Este cuento de los fichajes

Acabamos de finalizar la temporada cuando ya se da el pistoletazo de partida de la siguiente. No han pasado ni 24 horas del final de esta 2008-09 para que ya estemos enfrascados en lo que pasar¨¢ en la 2009-10. S¨®lo alg¨²n detalle, al estilo de los flecos de las negociaciones, nos unen a la actualidad: el dolor de la afici¨®n b¨¦tica que, desconcertada, busca a qui¨¦n adjudicar el descenso de categor¨ªa. Un equipo grande, de enorme e inquebrantable afici¨®n pero que hace ya a?os tom¨® un rumbo equivocado que le ha llevado a Segunda. ?Servir¨¢ todo ello como catarsis para el cambio?

A uno le gusta pensar en positivo y es por ello por lo que creo que estos malos momentos deben de llevar a puntos de inflexi¨®n positivos. Y, si no, tomemos el ejemplo del Real Madrid. Ha sido el equipo blanco el que, tras tiempos de turbulencias, ha comenzado a dar los primeros pasos de un proyecto que busca, ni m¨¢s ni menos, devolver al club a su estadio deseado: primer equipo del mundo.

Hace unos a?os, ante una temporada nefasta, los clubes grandes respond¨ªan acudiendo al mercado para recomponer su plantilla y su prestigio a base de adherir alg¨²n crack futbol¨ªstico que sirviera para renovar el carn¨¦ de los sue?os de los seguidores. Se dec¨ªa que esta t¨¦cnica hac¨ªa que el producto se encareciera, pero no importaba, hab¨ªa que demostrar de forma contundente que el futuro comenzaba justo en ese momento, cuando la estrella futbol¨ªstica dec¨ªa aquello de que "Mi ilusi¨®n de siempre ha sido el jugar en... [ponga el equipo que prefiera]". Bueno, pues hasta en esto el Real Madrid ha optado por una soluci¨®n novedosa y comienza a reconstruir su proyecto desde la m¨¢s alta casilla de su organigrama como club: la presidencia. No se tiene noticias del costo de la cl¨¢usula de rescisi¨®n de Florentino P¨¦rez, pero parece que todo el mundo est¨¢ de acuerdo en que era el crack que el club necesitaba.

A partir de su designaci¨®n, toda una cascada de nombramientos en el orden debido, dejando para el final lo que se entiende que convierte en hechos las palabras del nuevo dirigente, refiri¨¦ndose a que hay que devolver al club a su aut¨¦ntico nivel de grandeza: fichajes, jugadores, figuras del balompi¨¦. ?Se podr¨ªa sustanciar este cambio de otra manera? O dicho de otra forma, ?se podr¨ªa sustanciar este cambio con otros argumentos? Estoy seguro de que el cambio dentro de la casa madridista va a ser notable y que s¨®lo ser¨¢ visible en su parte m¨¢s espectacular como es el terreno de juego. El reto est¨¢ en conseguir las condiciones necesarias para que el talento que se va a incorporar al c¨¦sped tenga las dosis necesarias de tranquilidad y confianza para que pueda dar su m¨¢ximo y algo m¨¢s. Si quieren un ejemplo claro, no hay m¨¢s que mirar el cambio sustancial de la plantilla del Barcelona entre mayo de 2008 y 12 meses m¨¢s tarde.

?Cu¨¢ntas variables de esa tranquilidad est¨¢n en manos de los dirigentes del club y cu¨¢ntas se escapan de su ¨¢mbito de influencia? Si dec¨ªamos que el margen para un equipo que acaba de lograr un triplete hist¨®rico es de tres partidos, me pregunto de cu¨¢ntos dispone el proyecto madridista.

El reto es extraordinario y seguro que la magnitud de la respuesta estar¨¢ en consonancia con su dificultad. Tiempo al tiempo.