"Intento que la arquitectura sea clara y sencilla"

?Es un p¨¢jaro? ?Es un avi¨®n? ?Es Superman? No. Tiene algo de las tres cosas, pero en realidad es la nueva Terminal 1 del aeropuerto de Barcelona, que ha dise?ado Ricardo Bofill (Barcelona, 1939) y que algunos ya consideran una de las mejores obras de su larga trayectoria como arquitecto. Lo de Superman es broma, aunque teniendo en cuenta que el edificio, que se inaugura el pr¨®ximo martes, tiene una superficie de medio mill¨®n de metros cuadrados, capacidad para acoger 55 millones de pasajeros al a?o y una ampl¨ªsima ¨¢rea de servicios, mucho de super s¨ª tiene. Lo que es m¨¢s cierto son las otras referencias. "La forma es vagamente met¨¢forica, entre un avi¨®n y un p¨¢jaro, aunque las met¨¢foras en arquitectura no pueden ser exactas", explicaba ayer el arquitecto en su despacho, frente a una mesa amplia y casi vac¨ªa en la que s¨®lo destacaban las hojas en blanco en las que dibuja sus proyectos.

"Parecer¨¢ poco progresista, pero me gustan la est¨¦tica y la inteligencia" "Si fuera m¨¢s alto, el hotel Vela ser¨ªa m¨¢s esbelto, con una silueta m¨¢s pura"

"La forma de la T-1 es vagamente metaf¨®rica, entre un avi¨®n y un p¨¢jaro"

"Definir el concepto es la parte m¨¢gica de la arquitectura, lo m¨¢s creativo"

"Empiezo a trabajar siempre con un l¨¢piz y una p¨¢gina en blanco. Me encierro dos d¨ªas aqu¨ª, en el despacho, y sin otras referencias me pongo a trabajar. Solo, porque la arquitectura es cosa de equipo, pero cuando defines el concepto y tienes que plasmar en una l¨ªnea la s¨ªntesis de las ideas de un proyecto est¨¢s solo, contigo mismo, con tu experiencia y lo que sabes. Esta parte de definir mentalmente lo que quieres es lo que m¨¢s me gusta de mi trabajo, lo m¨¢s dif¨ªcil y lo m¨¢s bonito. Es la parte m¨¢gica de la arquitectura, lo m¨¢s creativo".

No es f¨¢cil, como explica Bofill, plasmar en un boceto la complejidad de un proyecto de esta envergadura. "Este aeropuerto es I+D, es investigaci¨®n aplicada tanto desde el punto de vista de la construcci¨®n como de la log¨ªstica de las m¨²ltiples funciones que hay que combinar", dice. "El de Madrid y ¨¦ste son los dos artefactos m¨¢s complicados que se han hecho en Espa?a". Y a?ade: "Lo que me llena de satisfacci¨®n es ver despu¨¦s de 10 a?os que la l¨ªnea que dibujaste se ha hecho realidad". Y es que, pese a los cambios que ha sufrido el proyecto (el aparcamiento era m¨¢s bajo y ten¨ªa un jard¨ªn en la terraza; los acabados han tenido que ajustarse al recorte presupuestario, por lo que no son los pensados inicialmente; no ha podido controlar la est¨¦tica de la zona de restaurante...), "formalmente el dibujo es el mismo".

El edificio de la terminal tiene dos grandes bloques principales, uno ancho en el que se realiza la facturaci¨®n, seguridad y recogida de equipajes, y otro longitudinal en la que est¨¢n las zonas de embarque y espera. Adem¨¢s, est¨¢ conectado con el aparcamiento y la estaci¨®n intermodal (adonde en el futuro llegar¨¢ el metro y el tren de Cercan¨ªas) con una pasarela en cuya parte superior se ha situado un centro comercial.

Al contrario que la terminal actual, cuya ampliaci¨®n tambi¨¦n realiz¨® Bofill y que era lineal (del estilo de la T-4), ¨¦sta es compacta y vertical, con varios pisos, gran parte de los cuales son subterr¨¢neos y destinados a la log¨ªstica. "Los pasajeros s¨®lo ven un tercio del edificio", comenta el arquitecto. Pero lo m¨¢s destacable es su claridad, con muchas zonas con iluminaci¨®n natural tamizada, con vistas al mar y a los humedales del delta del Llobregat, y una separaci¨®n de espacios que debe permitir orientarse sin mucha necesidad de se?ales. "Intento que la arquitectura sea clara y sencilla, que la gente no se pierde en el circuito", explica el arquitecto, que ha aplicado su experiencia de viajero al proyecto. "Antes un aeropuerto era una m¨¢quina funcional, pero ahora es tambi¨¦n un lugar de uso en el que la gente compra, trabaja, come y descansa. Es un mundo aparte. Lo importante es que se est¨¦ bien dentro y que los espacios sean tranquilos, con zonas variadas para que, si hay que estar dentro varias horas, la espera sea agradable".

El edificio tambi¨¦n es sostenible (con miles de placas solares) y funcional, aunque a lo que no ha renunciado Bofill es a que tami¨¦n sea bello: "Parece ser que esto es poco progresista, pero a m¨ª me gustan la inteligencia y la est¨¦tica, que tiene unas armon¨ªas y unas l¨®gicas que he estudiado y aplicado toda mi vida". Se ha inspirado muchas veces para lograr esta armon¨ªa en Palladio, arquitecto renacentista del que ahora puede verse una exposici¨®n en Barcelona. "Ha sido el m¨¢s importante de la historia", comenta, porque supo adaptar la proporci¨®n de la arquitectura cl¨¢sica a las necesidades de su tiempo. "Hubo un momento en que pens¨¦ que ten¨ªa sentido hacer el mismo proceso como una salida posible a las monstruosidades que se ve¨ªan. Lo trabaj¨¦ unos a?os y despu¨¦s lo descart¨¦, aunque todav¨ªa hoy en muchos pa¨ªses me lo piden porque a la gente le gusta mucho". En esta l¨ªnea est¨¢n el TNC, el edificio del INEFC -"me hizo ilusi¨®n hacer algunos edificios cl¨¢sicos en Barcelona", dice- y, en cierta manera, la anterior terminal.

Ahora, dice, ha cambiado de escritura. Una prueba es la T-1, la puerta del aire de Barcelona, pero otra es el hotel Vela, en la Barceloneta, que es la puerta del mar. Le obligaron a reducir la altura -"ser¨ªa m¨¢s esbelto y elegante; la silueta ser¨ªa m¨¢s pura"-, pero aun as¨ª est¨¢ en el centro de la pol¨¦mica porque hay quejas de que "tapa la vista. "El horizonte no lo he robado porque precisamente he creado una plaza, que he llamado del Mediterr¨¢neo, que ser¨¢ la ¨²nica en la que el ¨²nico fondo es, precisamente, el horizonte". El edificio, dice, "se lee como una vela, pero es una elipse compleja geom¨¦tricamente". Lo ha pensado para que se vea desde el mar porque, piensa, "se tendr¨ªa que haber trabajado m¨¢s la silueta mar¨ªtima de Barcelona, el sky line podr¨ªa ser mejor".