Elecciones en Osakidetza entre dos bloques

Osakidetza, la mayor empresa de Euskadi por su n¨²mero de trabajadores, con cerca de 27.500, tiene hoy una cita con las urnas sindicales. Es previsible que los trabajadores acudan a la votaci¨®n con el recuerdo a¨²n fresco de los incesantes conflictos laborales vividos en los ¨²ltimos a?os, que han lastrado la imagen del Servicio Vasco de Salud. De alguna forma, las elecciones van a medir a dos bloques: por una parte, el conformado por los sindicatos que se desmarcaron de las movilizaciones y cerraron un acuerdo de condiciones laborales con la direcci¨®n y, por otro lado, las centrales que mantuvieron el pulso hasta el final. Y que hoy en d¨ªa lo siguen manteniendo, aunque de una manera m¨¢s larvada a la espera de c¨®mo se desenvuelve el nuevo equipo gestor.

Todos los sindicatos aspiran a crecer, pero no cuestionan la mayor¨ªa de ELA

ELA, LAB y UGT, que endurecieron el conflicto, no temen sufrir ning¨²n desgaste

En el primero se encuentran los sindicatos profesionales (m¨¦dicos, enfermer¨ªa, t¨¦cnicos) y Comisiones Obreras, la ¨²nica central entre los sindicatos denominados de clase (representan a todos los sectores indistintamente) que firm¨® la paz.

En el otro figuran ELA, LAB y UGT. Todos ellos conf¨ªan en sumar m¨¢s votos y delegados que en la convocatoria anterior.

ELA, con 85 delegados y un 40% de representaci¨®n en la mesa sectorial (el foro donde se negocian los acuerdos laborales) es el sindicato hegem¨®nico, una primac¨ªa que ha mantenido en los ¨²ltimos a?os y que aspira a conservar. Su responsable en Osakidetza, Mirari Irure, cuenta con "revalidar" esa mayor¨ªa. "No se van a producir grandes sorpresas", prev¨¦. Irure no cree que el desgaste sufrido con los paros y las huelgas de la pasada legislatura le vayan a pasar factura en las urnas a su central. "No creo que se produzca ning¨²n desgaste. Han pasado muchas cosas, pero siempre hemos sido coherentes desde principio a fin y veo que es posible revalidar la mayor¨ªa", indica.

El mismo discurso exhibe UGT, que ha formado junto a ELA y LAB un bloque monol¨ªtico. La presencia de un nuevo gobierno no nacionalista y con ideas nuevas podr¨ªa hacer variar la situaci¨®n. Pero, de momento, parece que no ser¨¢ as¨ª. A su representante, Arantza Agote, le suena bien la declaraci¨®n de intenciones del titular de Sanidad, Rafael Bengoa, en algunas cuestiones, pero "la desconfianza sigue". Las reivindicaciones que llevaron a las movilizaciones siguen ah¨ª, seg¨²n Agote. Es el caso de la disminuci¨®n de las cargas de trabajo, la no discriminaci¨®n entre categor¨ªas laborales y la jubilaci¨®n parcial (contratos de relevo para el personal estatutario). "La lucha se mantiene. Hemos defendido unos criterios y lo seguiremos haciendo. Luchamos por conseguir las mejores condiciones para todos, no como los sindicatos profesionales, que en cuanto les ofrecieron m¨¢s dinero para la gente de su ¨¢mbito se apearon de la unidad sindical".

Desde el colectivo de enfermer¨ªa, uno de los sindicatos que firmaron el acuerdo de relaciones laborales con la direcci¨®n de Osakidetza, el objetivo es seguir como segunda fuerza. Jos¨¦ Antonio de Leniz, secretario general del Sindicato de Enfermer¨ªa (SATSE), exhibir¨¢ ante su colectivo "los logros" conseguidos en los ¨²ltimos a?os, como el reconicimiento del complemento espec¨ªfico tras ocho a?os de pugna con el Servicio Vasco de Salud. "Nuestra idea es seguir avanzando. Tenemos por delante muchos retos. Entre ellos, la reforma de Bolonia y ver c¨®mo quedan los estudios de enfermer¨ªa y los nuevos retos y competencias que se le adjudican a estos profesionales".

En la mesa sectorial, en la que s¨®lo pueden sentarse las centrales que consiguen un 10% de los votos como m¨ªnimo, tienen representaci¨®n ELA (40%), el colectivo de Enfermer¨ªa (27%), LAB (16%) y el Sindicato M¨¦dico (15%). UGT y Comisiones Obreras tienen voz, por ser mayoritarios y los m¨¢s representativos en el conjunto de Espa?a, pero no voto al no lograr el 10% de las papeletas emitidas.