"Se come peor de comentarista que de ciclista"

Reci¨¦n llegado al hotel tras la d¨¦cimoctava etapa del Tour, Pedro Delgado, 49 a?os, responde al tel¨¦fono para hablar del oficio de comentarista y de un Tour a punto de concluir. Las an¨¦cdotas se le caen de la boca.

Pregunta. Parece que est¨¢ la cosa bastante decidida.

Respuesta. Contador ha confirmado que es el m¨¢s fuerte.

P. ?Se le ocurre un trabajo mejor que el que tiene ahora?

R. No (risas). En cuanto dej¨¦ el ciclismo TVE se puso en contacto conmigo. No me dio tiempo ni de pensar qu¨¦ iba hacer. 'Vale, encantado', dije. Ver la otra cara siempre gusta.

P. Pocos lo consiguen.

R. Hay que estar en el momento oportuno en el sitio adecuado. Entonces TVE retransmit¨ªa casi todo el calendario y necesitaban un especialista con tir¨®n. A Indur¨¢in tambi¨¦n se lo propusieron pero no quiso.

P. Y que usted cae muy bien.

R. Me atrevo a hacer chascarrillos. Soy as¨ª y tengo la suerte de haber encajado. Y sin haber estudiado, como se dice (risas).

P. Creo que hay quien cree que sigue compitiendo.

R. Una se?ora me dijo hace poco 'Tiene que ser dificil¨ªsimo hablar d¨¢ndole a los pedales'. 'S¨ª, s¨ª, es muy duro esto', le dije.

P. ?Y si un d¨ªa se acaba?

R. No lo deseo, pero puede ocurrir y m¨¢s en crisis. Si ocurre, pues empezar¨¦ otra fase.

P. Cre¨ªa que los comentaristas se pon¨ªan finos y usted habla en su blog de bocatas y cruasanes "asustaos".

R. Tomamos s¨¢ndwiches de gasolinera y con suerte, pizza. Com¨ªa mejor de ciclista. Te dan fruta, refrescos, pastelitos...

P. ?C¨®mo va a titular hoy la entrada de su diario online?

R. No lo s¨¦ aun. Ten¨ªa intenci¨®n de hablar de Wiggins y de la mala y la buena suerte.

P. Lleva 10 a?os codo con codo con Carlos de Andr¨¦s, "su inseparable compa?ero".

R. Somos muy compatibles. ?l conduce la narraci¨®n, marca los tiempos y yo aporto la tonter¨ªa de turno y mi experiencia. Puedo decir cosas que Carlos no puede porque se lo comen. Y si lo digo yo ya es como 'Ah, mira lo que dice Perico'.

P. ?Cu¨¢ndo disfruta m¨¢s comentando?

R. Cuando hay ataques y est¨¢ revoltoso el pelot¨®n. Ah¨ª sin querer uno sube el tono y se mete a dar pedales.

P. ?Siente a veces envidia?

R. Cuando hace sol, no hay viento y van despacio (risas).

P. Lleva 26 a?os en el Tour.

R. S¨ª, y ha cambiado mucho. Entonces pod¨ªa con todo. El director levantaba el tel¨¦fono y ten¨ªa tanto poder como el Presidente de la Rep¨²blica.

P. ?Se tiene que medir en el duelo Armstrong-Contador?

R. No soy de sacar punta ni agresivo, me gusta mantenerme neutral. Contador es un chico joven que quiere progresar y Armstrong un perro viejo que usa su poder medi¨¢tico.

P. ?Se corta con sus batallas?

R. Me da verg¨¹enza aburrir, pero si tiene gracia, la cuento.

P. ?Y la de cuando se perdi¨®?

R. La habr¨¦ contado 50.000 veces. Hace poco me lo pidieron y me negu¨¦, un poco para mostrar car¨¢cter. '?M¨ªralo en Internet, que para eso est¨¢!', dije.