Mu?oz se queda corto

Rafa Mu?oz, el chico que sali¨® de una piscina de 25 metros, del club Navial, en el barrio cordob¨¦s de Cruz Conde, hizo historia en la prueba m¨¢s corta y m¨¢s barullera de la nataci¨®n: los 50 metros mariposa. No es una carrera ol¨ªmpica. Pero es la que m¨¢s le gusta a este b¨®lido. La que m¨¢s se ajusta a sus condiciones explosivas. Ayer, estos 50 metros de agua burbujeante le sirvieron para ganar el bronce en la final de los Mundiales de Roma y convertirse en el primer nadador nacido en Espa?a (Mart¨ªn L¨®pez Zubero lo hizo en Estados Unidos y Nina Yivaneskaia en Rusia) en subirse a un podio en la historia de los campeonatos. Hubo tanto entusiasmo en la delegaci¨®n espa?ola que hasta Jaime Lissavetzky, el secretario de Estado para el Deporte, se acerc¨® a la piscina para felicitarle. Parece que la inversi¨®n que el CSD ha dedicado a la nataci¨®n en los ¨²ltimos meses empieza a dar frutos.

Es el primer nadador nacido en Espa?a que sube al podio en unos Mundiales

"Estoy tan contento como si hubiese ganado el oro", dijo Mu?oz con el agua todav¨ªa chorre¨¢ndole por la cara y por la goma de su ba?ador Jaked; "nunca hab¨ªa estado en una final de unos Mundiales y esto me hace feliz". Era para estar satisfecho, aunque con moderaci¨®n. No fue la mejor actuaci¨®n del espa?ol. Al contrario. Fue su peor tiempo en lo que va de a?o. Su marca, 22,88s, result¨® mediocre a la luz de su trayectoria reciente. El cordob¨¦s se present¨® en Roma como plusmarquista mundial tras conseguir nadar la distancia en 22,43s durante el Open de Espa?a, el pasado abril. El domingo, durante las semifinales, hizo 22,68s. Ese tiempo, ayer, le habr¨ªa valido la plata. Se supone que lo deb¨ªa mejorar. "Tiene que ajustar la llegada porque se est¨¢ quedando corto en la ¨²ltima brazada", hab¨ªa dicho Luis Villanueva, el director t¨¦cnico de la federaci¨®n. Los 50 metros exigen tanta energ¨ªa como c¨¢lculo. Cada brazada, cada respiraci¨®n, deben hacerse en el punto exacto. "Eso no se entrena", apunt¨® Villanueva antes de la prueba; "eso ya lo tiene Rafa dentro".

Fuera por la emoci¨®n del momento, fuera por la impresi¨®n de ver c¨®mo el serbio Milorad Cavic le miraba fijamente a trav¨¦s de sus gafas espejadas, lo cierto es que el talento que Mu?oz llevaba dentro no acab¨® de manifestarse en toda su extensi¨®n. Ya en el poyete, tras encararse con Cavic y colocarse para la salida, se despist¨® persign¨¢ndose tres veces seguidas. Debe de ser una c¨¢bala. "Yo siempre pido tres huevos fritos", suele decir el cordob¨¦s, que, a sus 21 a?os, es un muchacho particular, un caso aparte en el mundillo de la nataci¨®n. La bocina de salida por poco lo sorprende en plena faena m¨ªstica. Estaba ansioso. Reaccion¨® r¨¢pido, pero entr¨® mal en el agua y debi¨® remontar. Fue demasiado para tan poca distancia. Fue el sprint m¨¢s veloz de la historia: cuatro nadadores bajaron de los 23 segundos.

Cavic, el hombre que m¨¢s se acerc¨® al estadounidense Michael Phelps en los Juegos Ol¨ªmpicos de Pek¨ªn 2008, se acomod¨® en cabeza y toc¨® primero. Como dijo Rafa: "Todo ha sido tan r¨¢pido que no s¨¦ c¨®mo analizar la carrera. No s¨¦ qu¨¦ me falt¨®. Intent¨¦ corregir la llegada, pero en una final de 50 no se puede corregir nada. Cavic se quit¨® conmigo la espina que le clav¨® Phelps".