con un texto de Juan Gelman, hospitales y colegios. Nada queda inmune. La ciudad entera se contamina.

Este a?o, adem¨¢s, el festival ha ampliado su campo de acci¨®n a los ni?os. Ha nacido el FIP infantil. La poes¨ªa ha entrado en las aulas de Primaria. En los institutos. Los ni?os son el futuro. Unos ni?os que sabr¨¢n disfrutar, cuando les llegue el momento, del sexo y de la poes¨ªa. Todo a su justo tiempo. Sin subastas.