M¨¢quinas de hacer dinero

La modelo posa de lo m¨¢s sexy ante la c¨¢mara del fot¨®grafo Patrice Demarchelier, rodeada de peluqueros, maquilladores, y asistentes varios. Pero ese cuerpo resplandeciente funciona como una caja registradora. La modelo regenta una corporaci¨®n que ingres¨® 17,6 millones de euros el a?o pasado. Hablamos de Gisele B¨¹ndchen, la gran supermodelo del momento, la mujer que a los 28 a?os ha aparecido en 500 portadas de revistas de todo el mundo, en decenas de campa?as publicitarias y hasta en alguna pel¨ªcula: la brasile?a que reclama pagos en euros cuando el d¨®lar flaquea.

B¨¹ndchen, con su palmito y su sentido pr¨¢ctico de la vida, lidera a un nuevo tipo de supermodelos, profesionales que se embolsan al a?o entre tres millones de d¨®lares (2,11 millones de euros) y 25 millones de d¨®lares (17,6 millones de euros), seg¨²n Forbes, pero poco dadas a excentricidades y esc¨¢ndalos. Ya no son bellezas caprichosas que se consumen en parties nocturnas, y lanzan zapatos a sus secretarias, en momentos de irritaci¨®n, como Naomi Campbell. Las supermodelos de ahora mismo, salvo contadas excepciones (Kate Moss, la musa del estilo drogas sexo y rock and roll sigue triunfando), derrochan talento financiero y llevan vidas bastante corrientes.

Cuidan su imagen y sus nombres figuran invariablemente en campa?as caritativas

Muchas tienen hijos o est¨¢n a punto de tenerlos, como la brasile?a Adriana Lima. Y hay hasta una madre de familia numerosa: la alemana Heidi Klum, casada con el cantante Seal, que a los 35 a?os espera su cuarto hijo. Pero Klum, que no hace tanto se paseaba por la Costa Esmeralda del brazo de Flavio Briatore, es tambi¨¦n una dotada mujer de negocios, que gan¨® el a?o pasado 16 millones de d¨®lares (11,2 millones de euros), explotando con sabidur¨ªa su popularidad como presentadora de dos realities en la televisi¨®n de su pa¨ªs, relacionados con el mundo de las modelos. Gisele B¨¹ndchen, la n¨²mero uno, brasile?a de ascendencia alemana, y cat¨®lica practicante, que acaba de casarse con Tom Brady, un famoso jugador de f¨²tbol americano, declara con elocuencia en la edici¨®n italiana de Vanity Fair: "Soy una se?ora".

Ni siquiera el tab¨² de la edad funciona con ellas. Es cierto que la mayor¨ªa est¨¢ en la veintena, en el esplendor de su belleza, pero hay tres que han cumplido ya los 35 a?os, una edad prohibitiva en un sector tan exigente con el f¨ªsico como el deporte de ¨¦lite. Es el caso de la propia Klum, de la brit¨¢nica Kate Moss (que ocupan la segunda y la tercera posici¨®n en la lista Forbes), y de Carolyn Murphy, una discreta estadounidense, que lleva a?os siendo el rostro de Est¨¦e Lauder.

En realidad, m¨¢s que simples mujeres, son firmas que bautizan con ¨¦xito l¨ªneas de ropa o de cosm¨¦tica, perfumes, o programas de televisi¨®n. Kate Moss, por ejemplo, de quien los tabloides brit¨¢nicos contaron hace unos a?os que consum¨ªa cinco rayas de coca en 40 minutos, se ha reinventado como dise?adora para la firma Topshop. Por supuesto, ella se limita a echar un vistazo a la ropa que otros dise?an y elegir lo que prefiere, para posar despu¨¦s con las prendas elegidas.

B¨¹ndchen, que ha amasado una fortuna de 150 millones de d¨®lares (unos 106 millones de euros), en poco m¨¢s de 13 a?os de carrera, tiene tambi¨¦n su propia l¨ªnea de sandalias, aunque el grueso de sus ingresos procede de promocionar un poco de todo, desde firmas de alta costura, a gafas de sol, relojes o grandes almacenes. Gisele, que mide 179 cent¨ªmetros y pesa 52 kilos, emplea a cuatro de sus cinco hermanas. Una de ellas, Patricia, es la manager que controla contratos. De las inversiones inmobiliarias se ocupa la propia modelo, due?a de apartamentos en Manhattan, donde reside con su marido, Tom Brady, en una mansi¨®n valorada en unos 13 millones de euros. La pareja acaba de comprar una espectacular residencia en Los ?ngeles, que se suma a otras posesiones inmobiliarias de la modelo: una casa en Costa Rica regalo, cuentan, de su ex novio Leonardo Di Caprio, y un hotel de lujo en Panambi (Brasil). Nadie sabe exactamente que es lo que funciona en ellas, adem¨¢s de la belleza. Qu¨¦ c¨®ctel m¨¢gico las convierte en "gente capaz de conectar con los consumidores y hacer funcionar un producto", en palabras de Ed Razek, presidente y responsable de marketing de Limited Brands, propietaria de la firma de lencer¨ªa Victoria's Secret para la que trabajan la mitad de estas superbellas.

Millonarias como son, y expuestas al juicio p¨²blico, todas procuran cuidar su imagen, y no s¨®lo desde el punto de vista est¨¦tico. Sus nombres figuran invariablemente en campa?as caritativas en sus respectivos pa¨ªses, y nunca fallan cuando se trata de socorrer a las v¨ªctimas de cat¨¢strofes naturales. La rusa Natalia Vodianova ha creado una fundaci¨®n para promover centros recreativos para los ni?os pobres de su pa¨ªs. Miranda Kerr contribuy¨® a paliar la situaci¨®n de los afectados por los grandes incendios que se declararon hace unos meses en Australia, y B¨¹ndchen, cuya web oficial compite en militancia verde con la de los Amigos de la Tierra, contribuye a financiar y publicitar nobles causas, como la defensa de la Amazonia.