El Bigotes, prestamista para trajes
Dos de los imputados del PP valenciano declararon ante el juez que ?lvaro P¨¦rez adelantaba el dinero para la ropa y uno de ellos se lo devolv¨ªa en c¨®modos plazos
Primero no le conoc¨ªa. Despu¨¦s, no tuvo m¨¢s remedio que aceptar que le era, cuando menos, familiar y la fuerza de los hechos evidenci¨® una ¨ªntima relaci¨®n con ?lvaro P¨¦rez, El Bigotes, un amigo cuya empresa, Orange Market, trabajaba para la Generalitat Valenciana y hac¨ªa generosos regalos a altos cargos del Gobierno auton¨®mico. Francisco Camps vive, a pesar de eso, una tregua en su implicaci¨®n en la trama del caso G¨¹rtel gracias a que el Tribunal Superior de la Comunidad Valenciana (TSJCV) legitim¨® la aceptaci¨®n de unos regalos que ¨¦l y el resto de imputados (Ricardo Costa, V¨ªctor Campos y Rafael Betoret) intentaron justificar como compras en sus declaraciones judiciales. Algunos de ellos, incluso, alegaron ante el juez que El Bigotes hac¨ªa de intermediario para pagarlos.
El juez instructor, Jos¨¦ Flors, dej¨® claro que "no existe constancia" de que los receptores de las prendas "abonaran su precio directa ni indirectamente al establecimiento vendedor, y s¨ª la hay, en cambio, de que las cantidades que por las mismas se adeudaron fueron satisfechas mediante la entrega de cheques librados contra la cuenta de Orange Market". ?lvaro P¨¦rez, pues, pag¨® los trajes de los imputados. De eso no hay duda. Ante esta evidencia, dos imputados optaron por otorgarle un nuevo papel: habr¨ªa prestado el dinero para pagar unas compras. Otro lleg¨® a sugerir que el sastre que les vendi¨® los trajes remit¨ªa a P¨¦rez a la hora de cobrar mientras el cuarto, el propio Camps, insisti¨® en que pag¨® sus trajes en efectivo.
Camps, al principio, neg¨® por activa y por pasiva haber recibido unos trajes que el sastre Jos¨¦ Tom¨¢s, testigo de cargo en la causa, ha detallado con precisi¨®n, no s¨®lo en las medidas sino tambi¨¦n en las preferencias del cliente y el h¨¢bito de no pagarlos. Cuando las pruebas en su interrogatorio le devolvieron la evidencia de algunas adquisiciones, dijo, como consta en uno de sus propios recursos, que pag¨® en efectivo, con dinero de la caja de la farmacia de su esposa, que no guarda tique y que nunca paga ni con tarjeta ni con cheque. No tiene costumbre. De hecho, afirm¨® que el abono de cuatro trajes, por 2.300 euros, lo pudo hacer gracias a que su escolta le prest¨® efectivo, en presencia del ch¨®fer. Quedan, de todas maneras, siete prendas y la cantidad restante hasta 12.000 euros por justificar.
V¨ªctor Campos, ex vicepresidente de la Generalitat, admiti¨® una compra de varias prendas, no las dos que se le imputaban. "Las recibi¨® en mano del propio se?or P¨¦rez en varias entregas y le entreg¨® al se?or P¨¦rez el precio que le dec¨ªa por las sucesivas entregas de aquel encargo", seg¨²n recoge el sumario. De acuerdo con esa declaraci¨®n, a Campos le habr¨ªa adelantado dinero El Bigotes para adquirir varias prendas, aunque tambi¨¦n quedar¨ªan otras sin justificar.
Rafael Betoret, ex jefe de gabinete de la consejer¨ªa de Turismo recurri¨® a la misma excusa. Seg¨²n dijo, ?lvaro P¨¦rez pag¨® sus compras de trajes y ¨¦l despu¨¦s le fue devolviendo el dinero a plazos. Y Ricardo Costa aleg¨® que su secretaria llam¨® varias veces a la tienda de Jos¨¦ Tom¨¢s para saber qu¨¦ se deb¨ªa. El sastre le habr¨ªa dicho que de eso hablara con El Bigotes.
El juez instructor no se crey¨® ninguna de estas explicaciones que presentaban a ?lvaro P¨¦rez como una especie de prestamista de trajes a pol¨ªticos valencianos. Concluy¨® que la trama pag¨® las prendas y que los imputados las aceptaron como regalos.
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