Girona paraliza la fusi¨®n de cajas p¨²blicas

Las cajas de ahorros catalanas no paran de hablar entre ellas sobre el trenzado de hipot¨¦ticas alianzas y fusiones, pero el mapa financiero que saldr¨¢ de esta crisis no acaba de dibujarse. Sobre todo, en lo que respecta al bloque de las cajas llamadas de fundaci¨®n p¨²blica: la eventual integraci¨®n de Caixa Catalunya, Caixa Tarragona y Caixa Girona, cuyas entidades fundadoras son las respectivas diputaciones de Barcelona (PSC), Tarragona (CiU) y Girona (ERC-PSC), est¨¢ parada. El rechazo contundente de los empresarios tarraconenses y gerundenses a esta posible operaci¨®n ha actuado como amplificador de la resistencia que existe dentro de las entidades m¨¢s peque?as del tri¨¢ngulo y, en particular, de Caixa Girona, ocho veces m¨¢s peque?a en activos que Catalunya y a la que se atribuye mayor aguante financiero.

Ni el nuevo presidente de la caja, Manel Serra, ni su director general, Jordi Blanch, son entusiastas con esta eventual fusi¨®n. Al presidente de la Diputaci¨®n de Girona, el republicano Enric Vilert, tampoco le apasiona la idea. El consejo de administraci¨®n se muestra dividido al respecto y hay que tener en cuenta que la asamblea general de cada caja debe aprobar por una m¨¢s que holgada mayor¨ªa un proyecto de fusi¨®n si no hay intervenci¨®n de la entidad de por medio.

Estas consideraciones han sido trasladadas a la Generalitat, que no quiere intervenir ni forzar movimientos, pero que desea que las cajas catalanas se entiendan entre s¨ª para que Catalu?a no pierda entidades ni peso en el sector financiero ante los movimientos de concentraci¨®n que propicia el Banco de Espa?a a ra¨ªz del deterioro del contexto econ¨®mico y financiero y del aumento de la morosidad. A su vez, dirigentes locales del PSC han pasado el mismo mensaje a la Diputaci¨®n de Barcelona, fundadora de Caixa Catalunya. Los socialistas de Girona se muestran cautos, Algunos confiesan cierta incomodidad.Fuentes socialistas subrayan que en materia de cajas priman los intereses empresariales y de territorio sobre la ideolog¨ªa, que no hay posici¨®n de partido. "El flujo de cr¨¦ditos al tejido productivo local y los beneficiarios de la obra social sobre el terreno son dos elementos clave. Tenemos la convicci¨®n de que no va a producirse una diluci¨®n de la identidad gerundense en cualquier decisi¨®n", apuntan en esta l¨ªnea.

Tambi¨¦n los nacionalistas de CiU se muestran esc¨¦pticos. CiU, adem¨¢s, gobierna en la Diputaci¨®n de Tarragona, que controla la tercera entidad en discordia, Caixa Tarragona, cuyo empresariado tambi¨¦n ha salido en tromba contra una eventual diluci¨®n bajo la sombra que proyecta Caixa Catalunya.

Fuentes financieras admiten que todo "est¨¢ parado", pero a?aden: "M¨¢s que ante un rechazo definitivo, podemos estar ante un movimiento t¨¢ctico de resistencia para ganar cuota de poder en la resultante".

El marcaje del territorio y del peso de las entidades peque?as cuentan comparativamente m¨¢s que el perfil tan pol¨ªtico que aporta en la c¨²pula de Caixa Catalunya el ex vicepresidente del Gobierno socialista Narc¨ªs Serra, aunque en el sector se da por hecho que a medio plazo acabar¨ªa siendo necesaria una transacci¨®n para que Serra cediera el puesto. La segunda caja catalana, que part¨ªa de una morosidad m¨¢s descontrolada que la media, est¨¢ en proceso de saneamiento bajo la direcci¨®n de Adolf Tod¨®. De las tres, es la menos reticente a una suma.

El bloqueo de la operaci¨®n hace resurgir la idea de un acercamiento entre la mayor de las cajas p¨²blicas y Caixa Manresa, que mantuvo conversaciones para sumarse al proyecto de Caixa Terrassa, Caixa Sabadell y Caixa Manlleu. Por ahora, Manresa ha declinado subirse a este tren. Frente a la ¨®rbita de Caixa Catalunya, la entidad que dirige Feliu Formosa tiene un posible t¨¢ndem en Caixa Pened¨¨s y Caixa Laietana, las dos que p¨²blicamente se han mostrado m¨¢s ariscas ante una concentraci¨®n dentro de Catalu?a y que ver¨ªan con mejores ojos socios como Sa Nostra o Ibercaja.

En la Administraci¨®n catalana se es consciente de que, sobre todo desde Caixa Girona y Caixa Tarragona, no hay fidelidades inquebrantables, y al igual que no se esconde la simpat¨ªa que suscita que las tres cajas p¨²blicas vayan de la mano, tampoco se ve con malos ojos una opci¨®n alternativa mientras todo quede en casa. El directivo de una de las cajas catalanas privadas medianas se?alaba ayer: "Estamos hablando con todos, y con Caixa Girona tambi¨¦n".

"No es que no haya negociaci¨®n avanzada (entre las p¨²blicas), es que no hay proyecto de fusi¨®n sobre la mesa, s¨®lo alguna conversaci¨®n bajo la anterior presidencia (de Arcadi Calzada) y con la actual (Manel Serra)", apuntan fuentes pr¨®ximas a Caixa Girona. El propio Calzada confes¨® el d¨ªa de su despedida que dichas conversaciones hab¨ªan existido. Al actual presidente, Serra, se le considera una persona muy pr¨®xima al consejero de Pol¨ªtica Territorial y Obras P¨²blicas, Joaquim Nadal. Y a Nadal se le atribuye desgana respecto a una boda entre Girona, Tarragona y Catalunya. En los sectores que todav¨ªa conf¨ªan en ella se reconoce que las cosas de palacio van despacio y que, como pronto, podr¨¢ hablarse de proyecto en septiembre.