La ca¨ªda de B¨¢rcenas deja a Camps sin escudo

Al final, despu¨¦s de cinco meses de agon¨ªa, Luis B¨¢rcenas, sentenciado pol¨ªticamente a muerte hace mucho tiempo, tuvo un funeral pol¨ªtico con honores, con comunicado de agradecimiento a sus 28 a?os de dedicaci¨®n al partido, con foto final como miembro del Comit¨¦ Ejecutivo, y con el anuncio de que, como los grandes deportistas, su puesto de tesorero no ser¨¢ ocupado por nadie hasta que, si le absuelven, pueda volver. "Nadie, ni una cofrad¨ªa de Semana Santa, ni una pe?a ciclista, echa a su tesorero de mala manera", razonaba un dirigente.

Pr¨¢cticamente todos en el PP, salvo el hombre m¨¢s representativo de la etapa en la que Francisco Correa lo era todo en el partido, Francisco ?lvarez Cascos, quer¨ªan al tesorero fuera. Algunos incluso se atrevieron a aconsej¨¢rselo, como la secretaria general, Dolores de Cospedal. Pero ¨¦l insist¨ªa: s¨®lo se ir¨ªa si se lo ped¨ªa directamente Mariano Rajoy.

El senador, despedido con honores, sigue en la C¨¢mara, y no habr¨¢ otro tesorero

El l¨ªder nunca lo hizo, para desesperaci¨®n de sus huestes. "Estamos consiguiendo que B¨¢rcenas sea el tipo m¨¢s conocido y m¨¢s odiado de la pol¨ªtica espa?ola. ?Qu¨¦ imagen le estamos dando a la gente que est¨¢ pensando en saltar del PSOE al PP? ?Y los j¨®venes?", se lamentaba esta semana un dirigente.

Rajoy aguant¨® hasta el l¨ªmite y m¨¢s all¨¢. Y lanz¨® todo tipo de mensajes a su tesorero. El m¨¢s contundente de todos, enviar a Cospedal a convencerle. Pero despu¨¦s, en el despacho del l¨ªder, cuando se qued¨® a solas con el senador, lo neg¨®.

"T¨² me nombraste, t¨² me puedes destituir. Si he perdido tu confianza me voy, pero no quiero que nadie me env¨ªe se?ales de tu parte", le dijo B¨¢rcenas al l¨ªder hace tres semanas. Rajoy, seg¨²n fuentes de la direcci¨®n, le contest¨® que ¨¦l no iba a pedirle la dimisi¨®n, que eso es una cuesti¨®n personal y que el tesorero deb¨ªa manejar sus propios tiempos. Tambi¨¦n neg¨® que hubiera enviado a nadie.

El l¨ªder pens¨® que B¨¢rcenas ceder¨ªa en alg¨²n momento. Pero visto que no suced¨ªa, que no pudo evitar la foto m¨¢s dolorosa -la del pasado mi¨¦rcoles, con el tesorero nacional del PP por primera vez en su historia entrando en el Supremo como imputado provisional por cohecho y delito fiscal-, y que las vacaciones se acercaban sin resolver el asunto, Rajoy, al fin, movi¨® ficha.

Al concluir el Comit¨¦ Ejecutivo, en el que B¨¢rcenas se sent¨® como uno m¨¢s y como siempre sin decir palabra, Rajoy improvis¨® una reuni¨®n con su tesorero. Tampoco le pidi¨® la dimisi¨®n, seg¨²n diversas fuentes, pero le dej¨® caer un dato clave. La petici¨®n del suplicatorio, el l¨ªmite que el propio B¨¢rcenas se hab¨ªa marcado, era cuesti¨®n de horas, seg¨²n las fuentes del l¨ªder. El PP siempre ha tenido buenos contactos en la justicia. B¨¢rcenas decidi¨® entonces, seg¨²n las mismas fuentes, adelantar su decisi¨®n. Improvis¨®, porque pocos minutos antes ¨¦l hablaba con varias personas y todos ten¨ªan claro que esperar¨ªa al suplicatorio para dimitir. Adelant¨® sus tiempos, pero las condiciones que ¨¦l mismo hab¨ªa impuesto p¨²blicamente se mantuvieron. Dimite de forma temporal, no deja su esca?o de senador -que le permite seguir siendo aforado- y se va ¨¦l, nadie le echa.

Resuelto el eterno entuerto de B¨¢rcenas y pr¨¢cticamente el del diputado Jes¨²s Merino, cuya salida es cuesti¨®n de horas ya que siempre mostr¨® su disposici¨®n a marcharse mientras el tesorero se resist¨ªa, los dirigentes empezaron a mirar a Valencia.

All¨ª est¨¢ el otro gran problema del caso G¨¹rtel, la red de corrupci¨®n vinculada a gobiernos del PP que investigan tres tribunales. Francisco Camps y Ricardo Costa se han quedado ahora sin el escudo de B¨¢rcenas. Ya s¨ª son, de la quincena de dirigentes del PP imputados en el caso G¨¹rtel, los ¨²nicos que no s¨®lo no han dimitido, ni siquiera han puesto su cargo a disposici¨®n del partido. Despu¨¦s de una secuencia ininterrumpida de malas noticias judiciales, el entorno del l¨ªder est¨¢ convencido de que aqu¨ª al fin se llevar¨¢n una alegr¨ªa. Rajoy conf¨ªa en que una sala compuesta por tres jueces conservadores tumbar¨¢ el auto del juez Jos¨¦ Flors en el que dejaba claro que el presidente minti¨® cuando dijo que ¨¦l se paga todos sus trajes. Claro que, se?alan otros dirigentes, Rajoy tambi¨¦n estaba convencido hasta hace un mes de que este caso nunca llegar¨ªa al Supremo...