?Es la educaci¨®n!

El Gobierno espa?ol, por fin, quiere dejar atr¨¢s un modelo econ¨®mico agotado y generador de importantes desequilibrios. Los sectores de la construcci¨®n y del turismo, ambos en crisis, generaron conjuntamente en el momento m¨¢s dulce de la ¨²ltima d¨¦cada dorada casi el 25% del PIB, que es la cuota m¨¢s alta de la Uni¨®n Europea.

A pesar de ser -o por ser- un modelo intensivo en creaci¨®n de empleo, Espa?a ha perdido puestos de trabajo al ritmo m¨¢s r¨¢pido de Europa y hoy tiene m¨¢s parados que Alemania, aunque la econom¨ªa alemana sea m¨¢s del doble de la espa?ola. Estos datos confirman que el modelo econ¨®mico espa?ol tiene los pies de barro.

La eliminaci¨®n de la desgravaci¨®n a la vivienda a partir del a?o 2010 es un paso en la direcci¨®n correcta. Esta deducci¨®n fue el emblema del ahora exhausto modelo de crecimiento espa?ol y engendr¨® la mal llamada "cultura de la propiedad".

Si Espa?a quiere un modelo m¨¢s sostenible y con menos paro, debe mejorar su sistema educativo

Pero ¨¦sta y otras medidas anunciadas por el Gobierno (ayuda para la compra de un coche, digitalizaci¨®n de las aulas, etc.) no bastan para crear un modelo basado m¨¢s en el conocimiento y en las exportaciones. Son parches para aliviar la crisis, no las semillas de un nuevo modelo econ¨®mico.

A mi modo de ver, la clave para la creaci¨®n de un modelo m¨¢s sostenible, y que no genere tanto desempleo cuando la econom¨ªa va mal, reside en una mejora del sistema educativo espa?ol, y esto es algo que tardar¨¢ un tiempo en hacerse y una d¨¦cada en notarse.

Los pol¨ªticos quieren resultados en el corto plazo. Es lamentable que s¨®lo ahora, a ra¨ªz de la crisis de la construcci¨®n, se haya puesto de moda entre la clase pol¨ªtica hablar de la necesidad de moverse desde el ladrillo al ordenador. Algo muy diferente hubiera ocurrido si esta moda se hubiera extendido durante el boom econ¨®mico. La afirmaci¨®n de que Espa?a no hubiera llegado a donde est¨¢ hoy con el Partido Popular en el poder es muy dudosa (de hecho, el auge de la construcci¨®n empez¨® con el PP, que no hizo nada para cambiar el modelo econ¨®mico y poco para mejorar la educaci¨®n en sus ocho a?os de gobierno).

Espa?a es el ¨²nico pa¨ªs europeo que ha generado mucha riqueza durante un largo periodo, a la vez que una tasa creciente de fracaso escolar. La proporci¨®n de estudiantes que no terminan la ESO, seg¨²n las ¨²ltimas cifras disponibles (2007), es del 30,8%, el doble de la media europea. Un factor que ha contribuido a esta situaci¨®n ha sido la facilidad, hasta 2008, de encontrar un trabajo en la construcci¨®n o el turismo sin necesidad de haber finalizado los estudios.

Es de suponer que la recesi¨®n cambiar¨¢ esta tendencia, vergonzosa para un pa¨ªs desarrollado. En 2007, s¨®lo el 61% de los j¨®venes entre 20 y 24 a?os ten¨ªa un nivel de formaci¨®n al menos de ense?anza secundaria superior, seis puntos menos que en el a?o 2000 y muy por debajo del promedio europeo (78%). Es cierto que la llegada de inmigrantes ha influido en estos dados, pero menos de lo que se piensa.

En Espa?a, seg¨²n el Informe PISA, menos de uno entre 20 j¨®venes de 15 a?os alcanza un conocimiento elevado en ciencias -como en M¨¦xico y Turqu¨ªa-, frente a casi uno entre cinco en Finlandia, donde, por cierto, hay muy pocos colegios privados. Y en lectura, s¨®lo el 1,8% de los j¨®venes espa?oles de 15 a?os alcanza el nivel alto, lo que supone el peor resultado despu¨¦s de M¨¦xico.

?Es que los alumnos espa?oles son m¨¢s tontos que los de otros pa¨ªses? No lo creo. Algo tendr¨¢ que ver esta situaci¨®n con el sistema de aprender a fuerza de repetir y memorizar, en lugar de mediar un an¨¢lisis cr¨ªtico. Y tambi¨¦n el baj¨ªsimo nivel de los contenidos y la falta de autoridad del profesor. No se puede aprender si el profesor no recibe ninguna consideraci¨®n por parte del alumno ni de su familia, y si el sistema adem¨¢s lo deja desprotegido ante cualquier abuso.

La tasa de abandono en la universidad es tambi¨¦n alta y pocos aprueban el curso completo en el tiempo debido. Hay seis convocatorias para superar un examen, m¨¢s la extraordinaria. ?Vaya incentivo para estudiar!

As¨ª que los universitarios espa?oles entran el mercado laboral con 24 a?os o m¨¢s (21-22 en Reino Unido). Y el 22% de los mismos ocupa un empleo de nivel de calificaci¨®n inferior al t¨ªtulo obtenido, frente al 13,2% de los pa¨ªses de la OCDE. Y no hay ninguna universidad espa?ola entre las primeras 150 de la lista que se confecciona cada a?o en la Universidad Jiao Tomg de Shanghai.

?C¨®mo espera Espa?a crear una econom¨ªa basada en el conocimiento con estos niveles educativos? El pa¨ªs est¨¢ pagando un alto precio por su ignorancia. El debate pol¨ªtico sobre la educaci¨®n est¨¢ ciegamente enfocado a temas de menor importancia (no digo que no la tengan), como la Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa y lo que la Iglesia llama el "fundamentalismo laico" en las escuelas, en vez de preguntarse por qu¨¦ hay tanto abandono escolar.

La educaci¨®n en Espa?a se ha convertido para los pol¨ªticos en una especie de confrontaci¨®n futbolera y hasta que esto no termine y todos remen en la misma direcci¨®n, crear una econom¨ªa del conocimiento seguir¨¢ siendo un sue?o imposible.

William Chislett es colaborador habitual del Real Instituto Elcano y autor de varios libros sobre Espa?a.