M¨¢s testigos del 'caso Couso'

El auto de la Audiencia Nacional sobre el caso Couso considera que si un militar ataca un lugar civil, ese militar estar¨¢ excusado con s¨®lo decir que cre¨ªa que en dicho lugar hab¨ªa un elemento hostil. Rechazamos este planteamiento que da rienda suelta a la impunidad de los ej¨¦rcitos y despoja a los civiles de la protecci¨®n que les confiere la ley internacional. No entendemos por qu¨¦ la Audiencia otorga credibilidad al informe del Mando Central Norteamericano y no hace caso a los periodistas que est¨¢bamos en el hotel Palestine y presenciamos la muerte de Couso.

Somos la parte imparcial de una guerra. Nuestro trabajo es contar la verdad. Por ello insistimos en que existen aspectos que deben ser investigados, como el hecho de que en tan s¨®lo tres horas, tres sedes period¨ªsticas de Bagdad fueran atacadas por fuego estadounidense, con la consecuencia de tres informadores muertos.

Nos preguntamos por qu¨¦ el auto todav¨ªa hace referencia a la presencia de un francotirador en el hotel, cuando el propio Pent¨¢gono desech¨® esa teor¨ªa. En cuanto a la teor¨ªa del ojeador, el Palestine era un lugar civil con c¨¢maras y periodistas que mostr¨¢bamos lo que estaba ocurriendo. ?ramos ojeadores, s¨ª. Ojeadores protegidos por la ley internacional.

Deseamos que se proteja la libertad de informaci¨®n y que no se ignoren nuestros testimonios. Por ello, firmamos este texto no s¨®lo los periodistas que hemos declarado ante el juez, sino otros compa?eros de diversas nacionalidades, testigos como nosotros de la muerte de Couso.