Por amor a lo manual

Michele de Lucchi est¨¢ presente en nuestro entorno privado y laboral desde hace m¨¢s de 20 a?os y a¨²n no ha pasado de moda. Enamorado de lo manual, probablemente por eso sigue de actualidad. "La artesan¨ªa es absolutamente necesaria para poder crear, porque es el laboratorio experimental de la tecnolog¨ªa. Permite equivocarse y aprender del error, cosa que ser¨ªa imposible o muy costosa en la industria. Pero el dise?o es esto: la belleza de la equivocaci¨®n, la casualidad...", afirma el arquitecto.

De Lucchi naci¨® en Ferrara en 1951 y se gradu¨® como arquitecto en Florencia en 1975. En los a?os setenta y ochenta estuvo implicado en movimientos radicales y experimentales como Cavart, Alchymia y Memphis. Fue responsable de Design Olivetti de 1992 al 2002, donde elabor¨® varias teor¨ªas sobre la evoluci¨®n del ambiente de trabajo. Ha dise?ado l¨¢mparas y otros objetos para grandes marcas italianas y europeas. Tambi¨¦n ha proyectado y reestructurado edificios para empresas importantes como Deutsche Bank, Novartis o Poste Italiane. Ha conocido el ¨¦xito masivo con la l¨¢mpara Tolomeo de Artemide, un vers¨¢til flexo de aluminio que firma con Giancarlo Fassina. Gran parte de la obra de Michele de Lucchi se ha desarrollado a gran escala, en procesos industriales que impiden la experimentaci¨®n personal.

De Lucchi: "La artesan¨ªa es absolutamente necesaria para crear"

Consciente de que hay un hueco entre dise?o y producci¨®n, en 1990 fund¨® Produzione Privata (www.produzioneprivata.it), una peque?a empresa donde se cultiva la experimentaci¨®n y se incentiva la artesan¨ªa. Los productos se hacen en Italia seg¨²n t¨¦cnicas artesanales, totalmente al margen de la industria, y se venden por series en todo el mundo.

Arkitektura (www.arkitektura.es), que distribuye dise?o internacional en Barcelona, presenta ahora Produzione Privata y las esculturas de De Lucchi Tra eroici muri di legno, una muestra que viene desde el Triennale Design Museum de Mil¨¢n. Son 16 casitas de madera en bruto esculpida a golpes de hacha o motosierra por el propio arquitecto. Estas piezas ¨²nicas, refinadas en su imperfecci¨®n, simbolizan un retorno a la manualidad que complementa el proyecto t¨¦cnico.

"El material por excelencia es la madera, cuando se trabaja crea el ciclo uso-consumo-destrucci¨®n-reciclaje. Est¨¢ siempre en evoluci¨®n, y esto la hace apta para interpretar y acompa?ar la vida del hombre, que tambi¨¦n es variable", explica Michele De Lucchi, quien considera al arquitecto como el intelectual responsable de la calidad de vida. Parece imprescindible saber su opini¨®n sobre la crisis actual: "No es una crisis, es una revoluci¨®n que implica un cambio de enfoque. Estamos en un c¨ªrculo vicioso de consumo y m¨¢s consumo que nos hace prisioneros. Las cosas han de volver a ser m¨¢s cercanas, tenemos que aprender a usar sin destruir y as¨ª romper estas cadenas... F¨ªjese qu¨¦ bonito, creo que la crisis nos har¨¢ m¨¢s libres".