Gripe de verano

Un d¨ªa de estos, y ojal¨¢ que no tarde, dejaremos de contabilizar casi con nombres y apellidos los "muertos por la nueva gripe", y de hurgar en la intimidad de cada patolog¨ªa y de cada familia. Aunque en realidad semejante renuncia ser¨¢ involuntaria, porque contendr¨¢ una buena y una mala noticia. La mala, que se estar¨¢ cumpliendo lo previsto: miles de defunciones, la mayor parte de personas con serios problemas de salud previos a la fatal actuaci¨®n del virus, mortalidad que por cierto ya se viene produciendo cada oto?o-invierno con desigual incidencia seg¨²n las circunstancias del a?o y de las mutaciones de cada virus.

Quiero decir que cuando nos alcance la inevitable oleada de contagios por la nueva variedad las v¨ªctimas se convertir¨¢n en n¨²meros, parte de la cl¨¢sica estad¨ªstica epidemiol¨®gica. Y seguramente tampoco se analizar¨¢ ni identificar¨¢ qu¨¦ tipo de gripe afecta a cada cual, tanto porque ya no va a ser posible con miles de casos como porque la distinci¨®n, a efectos de tratamiento, no revestir¨¢ la menor importancia.

La buena noticia, si es que la hubiera o hubiese, es que ya no vamos a presenciar a m¨¢s reporteros en directo ante las puertas de los hospitales. Ni a m¨¢s parientes vi¨¦ndose obligados a desmentir (como acaba de ocurrir en Alzira) que su difunto estuviera engripado. Ni m¨¢s primeras p¨¢ginas en un tris de cruzar la l¨ªnea entre la alerta y el p¨¢nico, provocando alarma mientras que, por contra , desde los editoriales del interior, se pide serenidad a un p¨²blico desconcertado y preso del fieramente humano miedo a enfermar.

Esta serpiente de verano puede ser m¨¢s venenosa si acaba desembocando en psicosis, con el consiguiente autoconsumo inadecuado de medicamentos y la aparici¨®n de resistencias. Se habla de liberar la venta del antiviral en farmacias, pero no est¨¢ tan claro que la poblaci¨®n tenga en cuenta que, como todos los medicamentos, es curativo pero no inocuo. Ahora se suministra en los hospitales, aunque parece sensato que tambi¨¦n se trate de evitar la saturaci¨®n de los servicios de urgencias. Mala cosa si un estornudo llegara a dificultar la atenci¨®n de un infarto...

En la log¨ªstica de prevenci¨®n, y aparte del gran negocio de las vacunas y antivirales que se avecina, parece que las cosas se est¨¢n haciendo razonablemente bien. Ya se perfilan los grupos profesionales de riesgo que hay que inmunizar, como el sanitario, ense?antes, cuerpos de seguridad, transporte p¨²blico... am¨¦n de por supuesto a personas enfermas, ancianas, menores, embarazadas... Para septiembre han sido anunciados cursos formativos espec¨ªficos para personal sanitario y escolar as¨ª como informaci¨®n a las empresas sobre c¨®mo actuar en el ¨¢mbito de la evitaci¨®n de contagios y gesti¨®n de las bajas laborales. En el Reino Unido incluso se est¨¢n preparando actividades docentes alternativas a trav¨¦s de Internet y la BBC para quienes que no puedan ir a la escuela, o por si ¨¦stas fueran cerradas.

En la era de los antibi¨®ticos nunca una gripe hab¨ªa clausurado teatros o centros escolares, ni causado semejante despliegue, ni desviado tanto la atenci¨®n de otros asuntos importantes. Por ejemplo, ?alguien se habr¨ªa percatado de la atrocidad del embarazo de esa criatura de 13 a?os si no hubiera contra¨ªdo la gripe A?

P.D. Adem¨¢s de ¨¦sta siempre hay otras excusas para que Canal 9 no informe de las importantes novedades en el caso G¨¹rtel y otras corrupciones y espionajes. La descerebrada ETA ha vuelto a ofrecerles en bandeja dos, y gordas. Enhorabuena, bravos guerreros.