"Va a ser el Parlamento con m¨¢s poder y menos votantes de la historia"

Kontxi Bilbao afronta con ganas las elecciones europeas, aunque es consciente de que el reto ya no es tanto lograr un buen resultado, sino que los ciudadanos simplemente se percaten de que hay comicios Hasta tal punto cree que ha calado la desafecci¨®n de los ciudadanos hacia las instituciones europeas. Y culpa de ello a los dos grandes partidos espa?oles, el PSOE y el PP, que, en su opini¨®n, tratan de ningunear al resto de formaciones, sin dejarles espacio para que se escuche su voz. La candidata de EB advierte de la paradoja de que el pr¨®ximo Parlamento europeo ser¨¢ el de mayor poder en toda su historia, pero saldr¨¢ elegido con una participaci¨®n popular muy escasa.

Pregunta. Las elecciones europeas pasan desapercibidas en la calle.

"El bipartidismo es brutal. El resto de partidos parece que ni concurrimos"

"Me siento como Don Quijote luchando contra los molinos"

Respuesta. Es cierto. Pese a que se trata de unas elecciones muy importantes, los ciudadanos no tienen conciencia de ello. Hay una gran desafecci¨®n hacia estos comicios. En el caso de Euskadi tambi¨¦n puede afectar que las elecciones vascas est¨¢n muy recientes, lo que genera cansancio. A eso hay que a?adir que el Gobierno no facilita apenas informaci¨®n y la clase pol¨ªtica no ha hecho ning¨²n tipo de pedagog¨ªa a favor de las instituciones europeas, especialmente los grandes partidos.

P. ?Quiere decir que PSOE y PP est¨¢n tapando las elecciones?

R. Creo que s¨ª. Los dos grandes partidos, que se presentan como oposici¨®n entre ellos, luego en Europa votan juntos en un 80% de las actuaciones. Por parte del PP no hay problema, pero el PSOE tiene cosas que no quiere que salgan a la luz. Por ejemplo, con las pol¨ªticas neoliberales que practica en Europa. De ah¨ª la esquizofrenia de las cosas que est¨¢ planteando a nivel de campa?a: las medidas sociales no se corresponden con su actuaci¨®n en la UE.

P. A pesar de ser elecciones europeas, la pol¨ªtica nacional lo acapara todo en la campa?a.

R. Es que est¨¢ resultando como una especie de precampa?a de cara a las generales de 2012. Asistimos a un enfrentamiento entre grandes partidos. El bipartidismo est¨¢ siendo brutal y el resto de partidos parece que ni concurrimos. No hay pluralidad pol¨ªtica, no se est¨¢ favoreciendo que la ciudadan¨ªa sepa que hay m¨¢s partidos en liza. Y al final nos atropellan. En el primer semestre de 2010 el presidente de la UE ser¨¢ Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero y nadie est¨¢ preguntando cu¨¢l es su programa de cara a esa presidencia. Y es que no hay proyecto.

P. Es decir, que se siente como Don Quijote luchando contra los molinos de viento.

R. As¨ª es. Para los partidos peque?os es dif¨ªcil encontrar cauces para que la ciudadan¨ªa conozca nuestras propuestas. Sintonizamos con el sentir de los ciudadanos, pero sin espacios para conectar la gente no tiene c¨®mo saber qui¨¦n defiende sus intereses. A la sociedad se le est¨¢ hurtando la posibilidad de votar otra alternativas al PP y al PSOE.

P. ?Tras el descalabro de EB en las elecciones vascas, con qu¨¦ ¨¢nimo afronta este reto?

R. Estas elecciones no son de EB. Vamos dentro de una plataforma con otros partidos de izquierda del Estado y de Europa. Es una gran plataforma de izquierdas. Es cierto que sufrimos una ca¨ªda en las elecciones vascas, pero ahora se trata de hablar de Europa y vamos muchos partidos juntos. Eso es un valor a?adido. Me dar¨ªa por satisfecha si conseguimos un nivel de votos similar a las anteriores europeas, alrededor de 29.000. Significar¨ªa que parte del mensaje ha llegado a los ciudadanos.

P. Se da la paradoja de que el pr¨®ximo domingo se elige al Parlamento europeo que tendr¨¢ mayor poder de su historia.

R. Es algo esquizofr¨¦nico. Va a salir un Parlamento con un poder impresionante y, al tiempo, con la menor participaci¨®n de la historia. Ser¨¢ leg¨ªtimo, pero s¨ª es verdad que no tiene todas las garant¨ªas democr¨¢ticas desde el punto de vista de la participaci¨®n. Se ha ninguneado a la poblaci¨®n. El Tratado de Lisboa es la puerta falsa para seguir con las mismas pol¨ªticas neoliberales que planteaba la Constituci¨®n europea, que se qued¨® bloqueada. La clase pol¨ªtica no ayuda mucho

P. El Tratado de Lisboa no necesita la ratificaci¨®n de los ciudadanos.

R. Lamentablemente es as¨ª. Los ciudadanos no se dan cuenta en el d¨ªa a d¨ªa de lo que les influye Europa, desde la cesta de la compra diaria hasta el pago de las hipotecas, pasando por la seguridad de los juguetes de sus hijos. En todo lo cotidiano influyen las decisiones que se toman en Europa, pero los grandes partidos ya se preocupan de que el ciudadano no se entere. Al final, la UE y el Parlamento europeo pueden parecer unos chiringuitos para que un mont¨®n de pol¨ªticos vivan una jubilaci¨®n dorada, pero no es as¨ª. Pagamos porque tiene poder y responsabilidad.