Asturias y Catalu?a se interesan por la regulaci¨®n andaluza de la muerte digna

El proyecto de ley de muerte digna que hace una semana aprob¨® el Gobierno andaluz ha generado el inter¨¦s de otras comunidades, que han solicitado a la Junta de Andaluc¨ªa una copia del texto para valorarlo en detalle. Es el caso de Asturias y Catalu?a, que los pidieron a las pocas horas de aprobarse. Las conclusiones son opuestas: el Gobierno asturiano apunta su deseo de avanzar "en la misma l¨ªnea" que el andaluz, mientras que el catal¨¢n asegura que no se lo plantea.

Tras leer el texto, el consejero de Salud de Asturias, Ram¨®n Quir¨®s (PSOE), lo defini¨® como "muy positivo y necesario": "Profundiza en la l¨ªnea de dotar de m¨¢s autonom¨ªa al paciente y de mucha m¨¢s estabilidad jur¨ªdica a los profesionales. Casos como el de Legan¨¦s, nunca m¨¢s", dijo. El Gobierno asturiano, a?adi¨®, ha dado pasos en esa direcci¨®n (como el decreto de voluntades vitales anticipadas o un plan de cuidados paliativos) y la intenci¨®n ser¨ªa "plantear" una norma similar a la andaluza. Pero Quir¨®s advirti¨® de que las dos comunidades est¨¢n en "momentos legislativos muy distintos": "Andaluc¨ªa ya contemplaba la ley en el Estatuto. Asturias est¨¢ m¨¢s atr¨¢s, pero se acabar¨¢ avanzando en ese sentido".

La idea de su Gobierno es recoger un cap¨ªtulo "de derechos y obligaciones" de pacientes y m¨¦dicos en la Ley del Servicio de Salud, prevista para esta legislatura. De todas formas, Quir¨®s cree que "lo m¨¢s sensato" ser¨ªa que fuera el Gobierno central el que hiciera una norma para todas las comunidades. El consejero asturiano no comparte la "falta de demanda social" que aleg¨® la actual ministra de Sanidad, Trinidad Jim¨¦nez, para renunciar al desarrollo de la ley de muerte digna que hab¨ªa anunciado su predecesor, Bernat Soria. "Hay una demanda social clara, nosotros lo hemos notado al poner en marcha las voluntades anticipadas. En cuestiones como ¨¦stas son en las que la ciudadan¨ªa acaba imponi¨¦ndose".

El Departamento de Salud de Catalu?a, por su parte, que tambi¨¦n ha solicitado a Andaluc¨ªa el texto de la ley, inform¨® esta semana de que no tiene previsto un proyecto similar, informa Ana Pantaleoni. "En Catalu?a existe un contexto social y sanitario diferente, no han surgido las controversias de otras comunidades. No nos plateamos una ley", asegur¨® Josep Maria Busquets, responsable de bio¨¦tica del Departamento de Salud. "Adem¨¢s, hace muchos a?os que nuestros profesionales realizan los cuidados paliativos y que tienen integrada esta pr¨¢ctica".

Busquets record¨® que tanto el comit¨¦ de bio¨¦tica como el plan sociosanitario realizan recomendaciones sobre el acompa?amiento en el final de la vida. "No obstante, todo es mejorable a trav¨¦s de las recomendaciones y la formaci¨®n de profesionales", a?adi¨®. Catalu?a aprob¨® en 2000 el documento de voluntades anticipadas. Un total de 27.000 catalanes ya han decidido c¨®mo quieren morir.