?Un problema potencial?
Una vez acabada la ca¨ªda libre en la que se encontraban las econom¨ªas occidentales a finales de 2008 y principios de 2009, ahora el inter¨¦s se est¨¢ desplazando a la duraci¨®n de los efectos de la crisis, sobre la que caben dos escenarios posibles. El primero de ellos es que la crisis no afecta al crecimiento potencial de nuestras econom¨ªas, por lo que todos sus efectos ser¨ªan transitorios o c¨ªclicos. De acuerdo con este escenario, la crisis dar¨ªa lugar a un output gap (la diferencia porcentual entre PIB y su nivel tendencial) negativo muy grande, por lo que el riesgo de deflaci¨®n a corto plazo podr¨ªa ser relevante. El segundo escenario posible es que el crecimiento potencial se va a resentir significativamente durante un buen n¨²mero de a?os, de manera que la crisis tendr¨ªa efectos bastante duraderos. Puesto que el nivel tendencial del PIB crecer¨ªa a una tasa menor, el output gap seguir¨ªa siendo negativo, pero mucho menor que en el primer escenario, por lo que el riesgo de deflaci¨®n tambi¨¦n ser¨ªa m¨¢s reducido.
?Cu¨¢l de estos dos escenarios es el m¨¢s veros¨ªmil? Una forma bastante rigurosa y did¨¢ctica de contestar a esta pregunta es teniendo en cuenta la relaci¨®n tecnol¨®gica entre el PIB y sus factores productivos. De forma muy simplificada, la tasa de crecimiento del PIB depende del crecimiento del capital f¨ªsico y del trabajo, y del crecimiento de la productividad total de estos dos factores. Aunque el crecimiento potencial de la productividad total de los factores puede incluso aumentar (con las crisis suelen desaparecer las empresas y empleos m¨¢s ineficientes), seguramente no compensar¨¢ la ca¨ªda de la relaci¨®n capital/producto (como consecuencia del proceso de desapalancamiento de muchas empresas), ni tampoco el aumento del desempleo estructural (como consecuencia de que los reajustes sectoriales en el empleo pueden llevar bastantes a?os).
Por tanto, el escenario m¨¢s probable es que el crecimiento potencial de la mayor¨ªa de las econom¨ªas occidentales se resienta durante varios a?os. Sin embargo, dada la magnitud de la crisis, esta disminuci¨®n del crecimiento potencial no ser¨¢ de la cuant¨ªa suficiente como para impedir que el output gap sobrepase el m¨ªnimo de las ¨²ltimas d¨¦cadas. A pesar de la disminuci¨®n del crecimiento potencial, en la mayor parte de econom¨ªas, no es previsible que el PIB crezca por encima de esta tasa hasta final de 2010 o principios de 2011, momento en el que el output gap alcanzar¨¢ su nivel m¨ªnimo, y la tasa de desempleo, su m¨¢ximo.
Que ¨¦ste sea el escenario previsible no significa que tenga que ser inexorable. De hecho, habr¨ªa que hacer lo posible para que no se cumplieran estas previsiones. Y para ello, la mejor estrategia es llevar a cabo pol¨ªticas econ¨®micas adecuadas y, con el deseable respaldo de la mayor parte de los agentes sociales, sacar adelante cuanto antes las reformas estructurales necesarias para aumentar el crecimiento y reducir el desempleo.
La disminuci¨®n del crecimiento potencial no impedir¨¢ que el output gap alcance el m¨ªnimo de las ¨²ltimas d¨¦cadas.
Rafael Dom¨¦nech es economista jefe de Espa?a y Europaen del Servicio de Estudios BBVA.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.