?Qu¨¦ innovaci¨®n?
?Estamos ante un boom de la innovaci¨®n? Barcelona, Catalu?a, Espa?a quieren ser pioneras. La palabra va en boca de pol¨ªticos y gur¨²s empresariales como una jaculatoria / mantra / exorcismo -comecocos de esp¨ªritus simples y ansiosos- contra la crisis. ?Qu¨¦ ilusi¨®n, la innovaci¨®n! Se espera as¨ª un milagro, tecnol¨®gico por supuesto. ?Saben de lo que hablan quienes hoy construyen el mito de la innovaci¨®n como camino de un futuro fabuloso? El diccionario -Real Academia Espa?ola- es claro: innovar es "mudar o alterar las cosas, introduciendo novedades" (atenci¨®n a la clave: novedades). Pero innovar tambi¨¦n significa "volver una cosa a su anterior estado". Menudo l¨ªo: ir hacia lo nuevo y hacia lo viejo, a la vez. ?Ser¨¢ posible tanta innovaci¨®n?
Nada m¨¢s veros¨ªmil en esta ¨¦poca en la que, por ejemplo, lo privado y lo p¨²blico (no s¨®lo para Berlusconi), lo barato (mano de obra) y lo caro (Cristiano Ronaldo), la liberalizaci¨®n y el monopolio (el¨¦ctricas espa?olas) casi significan lo mismo. Muchos espa?oles -?confusos?- pueden pensar que Rajoy y Zapatero son dos caras de una misma moneda que rearma al gran capital con dinero p¨²blico sin dar cuentas de la distribuci¨®n de ese dinero a quienes lo pagan que, tampoco, reclaman tales cuentas sino que demandan una peque?a ayuda o subvenci¨®n. ?Innovaci¨®n? ?De qu¨¦ clase, si aqu¨ª nadie se aclara sobre qui¨¦n es responsable de qu¨¦? ?O es que este mejunje es, en s¨ª mismo, una importante innovaci¨®n?
Hoy puedes leer en los peri¨®dicos explicaciones serias sobre "la industria de la conversaci¨®n", que un colega cita para describir las cualidades del fabuloso Twitter (un servicio online de amigos virtuales capaces de contestar a la inquietante pregunta: ?qu¨¦ haces?). En funci¨®n de esa tonter¨ªa -que hace mercadotecnia con las elecciones de Ir¨¢n- alguien ha sido capaz de imaginar y crear -parece que en cinco a?os hay 32 millones de usuarios globales- una industria cotizada. ?Es esto innovaci¨®n? Nuestros antepasados inventaron la rueda, hoy hacemos ¨¦poca con la industria de la conversaci¨®n. Y a quienes miramos estas innovaciones de reojo o preferimos el (ya innovador) cara a cara nos llaman "fundamentalistas de lo real" (sic). Aleluya.
m.riviere17@yahoo.es
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