La mitad del empleo perdido en la UE se destruye en Espa?a

Si algo define al mercado laboral espa?ol es su paroxismo. Siempre dado a los extremos. Si la econom¨ªa avanza, es capaz de crear casi la mitad de los empleos de la zona euro (lo hizo en 2006); pero si la econom¨ªa enferma, es capaz de acabar con m¨¢s de un mill¨®n de empleos en un a?o y duplicar la tasa de paro de la zona euro y de toda la Uni¨®n Europea. Eso es lo que ha pasado en los ¨²ltimos 12 meses y, de paso, ha abocado al pa¨ªs al debate sobre la conveniencia o no de una reforma laboral.

De marzo de 2008 a marzo de este a?o, en el conjunto de la Uni¨®n Europea se destruyeron 2,7 millones de puestos de trabajo; en la zona euro, 1,9 millones. En Espa?a, a un ritmo anual de ca¨ªda del empleo del 6,4%, la crisis engull¨® 1,3 millones de empleos (631.000 en el ¨²ltimo trimestre), seg¨²n la estimaci¨®n que public¨® ayer Eurostat, la oficina europea de estad¨ªsticas. Este intenso deterioro laboral s¨®lo lo superan las tres rep¨²blicas b¨¢lticas ex sovi¨¦ticas (Estonia, Lituania y Letonia), muy afectadas por la crisis financiera.

La construcci¨®n y la temporalidad est¨¢n tras el intenso deterioro

Las cifras espa?olas, seg¨²n se comparen con el conjunto de la UE o con la Uni¨®n Monetaria, representan el 47% o el 68% del total, respectivamente. Un dato que se torna m¨¢s estremecedor si se tiene en cuenta que el PIB de Espa?a apenas supone en torno al 10% de la zona euro y su sistema financiero se mueve entre el 10% y el 12%.

Tras la euforia econ¨®mica espa?ola y su empuje laboral de a?os atr¨¢s, se escond¨ªa (sin reparo alguno, eso s¨ª) la burbuja inmobiliaria. La construcci¨®n es un sector que utiliza mano de obra de forma intensiva. Durante el boom, en Espa?a llegaron a iniciarse unas 800.000 viviendas en un a?o.

Cuando lleg¨® el pinchazo, el desplome laboral le sigui¨®. En el ¨²ltimo a?o, en Espa?a se han destruido 450.000 empleos en este sector, y los expertos calculan que desde que comenz¨® la crisis la ca¨ªda supera los 700.000.

Pero la construcci¨®n, por s¨ª misma, no explica este terrible fen¨®meno (de hecho, la ca¨ªda del trabajo en los servicios ya supera a la del ladrillo). Tambi¨¦n en Reino Unido hubo una burbuja inmobiliaria y la destrucci¨®n de empleo en el ¨²ltimo a?o (295.000 empleos) no se acerca a la espa?ola. En este punto, entra en juego el excesivo uso de la contrataci¨®n temporal.

La tasa de temporalidad de la UE se sit¨²a en torno al 14%; en Espa?a, en el 25,4%, y eso tras haber ca¨ªdo pr¨¢cticamente cinco puntos en el ¨²ltimo a?o. Este movimiento muestra con claridad que a la hora de ajustar costes para hacer frente a la crisis, las empresas han decidido no renovar los contratos de sus trabajadores temporales.

A esta tesis se abona Javier Andr¨¦s, catedr¨¢tico de An¨¢lisis Econ¨®mico de la Universidad de Valencia, y para demostrarlo pone el ejemplo de Alemania: "La demanda ha ca¨ªdo m¨¢s que en Espa?a; en cambio, el ajuste no se ha traducido en reducci¨®n de plantillas, sino en recorte de horas. Aqu¨ª el stock [exceso] de temporales sirve de colch¨®n".