Una noche de cine con Mozart, F¨ªgaro y Vargas Llosa
Acercarse a la ¨®pera es vivir una vida m¨¢s rica, diversa, y aventurera. Es introducirse en una fusi¨®n de artes desde la m¨²sica a la pintura, la danza o la literatura. No es un spot publicitario. Son palabras del escritor Mario Vargas Llosa, que present¨® ayer en el Teatro Real la ¨®pera Las bodas de F¨ªgaro, de Mozart, ante miles de espectadores europeos.
La ¨²ltima producci¨®n de la temporada pudo verse en directo en m¨¢s de un centenar de cines de 19 ciudades espa?olas y 24 europeas. Hab¨ªa nervios en los pasillos del teatro esperando que la retransmisi¨®n fuera perfecta. El ¨²nico fallo se detect¨® en los primeros minutos. Pero el problema para enlazar subt¨ªtulos e imagen se solvent¨® r¨¢pido.
El maestro de ceremonias de este acto cinematogr¨¢fico explic¨® a los espectadores en qu¨¦ consist¨ªa esta obra de Mozart ambientada en la Sevilla del siglo XVIII. La escenograf¨ªa, dise?ada por Daniel Bianco, es fiel a la ¨¦poca de la ¨®pera y los trajes goyescos, creados por Renata Schussheim y que resaltan la diferencia de clases que existe en la trama. El director de escena, Emilio Sagi, ha apostado para esta producci¨®n por un montaje realista y sevillano. La luz entra a raudales, el agua corre en la fuente y el olor a azahar se percibe en todo el teatro. Los int¨¦rpretes, en la sesi¨®n de ayer, fueron Barbara Frittoli, Ludovic Tezier, Isabel Rey, Luca Pisaroni, Marina Comparato, Carlos Chausson y Ra¨²l Jim¨¦nez.
Vargas Llosa resalt¨® la belleza y perfecci¨®n que se puede lograr con una ¨®pera: "La contemplaci¨®n de una buena obra nos enriquece. Aunque parezca extra?o, adentrarnos en el mundo de Mozart, puede acercarnos al mundo real para comprenderlo mejor. Es necesario acercar al mayor n¨²mero de personas esta forma de creaci¨®n art¨ªstica que nos puede llegar a deslumbrar, aportar felicidad y placer".
'TWITTER?AS'
- Harto. Harto de ese cuervo de traje y corbata que, cada desayuno en el bar de enfrente, mira mis chancletas, me mira a m¨ª y se r¨ªe.
- Fui una vez a Benic¨¤ssim. Me arrastraron. Yo no quer¨ªa ir. Beb¨ª, bail¨¦, escuch¨¦. Doce horas despu¨¦s, yo no quer¨ªa volver. ?Magia?
- No s¨¦ por qu¨¦ me da, pero creo que a Ignasi Guardans se le avecina una tormenta en forma de cabreo de productores.
- Horchata y buena m¨²sica.
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