Por qu¨¦ no subir¨ªa la luz

Ante el posible cierre de Garo?a, los propietarios de la nuclear han se?alado que el precio de la electricidad subir¨ªa un 10% si cerrara. Salta a la vista que es una evidente exageraci¨®n: la planta produjo en 2008 menos del 1,5% de la electricidad consumida en nuestro pa¨ªs pese a haber funcionado al l¨ªmite. Se trata de atemorizar a la poblaci¨®n cuando se sabe que la electricidad subir¨¢ en julio... por motivos bien distintos. Lo har¨¢ para contener el d¨¦ficit tarifario por debajo de los 3.500 millones de euros, como establece el decreto ley conocido, parad¨®jicamente, como el del bono social.

Cuando se conoce el funcionamiento del sistema el¨¦ctrico, la sorpresa se convierte en indignaci¨®n. Lo que ocurrir¨¢ es que los usuarios apenas notar¨ªan el cierre de la planta, pero s¨ª se producir¨ªa una enorme merma en los beneficios de sus due?os. De ah¨ª su histeria. En el marco legal vigente (Ley 54/97 del primer Gobierno del PP) se establece un sistema de "oferta competitiva" para atender la demanda. El "operador de mercado" ordena las ofertas de los productores de electricidad por los de precios solicitados y escoge las m¨¢s baratas. A todas las centrales que hayan sido requeridas para funcionar -y con independencia del precio que se haya indicado-, se les pagar¨¢ el precio solicitado por la instalaci¨®n m¨¢s cara que haya sido necesario poner en marcha. Es decir, todas las centrales que funcionan cobran lo que pida la m¨¢s cara que se ponga en marcha.

Por eso, si se cerrara Garo?a, que s¨®lo posee 466 megavatios, lo que ocurrir¨ªa, la mayor parte del tiempo, es que una nueva central de gas en ciclo combinado ser¨ªa requerida para funcionar. El precio, con y sin Garo?a, lo fijar¨ªan dos centrales de gas cuya diferencia ser¨ªa muy peque?a. Los usuarios apenas lo notar¨ªamos.

Parad¨®jicamente sus propietarios lo notar¨ªan mucho. Garo?a est¨¢ ya amortizada y s¨®lo incurre en costes variables (fundamentalmente combustible y mano de obra) que son mucho menores que los de la central que fija el precio del mercado. Su margen de beneficio es siempre enorme. Y eso es lo que duele a sus propietarios. Morir¨ªa la gallina de los huevos de oro.

Lo ir¨®nico es que con el viejo sistema de reconocimiento de costes la incidencia del cierre de Garo?a ser¨ªa mayor, aunque no del 10%, ya que hasta 1997, se pagaba por cada kilovatiohora seg¨²n lo que costaba generarlo.

El cierre de Garo?a, pues, no encarece la electricidad sino que merma los beneficios. Al otro lado queda nuestra seguridad y nuestro medio ambiente.

Ladislao Mart¨ªnez L¨®pez es ecologista y experto en energ¨ªa.