"?ste es mi gran r¨¦cord"

Sale a la pista un tenista negro, de brazos inmensos y recursos fieros. Acaba de invocar "al buen Dios" antes de los cuartos de final y se ha persignado despu¨¦s de sus oraciones, con una cruz golpe¨¢ndole el musculoso pecho. Gael Monfils es ese hombre. Uno con las rodillas en observaci¨®n. Un rapero del barrio que reta a Roger Federer, ya el favorito para ganar el torneo. Y Federer que sufre en el tie-break de la primera manga, sin haberse procurado puntos de rotura. Y Federer que crece seg¨²n suben los decibelios del partido, enfrentado a un punto de set con la grada atacada. Y Federer que se lleva el parcial (7-6 (6), 6-2 y 6-4), ya jugando a lo grande. Federer jugar¨¢ su vig¨¦sima semifinal grande seguida. Su rival ser¨¢ Juan Mart¨ªn del Potro, vencedor de Tommy Robredo (6-3, 6-4 y 6-2).

Espa?a queda en manos de Vivi Ruano y Anabel Medina, finalistas en dobles

"?Federer entrenaba antes tanto el fondo f¨ªsico?", le preguntan a Jos¨¦ Higueras, ex entrenador del suizo. "No, seguro. El tiempo que estuve con ¨¦l fue una de las cosas que... no s¨¦ si ten¨ªa alguna secuela de la mononucleosis, pero lo primero que vi aqu¨ª es que ha perdido un poco de peso, que se est¨¢ moviendo mejor. Le vi mejor f¨ªsicamente. Pod¨ªa ponerse delante de la pelota mejor. Y con el talento que tiene, si hace lo que puede hacer, es un t¨ªo que le puede ganar a qui¨¦n sea".

En eso hay otros factores que ayudan. Est¨¢ el saque, con los ocho aces de ayer y el 73% de los puntos ganados al servicio -por el 60% de Monfils-, muy lejos del tenista que s¨®lo llegaba a ser el 39 del mundo en porcentaje de primer servicio al inicio del curso. Est¨¢ tambi¨¦n el apoyo del p¨²blico, aunque enfrente haya un franc¨¦s -"Me han adoptado. Me gritan desde las motos y los coches que ¨¦ste es mi a?o"- y que es capaz de superarse hasta a s¨ª mismo: "El martes me sent¨ªa cansado y nervioso. Que hayan perdido Djokovic, Nadal o Murray jug¨® con mi mente. Una vez en la pista, me ayud¨® la experiencia. S¨¦ que siempre voy a jugar un partido decente en los cuartos de un grande. Llevar 20 semifinales grandes seguidas es monstruoso, el r¨¦cord del que estoy m¨¢s orgulloso". Federer, sin embargo, se ha dejado sets por todos los lados hasta los cuartos. "Desde que Nadal est¨¢ fuera, sabe que esta es la oportunidad m¨¢s grande que tendr¨¢ nunca de ganar en Par¨ªs. Eso le presiona", sostiene Michael Stich, campe¨®n de Wimbledon 1991.

Si ayer hubo un tenista presionado, ¨¦se fue Robredo, que buscaba sus primeras semifinales grandes. El espa?ol es un tenista cl¨¢sico y est¨¦tico, elegante, un jugador salido de otra ¨¦poca. Su pelota no tiene velocidad ni peso para competir con los mejores. A veces no est¨¢ a la altura de su leg¨ªtima ambici¨®n, de su esp¨ªritu de mejora y de su capacidad como estratega. Robredo plante¨® bellamente los puntos. Y Del Potro, que super¨® seis bolas de break en un solo juego nada m¨¢s comenzar la segunda manga, le destruy¨® a mazazos. "Ha sacado muy bien: cada vez que hab¨ªa un 30 iguales o una bola de break me hac¨ªa un ace". Adem¨¢s, Vivi Ruano y Anabel Medina jugar¨¢n la final del dobles tras ganar 7-5, 5-7 y 6-2 a Cara Black y Liezel Huber.