Marlon Brando, de bandido, vaquero y director
Ma?ana comienza con EL PA?S una colecci¨®n de cine del oeste
Con un ins¨®lito western de traiciones y venganzas -el ¨²nico dirigido por el actor Marlon Brando, donde ¨¦l tambi¨¦n interpreta uno de los papeles protagonistas-, EL PA?S inicia ma?ana una serie de pel¨ªculas de cine del oeste. El filme que podr¨¢ conseguir por un euro, junto con el diario, es El rostro impenetrable (1961), una aventura basada en la novela The Authentic Deaht of Hendry Jones, de Charles Neider. La historia entusiasm¨® tanto al actor cuando lleg¨® a sus manos que decidi¨® producirla desde su propia empresa, contratando al director Stanley Kubrick. La definici¨®n de los personajes y el gui¨®n enfrent¨® a los dos cineastas, y el bandido Brando (en la pel¨ªcula) tuvo que acabar tomando las riendas de un filme que ¨¦l consideraba como "un asalto frontal al templo de los clich¨¦s" de las pel¨ªculas del oeste.
Para el realizador, el filme ataca los estereotipos de vaqueros
Los estereotipos del g¨¦nero se rompen en las playas fantasmag¨®ricas y exuberantes (es de los pocos westerns en los que aparece el mar), en lo psicol¨®gico del filme y en su romanticismo. Porque el resto s¨ª es un cl¨¢sico de vaqueros, de buenos y malos y arena. As¨ª, tras el atraco a un banco fronterizo, Johnny Rio (Marlon Brando) es traicionado por compa?ero y mejor amigo Dad (Karl Malden). Apresado por la polic¨ªa mexicana, Johnny pasa cinco a?os en la c¨¢rcel. Durante ese tiempo el vaquero s¨®lo piensa en el d¨ªa de la venganza. Cuando sale en libertad, busca a su ex compa?ero Dad, regenerado y convertido en sheriff. La revancha tendr¨¢ nombre de mujer, Louisa, la hijastra de Dad.
El rostro impenetrable, Concha de Oro en el Festival de San Sebasti¨¢n y premio a la mejor interpretaci¨®n femenina en el certamen donostiarra (Pina Pellicer), y candidata al Oscar por su fotograf¨ªa, no s¨®lo tuvo esas primeras dificultades en su arranque. Dado el tremendo perfeccionismo de Marlon Brando, el rodaje dur¨® seis meses, y no los sesenta d¨ªas planificados; y la Paramount declar¨® un coste final de seis millones de d¨®lares (estaba previsto un gasto de un 1.800.000 d¨®lares). Gran parte de la diferencia se pag¨® gracias a la fortuna personal del director y actor.
Adem¨¢s, Marlon Brando tuvo que recortar casi en dos horas su primer montaje, que duraba cuatro y rodar un final menos pesimista. No obstante, pese a todo, la cr¨ªtica aplaudi¨® sus cualidades visuales, la interpretaci¨®n del actor y director y la rareza del producto. La revista Variety fue contundente: "Buscando por encima de todo la claridad, la honestidad y la dimensi¨®n de las interpretaciones, Brando ha construido una experiencia conmovedora a partir de un buen trabajo de ficci¨®n". Karl Malden, coprotagonista, acque ya hab¨ªa actuado con Brando en Un tranv¨ªa llamado deseo y la Ley del silencio, est¨¢ tambi¨¦n a la altura de los mejores.
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